20 Jun

Contexto Histórico y Literario de la España Contemporánea (1939-1980s)

Tras la Guerra Civil en 1939, la literatura española, y en particular la poesía, atraviesa tres etapas principales que reflejan los profundos cambios sociales y políticos del país.

La Dictadura de Franco (1939-1975)

Durante la dictadura de Franco, la literatura española sufrió una dura represión y censura, lo que provocó un estancamiento intelectual notable. Muchos escritores, como Unamuno y Valle-Inclán, fallecieron durante este periodo, mientras que otros, como Max Aub o Francisco Ayala, se vieron obligados a exiliarse. Algunos autores, como Azorín o Pío Baroja, decidieron regresar a España. Además, el aislamiento político y cultural de los años 40 y 50 impidió la llegada de influencias extranjeras.

La Posguerra (Años 40-60)

La posguerra, entre los años 40 y 60, estuvo marcada por la represión, el aislamiento cultural y la pobreza intelectual.

El Desarrollismo (Años 60-70)

Posteriormente, en los años 60 y 70, el desarrollismo trajo consigo una recuperación económica y una cierta apertura cultural y literaria.

La Transición y la Democracia (Desde 1975)

Con la llegada de la democracia en 1975, se eliminaron las restricciones de la censura y la literatura se renovó. Se comenzó a escribir para un público más amplio, surgieron numerosos premios literarios y se fomentó la diversidad lingüística. La poesía se diversificó, surgiendo nuevas tendencias que reflejaban la libertad creativa.

La Poesía Española: Evolución y Tendencias

Poesía de Posguerra (Años 40)

En la poesía de posguerra se distinguen varias corrientes:

  • Poesía Arraigada: Cultivada por la Generación del 36, fue condescendiente con el régimen. Utiliza formas clasicistas, como el soneto, y muestra un tono heroico y optimista, ensalzando el orden presente. Autores destacados son Luis Rosales, Leopoldo Panero y Dionisio Ridruejo.
  • Poesía Desarraigada: Refleja una profunda angustia y desasosiego existencial, marcada por la lucha espiritual y la falta de esperanza. Influida por Miguel Hernández, tiene un tono tremendista y está representada por Dámaso Alonso, autor de Hijos de la ira.
  • Poesía Vanguardista: De carácter minoritario, incluye movimientos como el Grupo Cántico, que utiliza un lenguaje sensual y neobarroco, con autores como Ricardo Molina y Pablo García Baena, y el Postismo, que revitaliza elementos de la poesía de vanguardia, representado por Carlos Edmundo de Ory.
  • Poesía en el Exilio: Marcada por el tono nostálgico y melancólico, con temas como la patria perdida y la derrota, siendo León Felipe y Juan Ramón Jiménez algunos de sus autores más destacados.

Poesía Social (Años 50)

En los años 50, surge un movimiento influido por el existencialismo que busca documentar las injusticias y promover el cambio social. La poesía social utiliza un lenguaje transparente y accesible, reflejando la realidad cotidiana y temas como la marginación y la falta de libertad. Entre los autores más representativos se encuentran Blas de Otero y Eugenio de Nora.

La Generación del Medio Siglo (Años 50-60)

Conectada con la poesía social, la Generación del Medio Siglo incorpora una mayor preocupación por los problemas sociales, históricos y existenciales, pero también se caracteriza por un lenguaje más personal, irónico y narrativo. Influida por poetas europeos como Eliot y Cavafis, destaca por el rigor formal y su renovación estilística. Algunos autores clave son Ángel González, Jaime Gil de Biedma y Claudio Rodríguez.

Poesía Experimental: Los Novísimos (Años 60-70)

Los Novísimos representan un movimiento vanguardista que rechaza la tradición española y la poesía comprometida, buscando una libertad creativa absoluta. Su actitud formalista los lleva a explorar un lenguaje «de lujo» y se dejan influir por los medios de comunicación y temas contemporáneos como la guerra de Vietnam. Algunos de sus principales exponentes son Pere Gimferrer, Guillermo Carnero y Antonio Colinas.

Poesía de la Experiencia (A partir de los Años 80)

A partir de los años 80, la poesía de la experiencia se consolida como una tendencia accesible y realista. Se centra en temas cotidianos, el paso del tiempo y las relaciones personales, empleando un lenguaje coloquial y sencillo.

