21 May
Impacto de las Transformaciones Políticas en las Relaciones Económicas Internacionales
Las relaciones internacionales (RRII), entendidas como aquellas en las que los sujetos implicados son Estados o las que, por los temas sobre los que se orientan o por su importancia estratégica (política, religiosa o económica), afectan a los intereses nacionales (aun cuando formalmente se desarrollen entre sujetos que no son Estados o incluso entre particulares), han experimentado un crecimiento explosivo durante las últimas décadas, y de modo especial en el transcurso del siglo XX.
Este proceso se ha caracterizado por desarrollarse a lo largo de cuatro vectores:
- Profundización: Porque cada vez afecta más a la soberanía nacional y a un mayor número de materias y competencias.
- Diversificación: Porque se manifiesta o se implanta en un diversificado número de campos y cristaliza en multitud de formas, desde foros de reflexión o de intercambio de información, hasta verdaderas construcciones políticas que participan de competencias propias de los Estados soberanos.
- Globalización: Porque cada vez afectan a un mayor número de Estados para hacer frente a problemas globales o coordinar intereses globales a escala planetaria.
- Institucionalización: Se manifiesta en su carácter crecientemente estable con unas estructuras organizativas determinadas.
¿A qué cabe atribuir esta evolución en extensión e intensidad de las relaciones internacionales?
Fundamentalmente a la necesidad o conveniencia derivada de los cambios radicales en los terrenos técnico, político y económico que se han producido con carácter acelerado en el último siglo y medio, sobre todo en materia de transporte y comunicaciones.
Un segundo elemento a destacar es la presión de la población sobre los recursos, presión que, merced al avance de la tecnología, puede ejercerse por cada Estado en todo el planeta o con repercusiones en gran parte del mismo. Baste pensar en los problemas de carácter ecológico, recursos marinos, lluvia ácida, efecto invernadero, espesor de la capa de ozono, etc. Estos problemas globales requieren soluciones globales, bien sean basadas en el consenso o a través de la presión internacional, ya que con frecuencia los más perjudicados carecen de capacidad en todos los sentidos para imponer una corrección al causante del daño.
Un tercer elemento han sido las transformaciones políticas o de distribución del poder político y sus áreas de influencia. En el último siglo, la multiplicidad de estados nuevos y la desaparición de estructuras de origen colonial han imprimido un carácter multilateral y abierto a las relaciones internacionales en todos los órdenes, entre ellos y de forma especial, en el económico, con el consiguiente desarrollo del comercio internacional. Surge así la necesidad de resolver en esta área, tanto las reglas a aplicar en los intercambios (medios de pago, estandarización de medidas y contratos, protección de patentes y marcas), como los procedimientos de solución de conflictos surgidos entre entes soberanos y los órganos e instituciones que ordenen y establezcan reglas de funcionamiento.
Un último elemento que es preciso señalar como generador de nuevas relaciones internacionales han sido las guerras o conflictos armados. Estos han hecho que el mantenimiento de la paz y, consiguientemente, el afrontamiento de las situaciones que pudieran llegar a ponerla en peligro, sea cada vez más una tarea que excede ampliamente del alcance del Derecho Internacional y de las capacidades del estado nación, por potente que este sea, y que resulte abordable solo en un marco de cooperación internacional. Este marco se concreta en instituciones y organizaciones internacionales.
Organismos Económicos Internacionales: Elementos y Tipos
Dadas las múltiples formas que pueden adoptar los organismos económicos internacionales, vamos a delimitar algunos de los elementos comunes más destacados que se distinguen en estas organizaciones. Estos elementos son los siguientes: la heterogeneidad, la permanencia, la implicación de los Estados, la estructura organizativa, los objetivos económicos, la base de operaciones y la formalización jurídica.
La heterogeneidad de las organizaciones económicas internacionales permite establecer una clasificación de sus componentes, según las características y alcance de los objetivos que tengan establecidos. En ocasiones, los organismos tienen unos objetivos múltiples que les hacen susceptibles de aparecer en diferentes lugares de la clasificación general. Siguiendo este criterio, los organismos económicos internacionales se pueden agrupar en los siguientes apartados, atendiendo bien a los objetivos que persiguen, bien al ámbito geográfico al que afectan:
- Organismos Internacionales de Carácter General: Organización de las Naciones Unidas.
- Organismos Monetarios y Financieros: Banco Central Europeo (BCE), Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC).
- Organismos Internacionales de Desarrollo: Banco Internacional para la Reconstrucción y el Desarrollo (BIRD) o la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
- Organismos Comerciales Multilaterales: Organización Mundial del Comercio (OMC).
- Organizaciones Regionales y Áreas de Integración Regional: Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA), Mercado Común del Sur (MERCOSUR) o la Unión Económica y Monetaria Europea.
- Organizaciones Regionales de Desarrollo: Banco Europeo de Inversiones (BEI) o el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD).
- Organizaciones Sectoriales: Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP), Organización para la Agricultura y Alimentación (FAO), Grupos de los países industrializados y países emergentes (G7, G20).
- Organizaciones de Consulta: Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) o la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
Organización Mundial del Comercio (OMC)
La OMC ha sucedido al GATT, cuyo funcionamiento como Acuerdo General dependía desde sus orígenes de la creación de una Organización Internacional de Comercio, prevista en la Carta de La Habana, en 1948. La Organización Mundial de Comercio sirve de marco institucional para el desarrollo de los intercambios comerciales entre sus países miembros. Es una organización “paraguas” que administra todos los acuerdos alcanzados en las rondas de negociaciones comerciales multilaterales, es de carácter multilateral y obliga a todos los miembros y a los acuerdos plurilaterales que se aplican solo a los países firmantes de los mismos.
Funciones
Las funciones de la OMC incluyen la administración de acuerdos comerciales, la actuación como foro para negociaciones comerciales, la solución de diferencias comerciales, la supervisión de políticas comerciales nacionales y la asistencia técnica y formación para países en desarrollo.
Estructura Organizativa
La OMC está organizada alrededor de una Conferencia Ministerial y de un Consejo General.
- La Conferencia Ministerial se reúne al menos una vez cada dos años y su principal órgano es el Consejo General.
