05 May

Federico García Lorca: Vida y Contexto

Federico García Lorca nació en Fuente Vaqueros, el 5 de junio de 1898, en el seno de una familia de posición económica desahogada. Desde la edad de 2 años mostró su habilidad para aprender canciones populares y a muy temprana edad escenificaba en miniatura oficios religiosos. Su salud fue frágil y no empezó a andar hasta los cuatro años. Como estudiante, fue algo irregular, abandonando la facultad de derecho de Granada para instalarse en la **Residencia de Estudiantes de Madrid**. Pasado un tiempo, regresó a la universidad donde se graduó, aunque nunca ejerció su profesión. En 1918 publicó su primer libro, “Impresiones y paisajes”. Durante la **Segunda República**, cumplió una importante función social con **La Barraca**, llevando la cultura a todos los rincones de España. Ideológicamente, se sentía católico, comunista, anarquista, tradicionalista y libertario; nunca se afilió a un partido. Tras una denuncia anónima, el 16 de agosto de 1936 fue detenido y, dos días más tarde, fusilado.

La Obra de Lorca: Poesía y Teatro

La obra poética de Lorca constituye una de las cimas de la poesía de la **Generación del 27**, cuyos autores quieren renovar la poesía entre vanguardia y tradición.

Poesía

Su obra poética está dividida en dos etapas: la etapa de juventud, con sus primeros escritos; y la época de plenitud, que comienza con el **Poema del Cante Jondo**.

Teatro: La casa de Bernarda Alba

Sin embargo, Lorca destaca como dramaturgo. Su teatro es, junto con el de **Valle-Inclán**, el de mayor importancia escrito en castellano en el siglo XX. Es un teatro poético en el sentido de girar en torno a símbolos medulares. La obra teatral **La casa de Bernarda Alba** (1936) es considerada por muchos su obra maestra. Está dividida en tres actos; el comentario corresponde al final del acto III. La obra es considerada como una tragedia y como un drama, con un enfoque social y popular.

El Desenlace Trágico de La casa de Bernarda Alba

Resumen del Fragmento Final

En este fragmento final de la obra, **Adela**, tras estar con **Pepe el Romano**, desafía la autoridad de su madre: rompe su bastón, que simboliza el poder, y sentencia: “¡Aquí se acabaron las voces de presidio!”. Además, confiesa su historia con **Pepe el Romano**. **Adela** es el máximo exponente del deseo de libertad. **Bernarda**, ante esta situación, decide responder buscando una escopeta que acabe con la raíz de los problemas y quiere matar a **Pepe el Romano**. Tras el sonido de un disparo, **Bernarda** le dice a su hija menor: “¡Atrévete a buscarlo ahora!”, y, además, **Martirio** le afirma la muerte de su ‘marido’: “¡Se acabó **Pepe el Romano**!”. Ante esta situación trágica, **Adela** sale corriendo desesperada. Cuando esta sale de escena, **Martirio**, sin embargo, dice que **Pepe el Romano** no está muerto, ya que **Bernarda** no logró dispararle debido a su “condición de mujer”, según esta última. **Magdalena**, la hija inocente, le pregunta a **Martirio** cómo ha sido capaz de decirle tal mentira a su hermana, dejando entrever su carácter tremendamente oscuro, conocido por la envidia y el odio hacia su hermana. **Bernarda** dice que es mejor que **Adela** crea que está muerto. De pronto, un golpe alarma a las mujeres de la casa. Finalmente, al lograr entrar en la habitación donde se encontraba la hija menor, las criadas descubren el trágico destino de **Adela**: el suicidio (“**Poncia**: ¡Nunca tengamos ese fin!”). **Bernarda**, una vez más, muestra su miedo al “qué dirán” y mantiene las apariencias diciendo que su hija ha muerto virgen (**Moral conservadora**). Su frío carácter prohíbe a las hijas llorar, acabando la obra con un “¡Silencio!”.

Ambientación y Tiempo

La acción se desarrolla de madrugada, pues, como conocemos a lo largo de toda la obra, **Adela** y **Pepe el Romano** se ven a partir de la una, cuando **Angustias** se despide de este. En una acotación del fragmento, se dice que se han levantado los vecinos. Al igual que en toda la obra, los sucesos ocurren en el interior de la casa y **Bernarda** sale de escena hacia el corral, entendemos, para intentar matar a **Pepe el Romano**.

Personajes Clave en el Fragmento

En cuanto a los personajes:

  • El lenguaje de **Bernarda** advierte su carácter (“¡Esa es la cama de las malnacidas!”). Además, muestra su preocupación por las apariencias y su moral conservadora.
  • **Martirio**, por su parte, muestra su odio y envidia hacia su hermana **Adela** mintiéndole sobre la muerte de su enamorado.
  • **Adela** es el máximo exponente del deseo de libertad, desafiando incluso a su madre, lo que le conduce a un destino trágico.
  • **Magdalena** es la hija más inocente (“¿Por qué lo has dicho entonces?”).
  • **Angustias** solo interviene dos veces. Aunque quería casarse con **Pepe** para salir de la casa, se siente traicionada por su hermana.
  • Por último, **Poncia**, quien descubre a **Adela** muerta, y la otra criada.

Lenguaje y Estilo

En cuanto al lenguaje, **Lorca** entremezcla el lenguaje popular con el poético. Predomina la función emotiva. El diálogo es fluido. Destaca la importancia de las acotaciones breves y cortas, pero que revelan acciones tan importantes como el sonido de un disparo. Son numerosos los recursos estilísticos que emplea, como la metáfora (“¡Qué pobreza la mía no poder tener un rayo entre los dedos!”, “¡Nos hundiremos todas en un mar de luto!”), los refranes (“La muerte hay que mirarla cara a cara”) y preguntas retóricas (“¿Me habéis oído?”).

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