12 Abr

Introducción

El Romancero Gitano se publicó en 1928 en la Revista de Occidente, aunque la mayoría de los poemas habían sido difundidos anteriormente por su autor en revistas literarias y en recitales poéticos. El libro alcanzó inmediatamente un enorme éxito, por lo que en los años posteriores se sucedieron las reediciones. La obra supuso la culminación de la primera etapa poética de Lorca, la neopopularista (Canciones, Poema del cante jondo y Romancero gitano), en la que Lorca realiza una recreación, personal y muy innovadora, de las formas poéticas tradicionales, fusionando lo popular y lo culto, junto con tradición y vanguardia.

1. Temas principales

La obra recoge 18 romances en los que se exalta el mundo gitano desde una perspectiva mítica e idealizada, alejada de una realidad concreta. Los gitanos de Lorca encarnan al ser humano libre y primitivo, que vive al margen de leyes y convenciones sociales. Pero esta visión mitificada de la cultura gitana es un recurso del autor para plasmar, de forma personalísima, un tema universal que recorre toda su obra: el enfrentamiento de la pasión y el instinto vital con la ley, la norma y las imposiciones sociales. Así, la frustración, el dolor, el destino trágico y la muerte son temas centrales de la obra.

Motivos temáticos fundamentales

1.1. El amor frustrado

El ansia de amor y el deseo erótico, tema básico de su poesía, aparece siempre insatisfecho o truncado por la violencia y la muerte. Excepto en el romance “La casada infiel”, en el que el deseo erótico es superficial y físico, en todos los demás poemas el erotismo tiene consecuencias negativas, pues suele generar frustración, violencia o la muerte.

1.2. Violencia y muerte

La violencia y la muerte recorren toda la obra. Desde el primer poema, que poetiza la muerte de un niño gitano, todos los romances contienen una enorme variedad de hechos violentos: peleas, reyertas, suicidio, muerte enamorada, asesinato colectivo. En ocasiones la violencia surge de los elementos de la naturaleza, que se muestra como una fuerza despiadada (la luna, el viento).

1.3. El dolor y la frustración

El conflicto entre el ansia de libertad individual y la represión que provoca dolor y frustración es un tema esencial en toda la literatura lorquiana.

1.4. El destino trágico

Todos los personajes de la obra son seres al margen de un mundo convencional y hostil, y por ello, marcados por el dolor y la Pena. El desenlace inevitable será siempre la Muerte, verdadera protagonista de la obra.

1.5. El mundo andaluz

García Lorca recrea en su obra la realidad andaluza: paisaje, tipos, costumbres y actitudes de los gitanos, idealizados como seres libres que acaban sucumbiendo a su destino trágico. La acción transcurre mayoritariamente en espacios andaluces: Montilla, serranía de Cabra (Córdoba), el Albaicín, los olivares de Jaén (“tierras de aceituna”); Antoñito el Camborio es detenido camino de Sevilla y muere “cerca del Guadalquivir” y sus primos Heredia son del pueblo cordobés de Benamejí.

1.6. Denuncia social

Aunque no se trata de una obra de denuncia social, esta perspectiva crítica está presente en muchas de las composiciones: en el “Romance de la Guardia Civil”, se muestra la figura del gitano marginal oprimido por la fuerza represiva que encarna la Guardia Civil. En “La monja gitana” refleja una crítica a la represión religiosa de los instintos. En “Muerto de amor” se manifiesta la desigualdad social. En “San Rafael” aparece la marginación de la homosexualidad.

2. Estructura externa e interna de la obra

2.1. Estructura externa

Metro y Rima

La obra está compuesta por 18 romances de extensión variable: los más breves constan de 36 versos y el más largo (“Romance de la Guardia Civil”) tiene 124 versos. Salvo algunas excepciones, la mayoría de los poemas tiene el esquema métrico tradicional del romance: una serie indefinida de versos octosílabos con rima asonante en los versos pares. Predomina la rima asonante solo en los versos pares, propia del Romancero viejo y nuevo; aunque, también aparecen algunas excepciones. En algunos poemas, la estructura métrica refleja la estructura interna del poema, marcando las partes con el cambio de asonancia, aunque en la mayoría las partes se marcan con asteriscos o con espacios en blanco (estas secuencias suelen marcar cambio de espacio, tiempo, personajes o perspectiva). El único que no tiene subdivisiones es “La monja gitana”.