- El Consejo General es el órgano superior de adopción de decisiones donde los miembros están representados por embajadores o jefes de delegación. Las decisiones se toman en general por consenso.
La OMC cuenta asimismo con un importante número de comités y grupos de trabajo especializados, que se encargan de medio ambiente, solicitudes de adhesión, acuerdos comerciales regionales, desarrollo, comercio y política de competencia, comercio e inversiones y transparencia de la contratación pública.
Ámbito de Aplicación
La Organización Mundial de Comercio agrupa todas las competencias que afectan al comercio internacional y aquellas que, aun no siendo estrictamente comerciales, puedan influir en el comercio. En este sentido, el ámbito de aplicación comprende:
- Todas las competencias del GATT, tanto en el comercio de bienes como en el de servicios.
- Todas las normas sobre propiedad intelectual, protección del medio ambiente, comercio y desarrollo, acuerdos comerciales regionales, restricciones por balanzas de pagos, transferencia de tecnología y transparencia de la contratación pública.
- Los acuerdos sobre medidas de inversión relacionadas con el comercio (MIC).
- Normas que afectan al fomento artificial de las exportaciones (subvenciones) o que afectan a la reglamentación de las exportaciones.
La OMC y el futuro de las relaciones comerciales multilaterales en la globalización
La apertura de los mercados se considera beneficiosa para las relaciones comerciales internacionales y está apoyada por la OMC, pero también tiene consecuencias sobre los países en desarrollo, en especial sobre los países que tienen que afrontar problemas por esa apertura de los mercados. Esto es lo que en la OMC se reconoce como la necesidad de una nueva base para la apertura del comercio, que tenga en cuenta los costes del ajuste o nuevo “consenso de Ginebra”, que pueda ayudar a humanizar la globalización y establecer mayor equidad y justicia en el mundo.
Para esto, se requieren otros organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM), los Bancos Regionales de Desarrollo y los organismos de la ONU (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo).
Centro de Comercio Internacional (CCI)
A estos organismos internacionales hay que añadir el Centro de Comercio Internacional (CCI). El CCI fue creado en 1964 para impulsar las exportaciones de los países en desarrollo (PED). Su misión consiste en propiciar el éxito de las exportaciones de pequeñas empresas de PED mediante soluciones para el fomento de las exportaciones que, junto con otros socios, ofrece al sector privado, las instituciones de apoyo al comercio y los formuladores de políticas comerciales.
Los objetivos estratégicos del CCI se centran en tres niveles:
- Empresas: Fortalecer la competitividad internacional de las empresas.
- Instituciones de Apoyo al Comercio: Desarrollar la capacidad de los proveedores de servicio comercial para el apoyo de las empresas.
- Formuladores de Política: Apoyar a los formuladores de política permitiendo la integración del sector empresarial a la economía global.
Las competencias y líneas de actuación básicas son:
- Empresas y Política Comercial: Cuyo objetivo es ayudar a las pymes de los PED a adaptarse a las políticas gubernamentales.
- Estrategias de Exportación: Tratando de ayudar a los responsables políticos a desarrollar estrategias de exportación exitosas.
- Impulso a las Instituciones de promoción y apoyo al comercio.
- Inteligencia Comercial: Cuya finalidad es proporcionar a las empresas y los responsables políticos información cuantitativa y cualitativa sobre mercados y sus potencialidades, barreras al comercio, intermediarios que puedan facilitar el comercio o direcciones de empresas suministradoras de ferias comerciales.
- Competitividad Exportadora: Epígrafe que incluye el desarrollo de instrumentos de gestión empresarial y de servicios que permitan mejorar la gestión de la cadena de valor añadido de los productos exportables: calidad, envase y embalaje, logística, transporte y distribución, marketing, organización de negocios, soluciones a cuestiones de medio ambiente y de diversificación de productos según la demanda de los diferentes mercados, etc.
Para alcanzar los objetivos, el CCI ofrece una gama de programas globales, servicios de asesoramiento y capacitación, fuentes de información, herramientas y productos:
- Los programas globales incorporan servicios de asesoramiento, herramientas y productos, programa de promoción del comercio Sur-Sur, etc. (Market Access, Evaluación de conformidad con las normas ISO 9001, etc.).
- Servicios de asesoramiento y capacitación en áreas clave del comercio internacional (talleres, servicios de análisis de mercados, estudios a medida, etc.).
- Fuentes de información, como Trade Information, Trade and Hand, etc., en gran medida accesibles a través de Internet.
- Herramientas y productos que apoyan, respaldan y mejoran el suministro de servicios de apoyo al comercio a través de las instituciones asociadas. Incluyen guías prácticas que pueden ser adaptadas a los requisitos, materiales de capacitación y herramientas de evaluación comparativa y evaluación.
Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE)
En diciembre de 1960 se firmó el Tratado Constitutivo de la OCDE u Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico. Con sede en París, se la considera un foro internacional de debate de problemas económicos comunes y de cooperación de los países industrializados, permitiendo a los gobiernos de estos países estudiar y elaborar las mejores políticas posibles, tanto en el ámbito económico como en el social.
Objetivos
- Lograr un crecimiento sostenido de la economía y del empleo, y mejorar el nivel de vida en los Estados miembros.
- Contribuir a la estabilidad financiera y al desarrollo económico mundial.
- Contribuir a la expansión económica sana de los países miembros y de los países no miembros, especialmente en desarrollo.
- Contribuir a la expansión del comercio mundial sobre una base no discriminatoria y multilateral.
Los países miembros se comprometen a cooperar proporcionando al resto de los socios y a la Organización la información necesaria para el cumplimiento de sus objetivos. A diferencia de otras organizaciones internacionales, la OCDE no dispone de poderes jurídicos supranacionales ni de recursos financieros para conceder ayudas o préstamos. Funciona como un foro de cooperación intergubernamental, a través de comités compuestos por altos funcionarios nacionales que en sesiones periódicas debaten los asuntos objeto de análisis. La secretaría de la OCDE está organizada en direcciones o departamentos que se corresponden con los principales departamentos ministeriales de los países miembros.
