04 Dic

La Literatura Realista y Naturalista

Son dos corrientes literarias íntimamente vinculadas entre sí, que se caracterizan por el afán de sus autores de presentar una visión objetiva de la realidad de su tiempo.

Características del Realismo

Algunas de las características principales son:

  • Búsqueda de la objetividad: Interés por la realidad desde una distancia que permita ser objetivo y, a la vez, ofrecer una visión crítica. Predomina el empleo del narrador omnisciente.
  • Empleo del diálogo con afán verista: Se persigue reproducir el habla real de los personajes. Se encuentran el estilo directo, el monólogo interior y el estilo indirecto libre.
  • Introducción de descripciones detalladas y exhaustivas: El entorno juega un papel esencial en la novela realista.
  • Interés por los temas contemporáneos: Reflejo de cuanto sucede en la vida cotidiana, relaciones entre la burguesía. Entre los temas que abordan destacan motivos como las diferencias sociales y, de modo muy particular, el adulterio.

Rasgos Particulares del Naturalismo

El Naturalismo, iniciado por Émile Zola, se distingue por:

  • El interés por la dimensión fisiológica y biológica de los personajes.
  • El estudio de las condiciones de vida de las clases más desfavorecidas.

El Prerrealismo y sus Autores

Predomina el gusto por lo pintoresco y lo costumbrista; los personajes carecen de profundidad.

  • Cecilia Böhl de Faber: La Gaviota.
  • Pedro Antonio de Alarcón: El sombrero de tres picos.

Autores y Obras Clave del Realismo y Naturalismo Español

El Realismo comienza con la publicación de La Fontana de Oro de Pérez Galdós.

  • Benito Pérez Galdós: Fortunata y Jacinta, Tormento o Misericordia.
  • Leopoldo Alas Clarín: La Regenta.
  • José María de Pereda: Peñas arriba o Sotileza.
  • Juan Valera: Pepita Jiménez.

El Naturalismo tuvo su máximo esplendor con Emilia Pardo Bazán, autora de Los pazos de Ulloa y La madre naturaleza, y Vicente Blasco Ibáñez, con obras como Cañas y barro, La barraca y La horda.

Benito Pérez Galdós: La Cima del Realismo Español

Galdós constituye la cima del Realismo español. Fue creador de personajes y hábil en el uso de la ironía y la descripción del ambiente. Sus novelas componen un retrato ambicioso y fiel de la sociedad española del siglo XIX. Se distinguen cuatro etapas:

  1. Primera etapa (Novelas históricas): Comienza con los Episodios Nacionales. Relata la historia de España y las novelas se agrupan en cinco series.
  2. Segunda etapa (Novela de tesis): Plantea un conflicto de tipo ético o filosófico. Las ideas conservadoras se contraponen a los principios liberales. Ejemplo: La Fontana de oro.
  3. Tercera etapa (Novelas españolas contemporáneas): Refleja la ciudad de la época y tienen un carácter complejo. Los temas abordados reflejan la defensa de las ideas liberales. Ejemplos: Fortunata y Jacinta, Tormento.
  4. Cuarta etapa (Novelas idealistas): Da cabida a elementos originales desde el punto de vista narrativo. Ejemplo: Misericordia.

Leopoldo Alas Clarín y La Regenta

Leopoldo Alas Clarín es un autor de transición, creador de La Regenta. Se aprecia en su obra la influencia de las tesis naturalistas. Escribió novelas como La Regenta o Su único hijo, y relatos breves como Pipá.

La Regenta se centra en un trío de personajes:

  • Ana Ozores: La Regenta, protagonista de la novela.
  • Fermín de Pas: El Magistral, hombre de la Iglesia que debe hacer frente a una doble pasión.
  • Álvaro Mesía: Galán venido a menos, fascinado por la belleza de Ana y su fama de pureza.

La estructura de la novela se compone en dos partes.

