23 Jun

La Poesía en el Siglo XX: Modernismo y Vanguardias

Al igual que sucede con la novela, la llegada del siglo XX supone para la poesía el rechazo al realismo y naturalismo, corrientes que habían aportado muy poco al género. El Modernismo nace en Hispanoamérica de la mano del nicaragüense Rubén Darío, originando la mayor revolución métrica y formal desde el Renacimiento.

En la segunda década del siglo XX se consolidan una serie de corrientes que van a remover los cimientos del arte establecido. Muy intensas, pero de corta duración, a estas se las denomina vanguardias.

Del Modernismo a las Vanguardias Literarias

El Modernismo: Origen, Cronología y Características

El Modernismo es un movimiento artístico panhispánico que agrupa a autores y obras de distintos estilos. Para algunos críticos, la Generación del 98 es la primera generación del Modernismo en España.

La cronología y las etapas del movimiento son poco precisas y se relacionan directamente con Rubén Darío, su máximo exponente. Se inicia en 1888, cuando publica Azul…, y finaliza en 1916, año de la muerte del poeta. Se pueden señalar dos etapas:

  • La primera, en la que predomina el culto a la forma, con una poesía sensorial y artificiosa (ejemplo: Prosas Profanas).
  • La segunda, donde hallamos un proceso de interiorización, con una poesía más personal y profunda (ejemplo: Cantos de vida y esperanza).

La mayor influencia que recibe el Modernismo proviene de la poesía francesa, específicamente del Parnasianismo, que persigue la perfección formal. Representado por autores como Baudelaire, Verlaine y Mallarmé, este movimiento busca la correspondencia entre las sensaciones y la realidad invisible.

Características Clave de la Poesía Moderna

  • Voluntad de innovación y búsqueda de nuevas formas expresivas.
  • Individualismo y cosmopolitismo.
  • Uso de símbolos de elegancia y aristocracia.
  • Temas: Históricos y exóticos.
  • Léxico: Muy rico, con palabras exóticas, arcaísmos y cultismos.
  • Métrica: Versificación variada con alejandrinos, silvas y sonetos.

Antonio Machado: Trayectoria Poética y Temas Clave (1875-1929)

El poeta sevillano Antonio Machado evoluciona desde un modernismo intimista hasta posturas más afines a la Generación del 98. Sin embargo, hay elementos que perviven a lo largo de toda su producción. Su poesía, profunda, emotiva e intensa, presenta temas recurrentes como el sueño, los recuerdos, el amor, el paisaje castellano, la preocupación por España y el tiempo. Para Machado, la poesía es el “diálogo del hombre”.

Ese diálogo emplea símbolos como la mañana, la tarde o la noche; el agua (que es la vida cuando brota); la muerte o el camino (la vida, que se hace al andar).

Sobre la métrica, prefiere las formas sencillas y tradicionales, destacando la silva romance (combinación de versos heptasílabos y endecasílabos con rima asonante en los pares).

Su trayectoria poética se inicia con Soledades, Galerías, Otros poemas, donde predominan las emociones íntimas, la melancolía y la búsqueda del yo.

Campos de Castilla marca el inicio de su poesía noventayochista, con la preocupación social por el pueblo castellano y los temas propios de este movimiento: el paisaje (como expresión de una realidad nacional).

Etapas de la Poesía de Antonio Machado:

  • Modernismo intimista: Soledades (1903), Soledades, Galerías, Otros poemas (1907).
  • Poesía Noventayochista: Campos de Castilla (1.ª ed. 1912, 2.ª ed. 1917).

Juan Ramón Jiménez: Evolución Poética y Etapas (1881-1958)

Nacido en Moguer y fallecido en San Juan de Puerto Rico, Juan Ramón Jiménez fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura en 1956.

Juan Ramón Jiménez evoluciona de una poesía modernista a otra más acorde con los postulados de la Generación del 14, la denominada poesía pura. La vida de este poeta onubense se funde con su obra, pues dedicó su existencia a la creación poética.

Etapas de la Obra de Juan Ramón Jiménez:

  • Primera etapa (1898-1915): Sensitiva (“éxtasis de amor”, con la peculiar ortografía juanramoniana). Esta etapa modernista incluye obras destacadas como Ninfeas, Almas de Violeta y Arias tristes.
  • Segunda etapa (1916-1936): Intelectual, Pura, Desnuda (“avidez de eternidad”). Obras representativas son: Diario de un poeta recién casado (1917), Eternidades (1918), Piedra y cielo (1919), Belleza (1923) y La realidad invisible (1924).
  • Tercera etapa (1936-1958): Suficiente o Verdadera (“necesidad de conciencia interior”). Caracterizada por un misticismo panteísta, incluye obras como La estación total (1946), Animal de fondo (1949), Dios deseado y deseante (1949) y Espacio (1954).

Su etapa modernista aborda temas como el movimiento de forma intimista y personal. Entre las obras de este periodo destacan La soledad sonora y Platero y yo.

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