Las principales economías forman parte de la OCDE, por esta razón es un foro muy importante para debatir e intercambiar información sobre una amplia gama de políticas y para discutir cuestiones que serán objeto de acuerdos globales en otras instituciones. También juega un importante papel recogiendo datos económicos de los países miembros. Posee unas reglas de entrada que se exigen a los aspirantes:
- Libre mercado.
- Reglas democráticas.
- Respeto a los derechos humanos.
Prioridades
Entre las prioridades de la OCDE, figuran:
- El análisis del envejecimiento de la población.
- La lucha contra la corrupción y el soborno: se han comprometido a adoptar reglas comunes para penalizar a empresas e individuos comprometidos en transacciones corruptas.
- Gobierno o gobernanza de las empresas: la forma como se dirigen o gobiernan las empresas en un mercado globalizado con un rápido desarrollo tecnológico es muy importante.
- Educación y formación: en este ámbito la OCDE produce un amplio conjunto de datos e indicadores para facilitar la comparación entre países sobre los sistemas de educación y formación de los países miembros y los problemas de integración en el mercado de trabajo de los jóvenes.
- Comercio electrónico: considerado por la OCDE como un elemento central para el crecimiento económico, el empleo y la expansión del comercio mundial.
- Empleo: forma parte de los trabajos de la OCDE definir recomendaciones de políticas en las áreas cubiertas por la Estrategia de Empleo, impulsar los trabajos relacionados con la pobreza, el mercado de trabajo para la gente joven, la formación en capital humano y las políticas para la difusión de la innovación y la tecnología.
- Políticas macroeconómicas: orientaciones en el medio y largo plazo y definición de la senda hacia los objetivos a largo plazo.
- Reforma de las regulaciones: la OCDE revisa los programas de sus Estados miembros en las reformas de las regulaciones de la estructura institucional de las Administraciones nacionales, el impacto de la apertura de los mercados, la política de competencia y la reforma en las telecomunicaciones, etc.
- Desarrollo sostenible: crecimiento económico y medio ambiente, cambio climático y mejora de la calidad de vida en un contexto de continuado desarrollo económico.
- Impuestos: cooperar y analizar con las autoridades nacionales para evitar la doble imposición y minimizar la evasión y la competencia fiscal y ampliar la cooperación a los países no miembros para extender las normas y acuerdos de la OCDE.
- Comercio: la OCDE actúa también de foro para debatir de manera informal las cuestiones relacionadas con la liberación del comercio y los obstáculos no arancelarios, acceso a los mercados, etc.
Por ser relativamente pequeño (34 países), no parece un foro adecuado para tratar temas globales, pero sin embargo, es el único foro donde los gobiernos miembros, de manera informal, regularmente intercambian información y opiniones sobre un conjunto amplio de temas económicos que se considera muy útil para la toma de decisiones de los gobiernos nacionales. La globalización de la economía y de las finanzas y las crisis financieras internacionales se han incorporado a las preocupaciones de la OCDE y de sus países miembros.
Entre los objetivos estratégicos más importantes figuran:
- Continuar en el perfeccionamiento y profundización de la economía de los países miembros.
- Analizar con mayor intensidad y de forma interdisciplinar los problemas que tiene planteada la sociedad actual.
- Proporcionar una importante contribución al análisis de los problemas ambientales en los países miembros y a nivel mundial.
- Salvaguardar y promover el sistema comercial multilateral.
- Profundizar en el conocimiento y en el diálogo con los países no miembros, en dos ámbitos fundamentales:
- Con países o economías que ya no forman parte del mundo en desarrollo y que en un plazo determinado podrían adherirse a la OCDE.
- La integración de los problemas del resto del mundo en los análisis y recomendaciones de los departamentos de la OCDE.
- Desarrollar la capacidad para identificar con antelación los problemas que aparecen y que son susceptibles de afectar al crecimiento económico y al progreso social de los países miembros y al resto del mundo.
Flujos Financieros Internacionales
El capital circula libremente por todo el mundo y se ha convertido en el principal vínculo entre unos países y otros, impulsando con fuerza la globalización de la economía. Los cambios en las variables financieras se trasladan rápidamente a la economía real. Así, unos bajos tipos de interés en una economía atraerán a los prestatarios que buscan el dinero más barato, y los altos tipos de interés atraerán a los inversores.
Las finanzas internacionales constituyen no solo un tema candente por las especiales circunstancias que atravesamos, sino también uno de los grandes ámbitos que tradicionalmente han centrado la atención, junto con el comercio internacional, de los estudiosos de la economía mundial. Su importancia queda por tanto fuera de toda duda.
En este primer apartado introductorio nos vamos a centrar en los principales flujos financieros que tienen lugar entre los países:
- Las inversiones directas extranjeras, que nos permiten aproximarnos a la realidad de sus principales protagonistas, las empresas multinacionales, cuyo papel en las relaciones económicas mundiales es cada vez mayor.
- Las inversiones extranjeras en cartera, por sus especiales características, nos llevan a enlazar con el análisis de las crisis financieras internacionales, que tienen en la actualidad un indudable interés.
El ritmo de crecimiento de los movimientos de capital o intercambios financieros ha sido en los últimos años superior al del comercio y la producción mundial. Este crecimiento ha venido acompañado de espectaculares cambios en la composición de los flujos. Al mismo tiempo aparecen nuevos sectores, especialmente asociados a las nuevas tecnologías (informática, electrónica, etc.), y nuevos países y regiones que, no solo son muy atractivos para el destino de los capitales, sino que también emergen con fuerza como emisores de corrientes financieras. Surgen así nuevas oportunidades de inversión ligadas al crecimiento de la economía mundial, en especial en países como China, India, Brasil, etc., y otros, como los países del este europeo recientemente incorporados a la Unión Europea.
Razones que contribuyen a explicar la expansión de los flujos financieros a nivel mundial:
- El proceso de liberalización financiera iniciado en los 70, que abarca desde la eliminación de obstáculos a las entradas y salidas de capital, hasta la desregulación de las operaciones financieras.
- La internacionalización del sistema financiero a raíz de la creciente interconexión entre los mercados nacionales y el desarrollo de los mercados financieros internacionales. También ha contribuido a ello el considerable avance en la integración financiera en la Unión Europea, siendo la introducción del euro y el establecimiento del eurosistema factores determinantes.