Emilia Pardo Bazán y la Cuestión Palpitante

Emilia Pardo Bazán es esencial en la narrativa española. Defendía el Naturalismo, lo cual resultaba especialmente sorprendente en la época, pues se consideraba que el movimiento francés era contrario a la religión cristiana y, por lo tanto, herético.

Escribió una serie de artículos bajo el título La cuestión palpitante, y novelas como Los Pazos de Ulloa o La madre Naturaleza.

En Los Pazos de Ulloa, los temas que se abordan son la violencia, el caciquismo y la oposición clásica entre la civilización y la barbarie. En cuanto al estilo, es relatada desde una voz narradora omnisciente.

El Teatro y la Poesía Realista

El Teatro Realista

El teatro realista abandonó la declamación exagerada del teatro anterior y apostó por la representación de situaciones verosímiles. En España predominaron estos subgéneros dramáticos:

  • La alta comedia: Compuesta por piezas de marco burgués, trama sentimental con final feliz. Ejemplos: Manuel Tamayo y Baus, Un drama nuevo; José Echegaray, El Gran galeoto o La duda.
  • El teatro social: Pretende retratar con ánimo realista distintos aspectos de su tiempo. Ejemplos: Joaquín Dicenta, Juan José; Benito Pérez Galdós, Electra o La loca de la casa.

La Poesía Realista

La poesía perdió protagonismo, ya que los autores estaban más interesados en la novela. Se limitaron a cultivar dos líneas poéticas:

  • La poesía antirromántica y prosaica: Se parodia a los tópicos del Romanticismo. Representante: Ramón Campoamor.
  • La poesía filosófica: De tono discursivo, reflexiona sobre cuestiones sociales o éticas. Representante: Gaspar Núñez de Arce.

El Novecentismo (Generación del 14)

Los autores de la Generación del 14, en su afán de innovación, intentaron alejarse tanto de los excesos frívolos del Modernismo parnasiano como de los intereses por el paisaje y el mundo castellano propios del 98.

Rasgos Característicos del Novecentismo

  • Racionalismo
  • Europeísmo
  • Intelectualismo
  • Elitismo
  • Clasicismo

Juan Ramón Jiménez: La Voz Poética

La voz poética más destacada del Novecentismo es, sin duda, Juan Ramón Jiménez, que evoluciona desde el Modernismo de su primera etapa hacia una mayor intimidad y complejidad intelectual.

Etapas de la Obra de Juan Ramón Jiménez

  1. La etapa intelectual: Con rasgos como la desnudez, la presencia del mar, temas trascendentes, espiritualismo y nueva métrica. Obras destacadas: El diario de un poeta recién casado, Poesía y Belleza.
  2. Etapa suficiente y verdadera: Con rasgos como la obsesión por la muerte y la eternidad, misticismo poético y depuración verbal. Obras: La estación total o Dios deseado y deseante.

La Novela Novecentista

La narrativa del Novecentismo se caracteriza sobre todo por el cuidado de su lenguaje, su minuciosidad estilística y su marcado carácter intelectual.

Las Novelas Líricas de Gabriel Miró

Consideradas por gran parte de la crítica como novelas líricas, se caracterizan por su dominio del lenguaje, su rico estilo descriptivo y por la creación de atmósferas opresivas e intensas. Se consideran dos grandes grupos:

  • La etapa decadentista: Con temas como el erotismo, el amor o la enfermedad. La resolución final y el estilo que predomina es la lírica y poética. Obra destacada: Las cerezas del cementerio.
  • La etapa novecentista: Que comienza con la publicación de El obispo Leproso. Junto con Nuestro padre San Daniel forma La novela de Oleza. Temas: el espíritu crítico y el paso del tiempo. Estilo: destaca su lirismo, su precioso léxico y su fragmentarismo. Se evitan los excesos melodramáticos y decadentistas. Obras: Nuestro padre San Daniel y El obispo Leproso.