2.2. Estructura interna

La obra se articula en torno a dos bloques temáticos: los poemas de tema gitano y tres romances de tema histórico-legendario (con el intermedio de los tres romances dedicados a ciudades andaluzas).

Bloque 1: Poemas del 1 al 15. Temas propiamente gitanos

Es la parte más extensa. Contiene la recreación lorquiana de un mundo gitano, mítico y legendario, que no se identifica exactamente con la realidad. Se abre y se cierra con el protagonismo de la luna. Dentro de esta parte se pueden establecer las siguientes subdivisiones:

1. Romance-prólogo
  • (1) “Romance de la luna, luna”: Funciona como un prólogo en el que la influencia maléfica de la luna sobre los gitanos anuncia el destino trágico de esta raza.
2. Cinco romances de protagonista femenina

En ellos predomina el tema de la frustración amorosa o vital. Se caracterizan por el protagonismo de las mujeres:

  • Preciosa (2º), que sufre el acoso del aire, símbolo del deseo sexual masculino (“Preciosa y el aire”).
  • La gitana suicida por amor del “Romance sonámbulo” (3º).
  • La reprimida monja gitana del 5º (“La monja gitana”).
  • “La casada infiel” (6º).
  • Soledad Montoya (7º), encarnación de la “Pena negra”, personaje femenino característicamente lorquiano, anhelante y frustrado (“Romance de la pena negra”).
3. Romances 8-10, dedicados a tres ciudades andaluzas

Estos tres poemas, dedicados a los patrones (arcángeles) de tres ciudades, suponen un intermedio en el primer bloque y constituyen una exaltación de dichas ciudades andaluzas:

  • (8) “San Miguel” (Granada).
  • (9) “San Rafael” (Córdoba).
  • (10) “San Gabriel” (Sevilla): Recreación poética del pasaje bíblico de la Anunciación.
4. Cinco romances con protagonistas masculinos

Todos ellos marcados por un destino trágico y en los que predominan la violencia y la muerte:

  • (4) “Reyerta”: Lucha fratricida entre gitanos, que los conduce a la autodestrucción.
  • (11) “Prendimiento de Antoñito el Camborio en el camino de Sevilla”: La pérdida de las señas de identidad del pueblo gitano, oprimido y marginado por la sociedad.
  • (12) “Muerte de Antoñito el Camborio”: La muerte heroica del gitano, provocada por la envidia, conlleva la recuperación de su dignidad, perdida en el romance anterior.
  • (13) “Muerto de amor”: La muerte trágica de un joven, probablemente traicionado por la mujer amada.
  • (14) “Romance del emplazado”: La serenidad del gitano ante la muerte anunciada.
5. Romance-epílogo de la primera parte

Símbolo de la destrucción del universo gitano (=libertad frente a las normas sociales):

  • (15) “Romance de la Guardia Civil española”: Representa el martirio colectivo de un poblado gitano, asaltado durante la noche por la Guardia Civil, con la luna menguante como testigo.

Bloque 2: Romances histórico-legendarios (16-18)

Ambientados en el mundo paleocristiano, medieval y bíblico.

  • (16) “Martirio de santa Olalla”: Relato del suplicio de Santa Eulalia durante la persecución del emperador Diocleciano (siglo III d. C.).
  • (17) “Burla de don Pedro a caballo”: Enigmático romance en el que un caballero muere cuando regresa a casa en busca de la seguridad y el cariño del hogar.
  • (18) “Thamar y Amnón”: Relato de las relaciones incestuosas entre dos hijos del rey David.