- La institucionalización de la inversión, creciente peso de los inversores institucionales, como los fondos y planes de pensiones, compañías de seguros y fondos de inversión, o intermediarios financieros que invierten grandes cantidades y permiten a los pequeños ahorradores participar en los mercados financieros internacionales.
- Las innovaciones tecnológicas, que facilitan el conocimiento de nuevas oportunidades de inversión, la realización de operaciones financieras entre inversores de diferentes países y la conexión de mercados financieros nacionales las 24 horas del día (mercado continuo).
- El espectacular crecimiento de las empresas multinacionales, ya que, como veremos más adelante, la inversión extranjera se ha convertido en el principal vehículo de expansión para estas empresas.
Formas que pueden adoptar los flujos financieros
- La inversión directa extranjera (IDE) incluye las inversiones que reflejan un objetivo del inversor de obtener una rentabilidad duradera en la empresa en la que invierte, alcanzando un grado significativo de influencia en sus órganos de gestión. La regla práctica especificada en el Quinto Manual de la Balanza de Pagos del FMI define como inversor directo al propietario de un 10% o más del capital de la empresa de inversión directa.
- La inversión en cartera representa la adquisición de valores extranjeros, como acciones, bonos u otros activos financieros, ninguno de los cuales implica una gestión activa. En términos generales, esto significa que el inversor tiene menos del 10% del total de las acciones o un porcentaje inferior al necesario para alcanzar la mayoría de votos.
- Los préstamos. Son contratos de duración determinada (el vencimiento del préstamo) entre el prestamista y el prestatario. El prestamista recibirá los intereses y la amortización del principal según el calendario estipulado en el contrato y no variará aunque cambie la capacidad de pago del prestatario.
Tipos de Multinacionales
Básicamente se pueden establecer tres tipos:
- Multinacionales integradas horizontalmente: Tiene lugar cuando la matriz establece plantas en otros mercados para producir el mismo producto que en el país de origen. Las razones más habituales son: sortear elevadas barreras arancelarias y no arancelarias, evitar altos costes de transporte, cercanía a los clientes que facilita la «adaptación» del producto a las preferencias de los consumidores, contribuir a la promoción del producto, etc.
- Multinacionales integradas verticalmente: Se produce cuando la empresa reparte el proceso de producción entre varios países. Esta integración puede ser en uno o dos sentidos:
- Integración hacia atrás: La empresa establece subsidiarias en otros países para producir inputs, partes, piezas, componentes que se emplean en la producción del bien final que tiene lugar en otras plantas. La diferente dotación de factores de la producción entre países explica su integración hacia atrás de las EM que necesitan materias primas o mano de obra barata para reducir costes de producción, etc.
- Integración hacia adelante: Cuando la EM persigue el acercamiento al consumidor final, como, por ejemplo, mediante la constitución de subsidiarias en el extranjero para comercializar sus productos. Un ejemplo de alta integración vertical, tanto hacia atrás como hacia adelante, lo constituyen las grandes petroleras que, además de las refinerías (hacia atrás, estando presentes en las fases de extracción y transporte), lo hacen hacia adelante, a través de la venta de carburantes que obtienen de sus refinerías estableciendo gasolineras.
- Multinacionales diversificadas o conglomerados: Se presentan cuando las EM tienen plantas de producción en distintos países en diferentes sectores. La principal razón de esta estrategia es la diversificación del riesgo. Así, por ejemplo, ante el riesgo de una recesión económica, siempre hay sectores menos expuestos a la crisis que otros. Es una estrategia cada vez más extendida entre las grandes corporaciones industriales, energéticas, constructoras, de telecomunicaciones y financieras, con participaciones cruzadas entre ellas.
Al analizar los efectos de la IDE y las empresas multinacionales conviene distinguir las repercusiones sobre el país que la recibe y sobre el país emisor. En ambos casos ha habido una frecuente discusión entre los defensores y los críticos de la libre circulación de capitales en general y de la IDE en particular.
- Para algunos, las empresas multinacionales son origen de problemas y conflictos, lo que provoca rechazo a la IDE en muchos lugares.
- Sin embargo, son muchos los que consideran que las multinacionales son una fuente de progreso y modernización, y de ahí las crecientes medidas que tratan de atraerlas.
A continuación tratamos de recoger los argumentos más relevantes, aunque antes cabe matizar que la estimación de beneficios y costes de las IDE resulta compleja, ya que los efectos difieren enormemente en función del tipo de inversión realizada y de las condiciones del país en el que se localiza.
Beneficios para el país receptor
- La IDE que representa nueva inversión (greenfield) contribuye a aumentar el capital físico (participa en financiar la formación bruta de capital fijo) del país receptor, promoviendo así el crecimiento económico y la generación de empleo.
- Permite la transferencia de tecnología y de conocimiento, aumentando la productividad de la economía. Por el efecto demostración, se extenderá a toda la economía y por el efecto competencia estimulará la eficiencia y el cambio técnico en las empresas nacionales.
- Mejora la capacitación de los trabajadores del país, contribuyendo al desarrollo del capital humano, al aumento de la productividad y al crecimiento económico.
- Contribuye a incrementar los ingresos por impuestos del país donde están instaladas (aunque en ocasiones los países renuncian a estos ingresos reduciendo los impuestos a las empresas multinacionales, a fin de atraer la IDE).
Beneficios para el país emisor
- Proceden fundamentalmente de los beneficios obtenidos por las empresas multinacionales, aunque también existen otras ventajas.
- La reducción de los costes de producción por parte de la empresa supone el aumento de la eficiencia productiva del grupo en su conjunto y repercute positivamente en el país.
- El mayor tamaño que adquiere la empresa incentiva el incremento de la inversión en investigación y desarrollo, promoviendo el desarrollo tecnológico del grupo y de los países donde residen la matriz y otras filiales.
- El incremento de las exportaciones de los países emisores hacia los países donde se ha realizado la inversión porque, en general, las EM siguen una política de compras ligadas al grupo (en el caso de que la inversión esté integrada verticalmente).