Las Novelas Ensayísticas de Pérez de Ayala

Las novelas de Pérez de Ayala poseen un marcado carácter ensayístico e intelectual. En ellas destacan sus continuas digresiones sobre diversos temas y su tendencia a la experimentación formal. Se distinguen tres etapas:

  1. La etapa autobiográfica: Obras como Tinieblas en las cumbres, La pata de la raposa y Troteras y danzaderas.
  2. Etapa de transición: Prometeo, Luz de domingo y La caída de los limones.
  3. La etapa de los grandes temas: Con obras como Belarmino y Apolonio y Tigre Juan.

Los Ensayos del Novecentismo

En los ensayos del Novecentismo se aprecian todos los rasgos característicos de este movimiento, como su elitismo intelectual, su afán europeísta, su voluntad reformista y su cientifismo.

José Ortega y Gasset: Temas Centrales

Su obra se clasifica en tres grandes grupos:

  1. El tema de la existencia y la razón vital: Ensayos filosóficos. Concepto de la razón vital, circunstancias del yo, visión de la realidad como perspectivismo. Obras: El espectador, El tema de nuestro tiempo.
  2. El tema del arte: Ensayos literarios y estéticos. Se defiende un arte deshumanizado, el arte independiente. Títulos destacados: La deshumanización del arte, Ideas sobre la novela.
  3. El tema de España: Ensayos sociopolíticos. Necesidad de europeizar y modernizar el país, particularismos, élite intelectual. Se reflexiona sobre el peligro que supone la masa. Títulos destacados: Meditaciones del Quijote, España invertebrada, La rebelión de las masas.

Las Glosas de Eugenio D’Ors

Son artículos ensayísticos, breves e ingeniosos, en los que reflexiona sobre diversas cuestiones culturales, filosóficas y sociales, siempre en una perspectiva crítica. Crea recursos muy diversos, como la ironía, la inclusión de breves narraciones o la escritura aforística. Defiende ideas básicas como la vuelta al clasicismo o el afán de modernidad. Obras destacadas: La filosofía del hombre que trabaja y juega y El novísimo glosario.

Otros ensayistas importantes son Manuel Azaña, Salvador de Madariaga, Gregorio Marañón, Claudio Sánchez Albornoz y Américo Castro.

Valoración Crítica: El misterio de la cripta embrujada (Eduardo Mendoza)

El misterio de la cripta embrujada es una novela escrita por Eduardo Mendoza y pertenece a la novela de transición, puesto que se escribió en 1978 y además está ambientada en aquella década.

La obra pertenece al subgénero de la novela policíaca, pero lo trasciende, ya que en el fondo subyace la crítica social y se trata de un esbozo irónico y despiadado de la sociedad del momento. Este es uno de los escritos más importantes de Eduardo Mendoza, autor de La verdad sobre el caso Savolta (1975), obra que tuvo una gran influencia en la narrativa posterior.

Temas y Estilo de la Obra

La trama, situada en la Barcelona posfranquista, relata la sospechosa desaparición de una niña en un colegio de madres lazaristas, hecho que lleva a la policía a dejar el caso en manos de un hombre internado en un psiquiátrico. Este escrito muestra cómo era la España de esa época, mientras que critica el excesivo poder de los ricos.

Características estilísticas a resaltar:

  • El humor negro que destila, entremezclando la ironía y el sarcasmo.
  • La corrupción como tema central.
  • El lenguaje estándar-vulgar.
  • La narración en primera persona es lineal con retrospección.
  • El narrador es a su vez el protagonista, quien miente y engaña para su propio beneficio, lo que recuerda a la novela picaresca.
  • El protagonista incluso podría considerarse como un antihéroe, pues se asemeja a la figura de Don Quijote.

Resulta interesante la sencillez de la narración, ya que gracias a ella la historia es fácilmente comprensible. Asimismo, es sorprendente la ausencia del nombre del personaje principal. Todo ello dota de gran originalidad a la obra y nos permite adentrarnos en la sociedad de la época mediante una farsa burlesca y una sátira moral y social, que tiene sus raíces últimas en la picaresca y en el modelo cervantino.

Deja un comentario