3. Componentes simbólicos y míticos

El símbolo es una imagen física que sugiere una abstracción, algo que no es perceptible por los sentidos (una idea, un sentimiento). Lorca utiliza en el Romancero Gitano, como en toda su obra, una gran variedad de símbolos, en los cuales afloran los mitos humanos más arcaicos, un conjunto de temores e impulsos irrefrenables que remiten a un pasado inmemorial y primitivo: el ansia de libertad, el impulso sexual, la violencia, la muerte.

El gitano, protagonista de la obra, es el símbolo omnipresente del enfrentamiento entre primitivismo y civilización, entre libertad y sometimiento, por lo que acaba sucumbiendo a su fatum, a su destino trágico. Pero toda la obra contiene una amplia y variada simbología, procedente tanto de la tradición popular como de la culta, aunque su valor no es siempre unívoco, pues algunos símbolos cambian su significado en contextos diferentes (como, por ejemplo, el color verde o el caballo).

Símbolos de significación maléfica

  • La luna: En casi todas las mitologías primitivas, la luna se asocia a lo femenino y el sol a lo masculino (en el primer romance es descrita con atributos femeninos). En el Romancero Gitano es un elemento maléfico que presagia o acompaña a la muerte (por ejemplo, en el romance prólogo y el epílogo).
  • Los metales: Suelen tener connotaciones negativas. Se asocian al frío de la muerte y al material de cuchillos, puñales o clavos que van unidos al conflicto y la violencia. Los cuchillos a veces se asocian a la valentía y agresividad, al concepto gitano de la hombría. El bronce y el cobre representan, a menudo, el color de la piel gitana.
  • El color: Tiene mucho protagonismo en la obra, pues el simbolismo de algunos poemas se construye alrededor de un color (el blanco espectral de la luna, el verde del deseo erótico violento, el negro de la noche de tragedia…). Algunos colores adoptan valores del folclore tradicional: el verde, frustración amorosa y muerte (en “Romance sonámbulo”), pero simboliza el instinto sexual masculino violento en “Preciosa y el aire”; el amarillo, el blanco y el malva suelen ser portadores de malos augurios (“Muerto de amor” v. 11; “La monja gitana v. 2). El negro suele tener connotaciones negativas, asociado a la muerte (“Romance de la Guardia Civil”) y es la materialización simbólica de la pena, que tiñe por completo a Soledad Montoya.
  • Los pozos, aljibes y el agua estancada: Suelen ser escenarios propicios para la muerte, pero, a veces, simbolizan la pasión estancada, sin salida.
  • El mar: Como en Machado, se asocia a la muerte (“Romance de la pena negra”), pero en el “Romance sonámbulo” es símbolo de felicidad amorosa.
  • El árbol: Evoca la cruz del martirio de Cristo (“Martirio de Santa Olalla”), por tanto, símbolo de sufrimiento.
  • Flores: Siemprevivas, adelfas, malvas, ortigas, son de mal presagio, se asocian a la muerte. Las campanillas y azucenas simbolizan la alegría, la pureza y la fertilidad.
  • La cal: Se relaciona con los enterramientos pues ha sido utilizada, secularmente, para evitar la propagación de enfermedades.
  • La zumaya: Es ave de mal agüero (“Romance de la luna, luna”).

Símbolos con connotaciones eróticas

  • El río, que fluye como la vida, y los juncos suelen ser lugares de connotaciones positivas, propicios para los encuentros amorosos. El mar representa, a veces, el ansia de felicidad amorosa (“Romance sonámbulo”).
  • El olivar y las rosas, como en el folclore tradicional, se asocian a la pasión amorosa.
  • El caballo: Representa la pasión desenfrenada que conduce a la muerte, pues nunca alcanza su destino. Suele tener connotaciones eróticas, pero también el presagio de la muerte (“Martirio de Santa Olalla” v. 2) o el caballo malherido que llama a todas las puertas del poblado de los gitanos en “Romance de la Guardia Civil”.
  • El viento: Suele aparecer personificado, es símbolo del deseo erótico masculino en “Preciosa y el aire”, es presagio de la tragedia en “Romance de la Guardia Civil” (v. 33).