- La empresa que invierte en otros mercados puede acceder a la tecnología del país de destino de su inversión y aplicarla, tanto en los centros allí establecidos, como en los centros de producción del país de origen (este efecto es especialmente importante para las multinacionales de los países en desarrollo que invierten en los países desarrollados).
- Los países emisores de corrientes de IDE son receptores de la repatriación de beneficios obtenidos y de las remesas de los trabajadores enviados al país donde se establecen.
Efectos negativos o controvertidos
Empleo, pérdida de soberanía nacional, déficit por cuenta corriente y explotación de los recursos naturales.
- Empleo: Una de las discusiones más candentes es la generada en torno a los efectos sobre el empleo, tanto en el país de origen como en el receptor.
- Un argumento clave en contra de las EM es que el traslado de parte de su producción al extranjero hará disminuir el empleo, y con ello el ahorro en el país emisor. Esto se producirá si las empresas se deslocalizan, pero no si realizan inversiones en el exterior que no supongan traslado de producción. Además, con el tiempo, otras empresas domésticas pueden incrementar sus exportaciones debido a la demanda de las filiales en el exterior, compensando así la pérdida de empleo inicial.
- Otro argumento matiza la creación neta de empleo que se supone genera la IDE en los países receptores debido a que una gran parte de la IDE adopta la forma de compra de empresas locales ya existentes, por lo que la inversión, al no incrementar la capacidad productiva, no tiene efectos notables en el empleo del país.
- Además, también suele señalarse que las EM, al ser tecnológicamente más avanzadas, muestran una productividad mayor, lo que implica menos necesidad de trabajo por unidad producida. También se esgrime en contra de las EM que, al ser más competitivas que las industrias nacionales, pueden desplazar a la competencia local, destruyendo un empleo que puede ser superior al generado por la EM.
- Por último, otra fuente de preocupación es la que se refiere a las condiciones de trabajo. En muchas ocasiones se acusa a las multinacionales de explotar la mano de obra de los países en desarrollo, ofreciéndoles unos salarios muy bajos y unas condiciones laborales desfavorables. La repercusión mundial que ha tenido el conocimiento de algunas prácticas por parte de multinacionales muy conocidas ha contribuido a que algunas hayan realizado esfuerzos por mejorar las condiciones laborales de sus trabajadores.
- Pérdida de soberanía nacional: Las empresas multinacionales, debido a su poder, han sido consideradas por muchos como una amenaza a la soberanía de los Gobiernos de los países receptores, al poder presionar sobre los poderes públicos en el sentido de reglamentar a favor de sus intereses particulares.
- Déficit por cuenta corriente: Generalmente, la actividad de las empresas multinacionales genera mucho comercio intraempresa, dando lugar a un incremento, tanto de las exportaciones como de las importaciones. Sin embargo, se estima que la propensión importadora de las filiales es mayor que la exportadora, contribuyendo de forma negativa al saldo comercial. Pero además, también repercute en la balanza de servicios (los pagos tecnológicos al exterior cuando se produce cesión de tecnología) y en la de rentas (por la retribución del capital extranjero como los pagos de dividendos).
- Explotación de los recursos naturales: En numerosas ocasiones se culpa a grandes compañías, fundamentalmente mineras, petroleras, madereras o de la alimentación, de la destrucción de ecosistemas, sin que las ganancias obtenidas sean reinvertidas en el país posteriormente.
Mercados Financieros Internacionales
Desde la década de los años 70, las transacciones financieras internacionales y las corrientes de capital están experimentando una expansión sin precedentes en cuanto a volumen y complejidad. Esta expansión se ha debido fundamentalmente a razones económicas, cambios en la tecnología, alteraciones en los mercados y políticas de los gobiernos.
La aparición de nuevos instrumentos financieros, con un elevado nivel de movilidad debido a los avances de la tecnología y la presencia en el mercado de nuevos operadores y participantes, ha incrementado la competencia y ha provocado alteraciones profundas en la estructura de funcionamiento de los mercados financieros internacionales.
La rapidez con que se han producido las transformaciones en los mercados financieros es una respuesta más a los cambios experimentados en la economía internacional durante estas dos pasadas décadas, a los problemas planteados por la crisis de la deuda y a los cambios de las políticas de los gobiernos, relacionados con la supervisión bancaria y los mercados financieros.
Uno de los factores citados que más ha contribuido a la rápida transformación ha sido el desarrollo de la informática y de las telecomunicaciones. La innovación tecnológica ha incrementado la posibilidad de llevar a cabo operaciones cada vez más complejas y sofisticadas en un mercado internacional cada vez más global e integrado.
La rapidez con la que se han producido estos cambios no solo ha transformado la estructura de los mercados financieros, también está alterando su funcionamiento, hasta el punto de constituir una grave preocupación para las autoridades de los países receptores, por los riesgos sistémicos que pueden provocar, en cuanto al desarrollo y efectividad de las políticas nacionales en el ámbito fiscal, monetario y de tipo de cambio.
Los mercados financieros cumplen la función de transferir recursos financieros de los agentes excedentarios a aquellos otros cuyas necesidades superan sus disponibilidades, ya sea porque desean llevar a cabo decisiones de consumo, de inversión real o de inversión financiera o una combinación de todas ellas.
Se tiene, pues, como primera y primordial causa del desarrollo de los mercados financieros, tanto nacionales como internacionales, la oferta de recursos financieros por parte de los agentes excedentarios que buscan la colocación para sus excedentes y la demanda de los recursos por parte de los agentes deficitarios.
En el ámbito internacional, la transferencia de recursos financieros no solo tiene lugar entre agentes, sino también y muy distintivamente entre ámbitos monetarios y de regulación y autoridad diferentes. De ahí que surja, por una parte, la necesidad de que exista un mecanismo que permita la traslación del poder de compra entre monedas. Este mecanismo es el mercado de cambios o mercado de divisas.
