12 May

Lírica y Elegía en la Literatura Latina

Características Generales

La Lírica

Para los antiguos griegos, y también para los latinos, la definición de lírica partía de aspectos formales y no del contenido. La poesía lírica designaba un canto musical con acompañamiento de la lira.

Ya en el siglo I a.C. surge un grupo de poetas a los que Cicerón denomina poetae novi o neoteroi. El ideal poético de los neotéricos tiene como principio el rechazo de la épica tradicional romana y, en general, toda poesía solemne. Defienden un tipo de composición más o menos breve, refinada, delicada y muy irónica. Los argumentos de sus composiciones son los pequeños detalles de la vida cotidiana.

La Elegía

En la primitiva tradición literaria griega, la elegía era un canto de lamento fúnebre que se entonaba con acompañamiento de flauta. La elegía latina toma de la griega, además del tono de lamento, el aspecto formal de su versificación, que era el dístico elegíaco, compuesto por un hexámetro y un pentámetro.

La elegía latina profundiza en el sentimiento individual e íntimo de tristeza y dolor en la búsqueda de la felicidad a través del amor. Es un tipo de poesía que es expresión de la contradicción, del amor y del dolor; de lo triste y de lo sublime. Tanto la lírica como la elegía surgen a partir del siglo I a.C.

Exponentes de la Época Clásica

Poetas Líricos

Catulo (Gayo Valerio Catulo)

Nacido en Verona, procedía de una familia acomodada y poseía una gran formación intelectual. Su obra poética, Catulli Veronensis Liber, comprende tres grupos de poemas: Un primer grupo de unos 60 poemas breves con temas diversos y cercanos a la vida cotidiana, poemas de amor, críticas políticas y sátiras con diversos personajes. Describe su pasión por una mujer casada, a la que él llama Lesbia, pero cuyo nombre real era Clodia. El segundo grupo son poemas narrativos largos, de estilo más reflexivo y cuidado, como el largo poema Bodas de Tetis y Peleo. El último grupo comprende epigramas de tema variado.

Horacio (Quinto Horacio Flaco)

Natural de Venusa, en el sur de Italia, siguió con sus estudios en Roma, Nápoles y Grecia. Pudo frecuentar el círculo literario de Mecenas. Compuso por encargo de Augusto un Carmen Saeculare para los juegos del año 17 a.C.; también escribió varios libros de sátiras y epístolas poéticas. Sus composiciones líricas más importantes son los Épodos y las Odas (Carmina). Son diecisiete piezas de temas variados en los Épodos. Muchos de los tópicos imitados por poetas de todas las épocas y lenguas, como el beatus ille, el carpe diem o la aurea mediocritas, tienen su origen en las composiciones de Horacio.

Virgilio (Publio Virgilio Marón)

Sus Églogas, también llamadas Bucólicas, son 10 poemas de tema pastoril, unos narrativos y otros en forma de diálogo. El ambiente que refleja Virgilio en esta obra lo sitúa en una irreal y poética región pastoril: la Arcadia, de paisajes idílicos (locus amoenus).

Poetas Elegíacos

Los precursores de la poesía elegíaca en Roma fueron los neotéricos. Se suele considerar el Carmen LXVIII de Catulo la primera elegía escrita en latín.

Tibulo (Albio Tibulo)

Perteneció al prestigioso círculo de poetas de M. Mesala Corvino. Se le atribuyen con seguridad dos libros de elegías, bajo el nombre de Corpus Tibullianum. El primer libro está dedicado a su amada Delia y presenta tópicos característicos del género como el lamento del amante ante la puerta cerrada de la amada (paraclausithyron). El libro segundo contiene seis elegías dedicadas a su nueva amante Némesis, y a varios amigos. Además del tema del amor romántico, Tibulo hace un elogio de la naturaleza y los placeres de la tranquila y pacífica vida campestre.

Propercio (Sexto Propercio)

Fue otro de los poetas del círculo de Mecenas y amigo de Ovidio. Escribió cuatro libros de elegías denominados Carmina o Elegiae. Los tres primeros están dedicados a cantar sus amores y desamores con Cintia. Tras la muerte de Cintia, Propercio decidió abandonar la elegía amorosa y compuso otras obras de carácter patriótico y etiológico.

Ovidio (Publio Ovidio Nasón)

Nacido en Sulmona, estudió retórica en Roma y entró en el círculo de Mesala. Augusto lo desterró a Tomis, en el Mar Negro, donde murió. Sus elegías reflejan dos momentos bien distintos de su vida:

Elegías de tema amoroso:
  • Amores: 3 libros de elegías dedicadas a su amada Corina, donde aparecen todos los tópicos amorosos.
  • Ars amandi (Arte de amar): Poema didáctico en dísticos elegíacos, con recetas prácticas sobre el arte de amar. Consta de 2400 versos en 3 libros que explican el arte de seducir. Los dos primeros libros se dedican a los hombres y el tercero a las mujeres.
Elegías del destierro:
  • Tristia: Cinco libros de elegías, canciones tristes escritas en el destierro.
  • Epistulae ex Ponto (Pónticas): Cuatro libros de cartas elegíacas escritas desde el Ponto, dirigidas a su mujer y a sus amigos.