La Narrativa Española: De la Posguerra a la Actualidad

La Novela Inmediata de Posguerra (Años 40)

La primera etapa destacada en la narrativa es la novela inmediata de posguerra, correspondiente a la década de los 40. Durante estos años, marcados por la censura ideológica y las dificultades económicas, la mayoría de las novelas se adscriben a la tradición realista. Dentro de este periodo se distinguen dos movimientos principales:

  • Novela Ideológica: Escrita por los llamados «novelistas con el imperio», era afín al régimen franquista, utilizaba técnicas narrativas tradicionales y sus temas giraban en torno a la gesta heroica y la religiosidad.
  • Novela Existencialista: Influida por el tremendismo, ofrece un tono pesimista y sombrío. Este movimiento arranca en 1942 con La familia de Pascual Duarte de Camilo José Cela. También en 1945, Carmen Laforet publica Nada, inaugurando una narrativa que muestra la amargura de la vida cotidiana desde una perspectiva existencial, reflejando la lucha del individuo frente a su destino. Estas novelas realistas inician un camino de renovación formal, utilizando en muchos casos la primera persona narrativa.

La Novela del Realismo Social (Años 50)

La década de los 50 se caracteriza por el auge de la novela del realismo social, representada por la Generación del 50 o del Medio Siglo. En este periodo predomina un compromiso ético y una clara denuncia de las injusticias sociales, influida por la novela norteamericana. Se distinguen dos tipos de enfoques:

  • Realismo Testimonial: El narrador presenta la realidad de forma objetiva y desapasionada, como en El Jarama de Rafael Sánchez Ferlosio.
  • Realismo Crítico: Introduce comentarios explícitos de denuncia social, con narradores que intervienen y personajes de distintas clases sociales, como en La mina de Armando López Salinas.

Renovación Narrativa y Experimentalismo (Años 60-70)

La renovación narrativa y experimentalista surge en los años 60, en un contexto de transformación social marcado por movimientos como el pacifismo, el feminismo y las protestas estudiantiles. Además, en estos años se produce la irrupción en España de los grandes novelistas hispanoamericanos como Gabriel García Márquez, lo que tuvo un gran impacto en la narrativa española. Un autor destacado de este momento es Luis Martín-Santos, quien con Tiempo de silencio introduce técnicas innovadoras y una nueva visión de la novela.

La Antinovela (Años 70)

Finalmente, en la década de los 70, se alcanza la experimentación extrema en la narrativa, conocida también como la antinovela. En esta etapa, se destruyen los elementos tradicionales como el personaje, la acción, la trama y el argumento, en favor de técnicas narrativas innovadoras y fragmentarias. La influencia de escritores hispanoamericanos como Julio Cortázar es fundamental. El resultado son textos de gran complejidad, en ocasiones de difícil comprensión debido a la acumulación de recursos técnicos y narrativos.

La Narrativa en Democracia (A partir de 1975)

En narrativa, destaca el neorrealismo, que rechaza el experimentalismo y recupera técnicas tradicionales. Se busca claridad y conexión con el lector, iniciándose con La verdad sobre el caso Savolta de Eduardo Mendoza.

La Narrativa de los Años 80 y Actualidad

En los años 80, se publican obras antes censuradas, surgen nuevas generaciones de escritores, aumentan los grupos editoriales y se incorpora una gran presencia femenina. La narrativa actual destaca por su variedad temática y estilística, la creatividad individual y el auge de la novela de género. Entre las tendencias y géneros más relevantes se encuentran:

  • Novelas policiacas: (ej. La verdad sobre el caso Savolta de Eduardo Mendoza)
  • Novelas históricas: (ej. Urraca de Lourdes Ortiz)
  • Novelas intimistas: (ej. Marta y Rosa de Francisco Umbral)
  • Novelas culturalistas: (ej. Corazón tan blanco de Javier Marías)
  • Novelas eróticas: (ej. Las edades de Lulú de Almudena Grandes)
  • Novelas de fantasía: (ej. La fuente de la edad de Luis Mateo Díez)
  • Novelas de aventuras: (ej. El maestro de esgrima de Arturo Pérez-Reverte)

El Cuento Español Contemporáneo

Respecto al cuento, tras destacar en la Generación del Medio Siglo con Jesús Fernández Santos, resurge en los años 80 con Juan Eduardo Zúñiga. Se desarrollan varios tipos:

  • Líricos: Con énfasis en la evocación y la sugerencia.
  • Teórico-ensayísticos: De carácter reflexivo.
  • Dramáticos: Con predominio del diálogo teatral.

Predominan los relatos realistas urbanos e intimistas. También surge el microrrelato, caracterizado por su extrema brevedad e ironía.

El Ensayo Español: Reflexión y Evolución

El ensayo es el género preferido para la reflexión social. Su evolución a lo largo de las décadas es notable:

  • Años 40: Buscaba legitimar el régimen.
  • Años 50: Se abrieron nuevos temas universitarios.
  • Años 60 y 70: Aumentaron las voces críticas y la difusión del pensamiento extranjero.
  • Años 80: El ensayo se acercó al lector con un enfoque ético y estético.

Los principales temas actuales son la reflexión sobre la sociedad contemporánea, los medios de comunicación, las nuevas tecnologías y la cultura de consumo. Destacan autores como José Luis López Aranguren (Ética), Julián Marías (La España intangible) y Fernando Savater (Ética para Amador).

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