Ahora bien, a diferencia de otros mercados financieros, el mercado de divisas canaliza ofertas y demandas de más amplia naturaleza que el resto de mercados financieros. Para que sea necesario su uso, basta con que se desee el cambio en la denominación monetaria de los recursos, sin que deba concurrir la existencia de una situación de exceso global de recursos que el agente busca transferir a otro. Es suficiente que busque reestructurar la composición por monedas de su posición financiera o, simplemente, cuando se trata de una empresa que exporta o importa, o que desea implantarse en otro país, que deba traducir sus recursos a las monedas que necesita para el desarrollo de sus actividades comerciales.
Esta es la razón por la que el mercado de divisas ha existido, de una u otra forma, desde que existen intercambios comerciales entre zonas que no disponen de un medio común de pago, sin perjuicio de que su expansión haya ido más y más acompasándose al flujo de intercambios de carácter financiero, cuyo crecimiento ha multiplicado en las últimas décadas el de los intercambios de carácter comercial.
El desarrollo de los mercados internacionales de capital es un fenómeno de las últimas décadas, y ha venido ligado a la liberalización de los movimientos de capital, y al desarrollo de una demanda y oferta internacional de fondos en el ámbito de áreas establecidas, con muy ligeros requisitos regulatorios y fiscales, con el propósito de aprovechar el creciente flujo de fondos a nivel internacional.
La voluntad de participar en el negocio que tales mercados representan y de evitar su completa deslocalización ha impulsado a un número creciente de países a crear zonas de regulación muy tenue, homologable a la existente en los centros internacionales de mayor desarrollo y dirigidas a no residentes.
En definitiva, se trata de la aplicación del concepto off-shore (extraterritorial, extranjero), dividiendo el mercado nacional en dos ámbitos: uno de regulación extensiva y fiscalidad normal, dirigido a residentes, y otro de regulación mínima y libre de fiscalidad para no residentes.
El origen de los mercados financieros internacionales puede atribuirse a los siguientes factores:
- Necesidad de transformar una moneda a otra los fondos a disposición de los agentes.
- Libre convertibilidad de la moneda y ausencia de restricciones a los intercambios tanto comerciales como de naturaleza financiera, sean movimientos de capital originados por inversiones directas, como por inversiones de naturaleza financiera a corto o largo plazo.
- Aligeramiento de la regulación financiera para la intermediación entre no residentes o en moneda nacional entre residentes y no residentes o en moneda extranjera, de modo que por razón de la moneda utilizada o de los intervinientes en la operación exista una ventaja de coste respecto a los mercados domésticos.
- Aligeramiento o eliminación de la fiscalidad de no residentes.
Respecto al concepto de mercado financiero internacional, podemos considerarlo en dos sentidos:
- En un sentido amplio, como todo aquel en que se produce un cambio en la moneda en que se denominan las transacciones, con lo que al menos estaría implicado el mercado de divisas.
- En un sentido más estricto, como aquellos mercados en que los fondos se obtienen en un país o conjunto de países diferente del de residencia del emisor del activo.
Con gran frecuencia las estadísticas internacionales se refieren a mercados externos o exteriores. En este caso no se incluye en el concepto el mercado de divisas y hace referencia a toda la financiación captada en el exterior, cualquiera que sea la moneda utilizada.
Tipos de Crisis Financieras
En general, no se puede delimitar con exactitud cuáles son los orígenes de una crisis, porque existen elementos comunes en todos los tipos de crisis. Estos elementos son:
- Acumulación de desequilibrios económicos insostenibles.
- Falta de solidez del sector financiero.
- Desajustes en el precio de los activos.
- Pérdida de confianza en una moneda o en un sistema bancario.
- Desajustes en el tipo de cambio de una moneda.
- Interrupción de las corrientes de capital externas.
- Falta de credibilidad en el proyecto político o en la aplicación de las políticas para corregir los desequilibrios.
Se pueden distinguir, por tanto, diversos tipos de crisis, pero para facilitar su comprensión vamos a sintetizarlo, y siguiendo al FMI, diferenciaremos tres tipos de crisis:
- Crisis cambiarias.
- Crisis bancarias.
- Crisis de la deuda externa.
Crisis Cambiarias
Una crisis cambiaria se produce cuando un país se ve obligado a abandonar su tipo de cambio fijo o a devaluar su moneda de forma significativa debido a la especulación o a la pérdida de confianza en su capacidad para mantener la paridad.
Crisis Bancarias
Las quiebras y retiradas de efectivo o de depósito hacen peligrar a la institución bancaria. Ante este tipo de crisis caben dos alternativas:
- El banco suspende la convertibilidad interna de sus pasivos.
- Las autoridades monetarias intervienen para evitar que se produzca un efecto dominó en el sistema bancario y se convierta en una crisis sistémica.
Crisis de la Deuda Externa
El país endeudado no puede afrontar el servicio de la deuda, ya sea privada u oficial, y suspende los pagos a la espera de una renegociación de la misma.
Las crisis financieras no tienen las mismas características en los países desarrollados y en los países en desarrollo.
Países en Desarrollo
- La retirada de las corrientes de capitales externos y un fuerte descenso de la cotización de la moneda suele ir acompañado en los países en desarrollo por inestabilidad financiera interna.
- También se produce lo contrario, que crisis financieras internas repercutan en el tipo de cambio y en el compromiso de pago de la deuda externa.
- La vulnerabilidad de los países en desarrollo se incrementa cuanta más deuda exterior tengan, cuanta mayor proporción de la deuda externa esté denominada en divisas y cuanta mayor proporción esté en manos del sector privado.
Países Industrializados
- En los países industrializados, desde que se abandonó el Sistema Monetario Internacional de Bretton Woods y se adoptaron tipos de cambio flotantes, las crisis monetarias han estado ligadas a movimientos fuertes en los tipos de cambio y por períodos limitados de tiempo.
- Pero estas crisis no suelen afectar a los sistemas financieros internos de los países ni a la sostenibilidad de sus pagos externos.
Vulnerabilidad de los Países en Desarrollo y Economías Emergentes
La liberalización de los mercados financieros se ha producido de forma paralela a la liberalización de la cuenta de capital. Esto ha incrementado la interrelación entre crisis bancaria y crisis de balanza de pagos.