El Epigrama Latino

Orígenes y Evolución

El epigrama fue importado de Grecia y era originalmente de tono fúnebre o dedicatorio, inscrito en monumentos o tumbas.

Marcial (Marco Valerio Marcial)

Nació en Bílbilis (Hispania Tarraconensis), pero desarrolló su carrera literaria y terminó sus estudios en Roma. Se le atribuyen unos 1500 epigramas, recogidos en quince libros. Siente especial inclinación a describir al hombre y a la mujer romanos con sus virtudes y sus defectos. Por este motivo, su obra es un retrato de las clases sociales, de las pasiones del pueblo, de los vicios y las costumbres de sus habitantes.

Marcial transformó el epigrama: la pequeña pieza de versos, destinada originalmente a ser inscrita en las tumbas y monumentos, él la convirtió en un arma de ironía y sarcasmo. Hay entre ellos también piezas de circunstancias, agradecimientos, descripciones y dos libros de dísticos (Xenia y Apophoreta) destinados a acompañar los regalos a los amigos, o a servir de etiqueta divertida para los objetos que se sorteaban.

El Teatro en la Antigua Roma

Características Fundamentales

El término «teatro» procede del griego θέατρον (théatron), derivado de θεάομαι (theáomai) = ver, contemplar, observar; en latín spectare. Pero con el tiempo pasó a designar el edificio o sitio destinado a la representación de espectáculos.

La palabra «drama» procede del griego δρᾶμα (drâma) = «hacer, actuar». Con este término se designaba en la antigua Grecia un género literario que englobaba la comedia, la tragedia y el drama satírico.

Existía una tradición teatral romana primitiva de tipo popular que se puede observar en distintas manifestaciones como danzas rituales míticas acompañadas de flauta realizadas por bailarines etruscos; ceremonias religiosas donde se recitaban los versus fescennini, que en principio eran cantos de boda improvisados de carácter burlesco y licencioso; sobre todo, una manifestación teatral genuinamente itálica, la fabula Atellana, breve farsa improvisada de tono cómico-satírico y representada por actores no profesionales provistos de máscara que encarnaban personajes arquetípicos: Maccus (el tonto), Bucco (el bocazas), Pappus (el viejo), Dossenus (el jorobado), etc.; y por último, los mimos que se representaban en las Floralia, fiestas en honor de la diosa Flora, que eran imitaciones licenciosas en las que se actuaba sin máscara.

Al principio no existían teatros estables en Roma, y los actores actuaban allí donde había una fiesta. Más tarde se construyeron teatros desmontables de madera, y en el año 55 a.C. Pompeyo mandó levantar el primer teatro romano de piedra. La literatura dramática romana se clasifica en dos tipos fundamentales: tragedia y comedia. Utilizan el verso como forma de expresión y suelen alternar partes dialogadas (diverbia) con las cantadas (cantica) por el coro o los actores, acompañadas a veces de música y danza.

Subgéneros Dramáticos

Tragedia

  • Fabula graeca (o cothurnata): De tipo griego. Tragedia de argumento griego; se caracterizaba porque los actores usaban el «coturno» o bota alta.
  • Fabula praetexta: De tipo romano. Tragedia de argumento romano. Toma el nombre de la «toga praetexta», vestidura blanca con banda púrpura que llevaban los magistrados romanos y, en este contexto, los actores que la representaban.

Comedia

  • Fabula palliata: De tipo griego. Comedia de ambiente griego e inspirada en obras de autores griegos. Recibía este nombre porque los actores se cubrían con el «pallium» o manto griego.
  • Fabula togata: De tipo romano. Comedia sobre temas y personajes romanos. Los actores vestían la toga, prenda que vestían los ciudadanos comunes en Roma.

En el siglo I a.C. se puso de moda, sin llegar a arraigar, otro tipo de obra teatral, un drama que reflejaba el ambiente de la clase media romana y que se denominó fabula trabeata (por la «trabea», vestido de los equites o caballeros).

Desarrollo Cronológico

Época Arcaica

Tragedia

Entre los primeros trágicos destacan Livio Andrónico, Nevio, Ennio, Pacuvio y Lucio Accio.

Comedia
Plauto (Tito Maccio Plauto)

Fue un autor muy prolífico al que se le llegan a atribuir hasta 130 obras, si bien nos han llegado unas 21. Sus obras pertenecen al subgénero de la fabula palliata e imitan a los autores griegos de la Comedia Nueva Ática, en especial a Menandro. Pero el poeta hace de sus protagonistas auténticos personajes romanos, utiliza personajes muy estereotipados: el esclavo astuto (servus callidus), el joven enamorado (adulescens amans), la doncella raptada, el alcahuete avaro (leno), el soldado fanfarrón (miles gloriosus), etc., y los coloca en situaciones cómicas que provoquen la carcajada, aunque para ello recurra a situaciones escabrosas, chistes groseros, alusiones obscenas, etc., muy del agrado de su público.