4. Rasgos formales: entre tradición e innovación

El estilo del Romancero Gitano se caracteriza por su peculiar síntesis de tradición y modernidad. En la obra se aprecian huellas de la tradición literaria popular (el Romancero Viejo y la copla) y culta (la poesía culteranista de Góngora), además de la influencia de las vanguardias, evidente, sobre todo, en la riqueza y originalidad de las metáforas, muchas de ellas de carácter irracional.

4.1 Rasgos populares

En la obra aparecen muchos de los rasgos del Romancero Viejo:

  • Composiciones lírico-narrativas: En todos los poemas se mezcla lo lírico (la expresión de un sentimiento predominante) con lo narrativo, con la presencia de una historia.
  • Metro y rima: La inmensa mayoría de los poemas presenta el esquema métrico del romance tradicional: serie indefinida de versos octosílabos, con rima asonante en los versos pares (solo dos poemas se desvían de este modelo).
  • Fragmentarismo: El comienzo in media res o el final abrupto, abierto y enigmático, o el comienzo del poema con las conjunciones ‘y’ o ‘que’ dan a algunos poemas un valor continuativo, como si fuesen el fragmento de una composición más extensa. Los finales abiertos subrayan la ambigüedad significativa de algunos poemas (“Burla de Don Pedro a caballo”).
  • Figuras de repetición: Repetición de palabras, epanadiplosis, la anáfora, paralelismo sintáctico, la repetición del adverbio ‘ya’ en el comienzo de versos sucesivos, para acercar los hechos al lector.
  • Dramatización: Es frecuente la inclusión de diálogos en estilo directo, sin verbo introductor ni indicación de quién habla.
  • El apóstrofe: Interpelación a un personaje en un momento de tensión dramática (“Antonio, ¿quién eres tú?”; “Soledad: ¿por quién preguntas?”) o las apelaciones a un supuesto auditorio (“Pero ¿quién vendrá…? ¿Y por dónde?”).
  • La libertad en el uso de los tiempos verbales: Son llamativos los cambios bruscos de presente a pasado o futuro dentro del mismo poema.
  • Exactas referencias temporales y espaciales: (“A las nueve de la noche”; “A la mitad del camino”).
  • Estribillo: Repetición rítmica de una serie de versos. Recurso propio de la copla popular (“Muerte de Antoñito el Camborio”).

Otros rasgos característicos

  • Realismo: Lorca recrea en cada poema de forma lírica y personalísima un acontecimiento identificable, de base realista.
  • Antropomorfización: Humanización de elementos naturales (la luna, el viento) o de animales o animalización de objetos.
  • Simbolismo: La poesía de Lorca es eminentemente simbólica. Muchos de los símbolos reiterados en sus poemas proceden de mitologías arcaicas, mientras que otros proceden de tradiciones populares.
  • Importancia del color, muchas veces con valor simbólico.

4.2 Rasgos vanguardistas

La abundancia, brillantez y originalidad de las imágenes es quizá el rasgo estilístico más reconocible del Romancero Gitano y en el que mejor se aprecia la influencia de los movimientos vanguardistas de principios del siglo XX (aunque tampoco es ajena la influencia del poeta barroco Luis de Góngora). Lorca utiliza una variadísima gama de imágenes, desde los tropos tradicionales (símil, metáfora, alegoría, metonimia, símbolo), desplazamientos calificativos y sinestesias hasta las más audaces imágenes vanguardistas, en las que conecta ámbitos de la realidad muy dispares. El hermetismo, la dificultad de interpretación de algunas imágenes es otro rasgo gongorino y, al mismo tiempo, vanguardista. “Romance sonámbulo”, los tres dedicados a los arcángeles y el “Romance con lagunas” (Nota: Este último título no aparece listado previamente, podría referirse a»Burla de don Pedro a caball» o ser una errata) son, probablemente, los poemas más herméticos, que han originado variadas interpretaciones.

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