Si bien la libertad de movimientos de capital favorece una mejor asignación de los recursos, en la medida en que las corrientes de capital externas están apalancadas por el sistema financiero interno (y este es frágil), en cuanto se producen salidas repentinas de capital, las perspectivas del crecimiento y de la inversión interior se ven afectadas.
Las turbulencias financieras ponen de manifiesto determinados aspectos que están influyendo en la inestabilidad financiera internacional. A los elementos de vulnerabilidad tradicionales de las economías:
- El excesivo endeudamiento externo.
- La apreciación del tipo de cambio de las monedas.
- Los fuertes déficit presupuestarios.
Desde los años 80 y principios de los 90, se han incorporado otros factores que acentúan la inestabilidad financiera internacional y la vulnerabilidad de las economías de los países, especialmente de los países en desarrollo y de las economías emergentes.
Entre estos factores que acentúan la inestabilidad financiera destacamos los siguientes:
- Políticas macroeconómicas inadecuadas.
- La liberalización del sector financiero y la apertura de la cuenta de capital.
- La volatilidad de los flujos de capital privado hacia las economías emergentes.
- La debilidad de los sistemas financieros de gran parte de los países emergentes.
- La falta de transparencia en determinados mercados.
- El excesivo riesgo que asumen algunas instituciones e inversores financieros.
- La ausencia de salvaguardas financieras suficientes.
- Una inadecuada vigilancia de mercado y de la supervisión prudencial.
La existencia de políticas macroeconómicas inadecuadas ha sido un factor destacado en gran parte de las crisis financieras.
- Así, políticas monetarias y fiscales internas expansivas han favorecido un endeudamiento excesivo y una sobreinversión en activos reales, que han influido sobre los precios de los bienes inmuebles o sobre las cotizaciones de los valores en bolsa, incrementándolos a niveles insostenibles. La reacción, con políticas restrictivas, ha influido en la actividad económica, desacelerándola, se ha incrementado la cartera de morosos e incobrables y han acabado por afectar al sistema bancario.
- Las políticas macroeconómicas externas también influyen en las crisis financieras, especialmente en los países con economías emergentes (los tipos de cambio y los tipos de interés de la economía mundial son factores muy influyentes en el desarrollo de las crisis).
La experiencia de estos años pasados muestra que algunas de las principales instituciones financieras no se han provisto de salvaguardas adecuadas y han asumido un riesgo excesivo, no solo en mercados emergentes, sino también en los países avanzados, debido a la escasa atención que se ha dado a sucesos considerados de lejana probabilidad de suceder y a los modelos aplicados, donde se asumía que la liquidez del mercado permitía ajustar las posiciones sin afectar a los precios.
Este tipo de modelos se ha visto que fracasan porque muchos inversionistas e instituciones utilizan la misma estrategia, adoptando y deshaciendo posiciones similares simultáneamente, amplificando las decisiones y sus consecuencias.
Esto apoya la idea que tienen algunos autores, de que una mayor disponibilidad de información es condición necesaria pero no es suficiente para evitar las crisis, o lo que es lo mismo, que para una mejora de la arquitectura financiera internacional es necesaria la transparencia y la divulgación de la situación real de la economía y de las finanzas.
Propuestas de Reforma de la Arquitectura Financiera Internacional
Dada la globalización de la economía, se considera que la inestabilidad que se produce en el sistema financiero internacional con las crisis es global y sistémica y, por tanto, los esfuerzos de los países individuales para hacer frente a los problemas no son suficientes y se plantea la necesidad de reformar la arquitectura financiera internacional.
Las principales propuestas de reforma, antes de la crisis financiera iniciada en 2007, se habían centrado en los siguientes ámbitos:
- Mejora de la transparencia.
- Mejora de los mecanismos de supervisión y regulación financiera.
- Liberalización de la cuenta de capital.
- Reforma de las instituciones financieras internacionales.
- Establecimiento de un prestamista internacional en última instancia.
La crisis financiera de 2007 ha impulsado algunos cambios importantes en la arquitectura institucional y financiera internacional, interpretado como la aparición de un nuevo orden económico internacional. Los primeros pasos para la reforma de la arquitectura financiera global se dieron en la Cumbre de Washington, celebrada el 15 de noviembre de 2008. Los dirigentes del Grupo de los Veinte (G-20) se reunieron en Washington para sentar las bases que puedan garantizar que una crisis global como la que estaba sucediendo en la economía mundial no se volviese a repetir.
La reunión tenía una triple finalidad:
- Reforzar la cooperación.
- Trabajar en común para restaurar el crecimiento económico mundial.
- Proponer reformas necesarias en los sistemas financieros internacionales.
En la declaración institucional del G-20 del 15 de noviembre de 2008, se aludía a las medidas urgentes y excepcionales que se habían tomado para sostener la economía mundial y estabilizar los mercados financieros, proporcionando:
- Liquidez.
- Reforzando el capital de las instituciones financieras.
- Protegiendo el ahorro y los depósitos.
Los pasos a seguir estaban centrados en cinco áreas concretas:
- Impulsar una regulación adecuada.
- Fortalecer la transparencia y la rendición de cuentas.
- Promover la integridad en los mercados financieros.
- Reforzar la cooperación financiera internacional.
- Reformar las instituciones financieras internacionales.
El segundo paso se dio en la Cumbre de Londres del 1 y 2 de abril de 2009, donde se materializó la transformación por varias vías:
- El poder de decisión internacional o gobernanza global se modificó al desplazarse ese poder, del G-7 (ámbito exclusivo de los países desarrollados), al G-20 donde participan las economías de los países emergentes.
- Los organismos económicos y financieros internacionales, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial más el Foro de Estabilidad Financiera (que se transformó en el Consejo de Estabilidad Financiera), se constituyeron en los pilares de la nueva arquitectura financiera internacional. Para ello, se ampliaron sus poderes y se reforzaron sus medios.
Desde el ámbito del sector financiero, la agenda de la reforma descansa en cuatro pilares:
- Fuerte regulación financiera.
- Supervisión eficaz.
- Liquidación y corrección de instituciones sistémicas.
- Evaluación internacional transparente por iguales.
La crisis financiera ha impuesto un coste muy elevado y no se puede permitir que una crisis así se repita. El sistema financiero debe orientarse para servir:
- Las necesidades de la economía.