Las comedias de Plauto constan generalmente de cinco actos, casi todas precedidas de un prólogo en el que uno de los personajes cuenta el argumento de la obra. La trama argumental predominante consiste en personas y objetos perdidos y, tras una serie de situaciones en las que parece que no hay salida, se produce el reconocimiento o hallazgo (agnitio) con final feliz.

Algunas de sus obras son:

  • Amphitruo (Anfitrión): Única de tema mitológico, sobre el nacimiento de Hércules.
  • Miles Gloriosus (El soldado fanfarrón).
  • Aulularia (La comedia de la olla).
  • Captivi (Los cautivos).
Terencio (Publio Terencio Afro)

De él sólo conservamos seis comedias. Su lenguaje, más cuidado y elegante, no tiene la exuberancia verbal ni la comicidad directa de Plauto. Trata de dotar a sus personajes de rasgos personales, mayor carga psicológica y un comportamiento ejemplar (humanitas). Sus obras más conocidas son: Hecyra (La suegra), Adelphoe (Los hermanos), y Eunuchus (El eunuco).

Época Posclásica

Tragedia
Séneca (Lucio Anneo Séneca)

Nacido en Córdoba (Hispania), marchó a Roma para educarse y allí comenzó su carrera política, llegando a ser el preceptor de Nerón, quien más tarde lo condenó a muerte acusado de conspiración. La producción literaria de Séneca es muy amplia y variada. Conservamos nueve piezas trágicas, todas ellas fabulae cothurnatae de tema mitológico: Agamenón, Medea, Fedra, Troyanas, etc. Sigue el modelo de los autores griegos (Esquilo, Sófocles y Eurípides), pero en ellas el tratamiento del mito es tan libre que se convierte en un pretexto para aludir a sucesos políticos contemporáneos y explorar las pasiones humanas. Sus obras están cargadas de reflexiones filosóficas y un tono retórico y sentencioso, lo que ha llevado a algunos estudiosos a pensar que sus obras estaban destinadas más a la lectura y recitación que a la representación escénica.

La Epistolografía Latina

Características del Género

La epistolografía es el género literario que se escribe en forma de carta (epistula), dirigida a una persona conocida, a lectores indeterminados o a personajes de ficción. Tenía una estructura formal (salutatio, corpus, conclusio) con influencia de diferentes géneros literarios. Este género, aunque con entidad propia, a menudo se relaciona con la oratoria por su cuidada composición y finalidad persuasiva o informativa.

Autores Destacados y sus Obras

Cicerón (Marco Tulio Cicerón)

Epistulae ad familiares (Cartas a familiares), Epistulae ad Atticum (Cartas a Ático), Epistulae ad Quintum fratrem (Cartas a su hermano Quinto) y Epistulae ad Marcum Brutum (Cartas a Marco Bruto) es una vasta colección de la correspondencia privada de Cicerón. Se conservan cerca de 900 cartas, que ofrecen un testimonio invaluable de su vida, su tiempo y la sociedad romana.

Séneca (Lucio Anneo Séneca)

Epistulae Morales ad Lucilium (Cartas morales a Lucilio). Son 124 cartas de contenido filosófico estoico, presentadas como un diálogo entre maestro y alumno, que abordan temas éticos y de desarrollo personal.

Horacio (Quinto Horacio Flaco)

Epistulae: Dos libros de cartas escritas en verso (hexámetros). Destaca la última epístola del segundo libro, conocida como Ars poetica, donde da consejos sobre la creación literaria, especialmente la lírica y el drama.

Ovidio (Publio Ovidio Nasón)

  • Heroides (Cartas de heroínas): Colección de cartas ficticias escritas por heroínas de la mitología clásica a sus amantes ausentes.
  • Epistulae ex Ponto (Cartas desde el Ponto): Ya mencionadas en la sección de elegía, son epístolas elegíacas dirigidas al emperador Augusto, a su esposa y a amigos, solicitando el fin de su exilio.

Plinio el Joven (Gayo Plinio Cecilio Segundo)

Epistulae: Su correspondencia se divide en dos grandes bloques:

  • Correspondencia privada: Nueve libros de cartas (Epistularum Libri IX) dedicados a parientes y amigos. Estas cartas, sin fecha y cuidadosamente elaboradas, no siempre fueron enviadas en el momento de su redacción, sino escritas con la intención de ser publicadas; en ellas se describe la sociedad en la que vive, sus actividades y reflexiones.
  • Correspondencia oficial con el emperador Trajano: El décimo libro (Panegyricus Traiani Augusti et Epistulae ad Traianum Imperatorem) contiene la correspondencia administrativa entre Plinio, como gobernador de Bitinia-Ponto, y el emperador Trajano, ofreciendo una visión única de la administración provincial romana.

Plinio el Joven muestra un gran cuidado en el estilo y vocabulario de sus cartas.

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