21 Ago
El Teatro Español del Siglo XX: De la Posguerra a la Transición
Este documento explora dos obras fundamentales del teatro español del siglo XX, situándolas en sus respectivos contextos históricos y literarios para comprender su relevancia y características distintivas.
1. Gaviotas subterráneas (1985) de Alfonso Vallejo
1.1. Contexto Histórico y Literario
La obra del siglo XX posterior a 1974 que hemos leído es Gaviotas subterráneas, obra de 1985 escrita por Alfonso Vallejo, caracterizada por un alejamiento y la representación del ser humano. Esta obra se incluye dentro del teatro actual, etapa que supuso la recuperación del teatro con el regreso de la libertad de expresión, la eliminación de la censura y el retorno de los escritores exiliados. Esta época de desarrollo estuvo marcada por la caída del Muro de Berlín, el final de la Guerra Fría y la desintegración de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. En España, tras la muerte de Franco (1975), Juan Carlos I es nombrado jefe de Estado y se inicia la Transición del régimen a una monarquía constitucional. Se produce un auge económico y social ante la posibilidad del cambio político. Este proceso culminaría en un régimen de libertades similar al resto de Europa. Entre las medidas de mayor trascendencia de esta etapa, destaca la incorporación de España en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en 1981.
1.2. Argumento y Características Dramáticas
Nino y Mario eran muy buenos amigos cuando eran jóvenes; se distanciaron, pero después de varios años se volvieron a encontrar. Es en ese momento cuando Nino le pide ayuda a Mario para llevar a cabo un plan que llevaba pensando mucho tiempo. Mario le ayuda y, tras ello, aprovecha para hacer a Nino reflexionar sobre su vida.
La obra está caracterizada por la libertad y la dispersión de tendencias, así como por la renovación del teatro; todo ello marcado por un condicionante económico, característica sobre la que gira toda la obra. Gaviotas subterráneas es un microteatro, es decir, una nueva forma de teatro que permite crear historias muy diversas que buscan acercarse a un público diferente. Además, es de duración breve, ya que solo presenta dos actos de corta duración, junto con dos personajes, característica de los microteatros que suelen tener entre dos y cuatro personajes. A su vez, cuenta con un escenario único con poca decoración (un cuarto con ventana, mesa, silla y escoba, como se describe al principio de la obra), unido a un escaso vestuario también descrito al principio. Esta obra utiliza la experimentación como medio de renovación; es a través de ella como el autor construye una trama inusual, sorprendente y con giros inesperados que captan la atención del espectador, todo ello siguiendo una única línea argumental. Por último, el autor, al final de la obra, ofrece una enseñanza en la que explica el significado del título. Con Gaviotas subterráneas, Alfonso Vallejo se refiere a la bondad y grandeza que emerge en los malos momentos, pero que nunca desaparece y es, además, lo que diferencia a cada persona y le permite seguir viviendo, todo ello con una reflexión moralizante sobre la amistad. Gaviotas subterráneas está marcada principalmente por la muerte del general Franco y el inicio de la Transición, además de por la renovación dramática debido a la apertura del régimen franquista y las influencias del teatro europeo. Presenta una actitud crítica y alegórica, con un realismo cargado de símbolos que necesitan ser representados, en contraste con el teatro de la década anterior, al que pertenecen el teatro experimental y vanguardista.
2. Historia de una escalera (1949) de Antonio Buero Vallejo
2.1. Contexto Histórico y Literario
La obra del siglo XX posterior a 1936 que hemos leído es Historia de una escalera, obra de 1949 escrita por Antonio Buero Vallejo, con la que inaugura una nueva etapa en el teatro español. Esta obra se incluye dentro del drama social, es decir, en el teatro de los años cincuenta, etapa que supuso una vocación de denuncia en la que los autores tratan de reflejar y criticar la violencia y la injusticia social de la posguerra. Esta época de desarrollo sufrió las consecuencias de la Guerra Civil Española, la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría. Durante todo ese proceso, en España existieron desigualdades económicas y sociales que la convirtieron en uno de los países más pobres de Europa occidental. Todo ello llevó también a un grave deterioro de las condiciones de vida de los ciudadanos. En 1955, España fue admitida como miembro de la Organización de las Naciones Unidas y, a partir de 1959, con el Plan Nacional de Estabilización, se iría produciendo el paulatino abandono de la autarquía. Además, comenzó un periodo migratorio, tanto del campo hacia la ciudad como de trabajadores hacia los países desarrollados de Europa.
2.2. Argumento y Características Dramáticas
Esta obra gira en torno a una comunidad de vecinos que se desarrolla en tres generaciones; en ellas se producen cambios entre las visiones de futuro de cada uno de los personajes, sobre todo de los más jóvenes, así como de las relaciones que surgen entre ellos y la realidad de los sentimientos que aparecen en cada uno, generando así una frustración en los personajes. La obra marca el inicio de una nueva etapa en el teatro español, dado que supone una ruptura con los escenarios burgueses de las comedias de evasión y con la temática de un teatro alejado de la realidad española. Entre sus elementos principales se encuentran la identificación del público con los personajes, ya que la realidad se presenta tal como la vive el personaje. A su vez, los personajes encarnan actitudes opuestas en el modo de afrontar la realidad. Con esto, el autor busca provocar la reflexión en el espectador y que este tome partido por uno de ellos. Además, el detallismo en las acotaciones no solo describe minuciosamente los escenarios, sino también los gestos, los movimientos y las actitudes de los personajes. Por último, está presente la dimensión simbólica en los personajes y en los recursos escénicos, como es el caso de la escalera. Esta representa tanto el paso de los años (sirve como nexo de las generaciones y de todos los vecinos que viven ahí) como el paso del tiempo, ya que al principio se puede observar una escalera nueva que con el transcurso de los años se va deteriorando. El estilo en Historia de una escalera presenta un lenguaje culto, pero accesible a todo el público. Además, los diálogos son fluidos y, según la forma de expresarse los personajes, se pueden captar sus sentimientos y características. Historia de una escalera está marcada principalmente por la Guerra Civil Española y la censura previa aplicada por el régimen franquista, que convirtió la década anterior en un teatro de evasión que no cuestionaba los valores del régimen y solo pretendía el entretenimiento del público y la rentabilidad comercial de las obras.
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