- Reducir el azar moral.
- Limitar el riesgo sistémico.
- Apoyar un crecimiento económico fuerte y estable.
Las principales iniciativas de reforma se espera que tengan un impacto directo sobre la intermediación financiera. Entre esas iniciativas destacamos las siguientes:
- Requerimientos prudenciales para los bancos en general: más capital, liquidez y su control, gravamen sobre las transacciones bancarias u otros indicadores de tamaño y riesgo, mejor política del crédito y stress test.
- Impuestos y tasas a las transacciones financieras, pasivos financieros y otras medidas sobre el tamaño y riesgo de los bancos.
- Medidas para tratar de forma concreta el riesgo asociado con las IFIS (Instituciones Financieras Importantes Sistémicas), que estarían sujetas a mayores requerimientos de capital u otros requerimientos específicos.
- Medidas para reducir el carácter procíclico: provisiones dinámicas o amortizaciones anticíclicas del capital.
- Medidas para impulsar un préstamo responsable.
- Regulación de otras entidades del mercado, como agencias de calificación, fondos de inversión, etc.
La estabilidad es esencial para el funcionamiento del sistema económico. Sin estabilidad, ni las instituciones ni los mercados pueden actuar eficazmente y dificulta la toma de decisiones a largo plazo. En economía, estabilidad no se identifica con rigidez, se acerca más a la flexibilidad y adaptación que los mercados, agentes e intermediarios deben tener para facilitar una buena aplicación de los recursos hacia las actividades productivas.
Ausencia de turbulencias en los mercados, instituciones establecidas y baja volatilidad son algunos de los elementos que pueden caracterizar la estabilidad en el ámbito económico y financiero.
Pero hay otros elementos subyacentes que deben acompañar a la estabilidad, como una adecuada estabilidad macroeconómica, una estructura idónea de regulación financiera y de supervisión y una estructura política que garantice la estabilidad.
La crisis financiera global ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad del sistema financiero y la rapidez con la que se puede propagar la crisis, por tanto, una supervisión eficaz de este sector resulta crucial.
La supervisión y la reglamentación tienen como objetivo asegurar que los intermediarios financieros funcionen con principios prudenciales, lo que significa que mantengan un nivel de reservas y de capital suficientes para hacer frente a los posibles riesgos que puedan surgir.
Factores Determinantes de los Movimientos Migratorios
Los principales factores que determinan los movimientos migratorios son los siguientes:
- Aumento de las desigualdades.
- Diferentes tendencias demográficas.
- Mayores estímulos de entrada.
- Conflictos bélicos y desastres ambientales.
- Motivos profesionales.
Aumento de las desigualdades
Primeros factores identificados por el Fondo de Naciones Unidas para la Población (UNFPA) como causas de los movimientos migratorios: la búsqueda de una vida mejor para uno mismo y su familia, y las disparidades de ingreso a nivel internacional. En este sentido, existen numerosas evidencias de que la brecha entre el nivel de vida de las regiones más ricas y más pobres del mundo continúa ampliándose.
Una comparación entre los niveles de PIB per cápita sirve para ilustrarlo: hoy, el PIB per cápita de los países con altos ingresos multiplica por 66 el de los países con bajos ingresos y por 14 el de los países con ingresos medios.
Estas desigualdades contribuyen a explicar por qué tantas personas procedentes de países del Sur emigran hacia países del Norte, ya que los inmigrantes pueden obtener un ingreso mucho mayor al que obtendrían en su país.
Y, a pesar de que el coste de la vida suele ser mucho más alto en los países de destino, la mayoría puede ganar lo suficiente para mantenerse y para enviar dinero a sus países de origen.
Diferentes tendencias demográficas
A lo largo del tiempo, la población mundial ha venido creciendo de forma muy significativa, aunque en las últimas décadas este ritmo de crecimiento se ha ralentizado. Las regiones desarrolladas de Europa y América registran una tasa anual de crecimiento mucho más baja que la de las regiones en desarrollo.
Estas diferencias afectan a los movimientos migratorios internacionales de dos maneras:
- Por un lado, un acelerado aumento de la población en los países en desarrollo (PED), combinado con importantes dificultades económicas, obliga a las personas a emigrar.
- De otro lado, en los países desarrollados (PD), una población cada vez menor y más envejecida, les conduce a aceptar un volumen creciente de inmigrantes.
Tendencias demográficas en países en desarrollo
En el caso de los PED, su rápido crecimiento demográfico se deriva de los avances registrados en la reducción de las tasas de mortalidad en combinación con el mantenimiento de elevadas tasas de natalidad.
Esto conduce al agravamiento de diferentes problemas que actúan como estímulo para que millones de personas decidan emigrar:
- Insuficiencia alimentaria en países acuciados por la hambruna.
- Dificultad para encontrar un empleo, debido a las elevadas tasas de paro y las escasas oportunidades del mercado laboral.
- Crecientes conflictos derivados de un proceso de urbanización acelerado en el que las ciudades se rodean de grandes cinturones de pobreza.
Tendencias demográficas en países desarrollados (PD)
Por lo que se refiere a la situación de los PD, se produce una caída en el crecimiento demográfico que se explica por la conjunción de bajas tasas de mortalidad y la disminución de las tasas de natalidad, dando lugar al envejecimiento de la población.
La preocupación generada por el envejecimiento de la población se debe, entre otras razones, a la incidencia de este fenómeno en la capacidad de crecimiento de la economía, ya que supone:
- Incremento del gasto social.
- Aumento de la tasa de dependencia.
- Ralentización de la actividad económica asociada a factores como la dificultad de aprender nuevas técnicas, la menor movilidad laboral, la menor propensión al ahorro y la mayor aversión al riesgo que presenta el grupo de más edad.
Debido a las sustanciales repercusiones del envejecimiento de la población, esta situación actúa como un importante estímulo a la hora de admitir inmigración en los países del Norte, aunque existe un controvertido debate acerca de la capacidad de la inmigración para actuar como solución al problema del envejecimiento.
Mayores estímulos de entrada
Entendemos por estímulos de entrada aquellos factores que el inmigrante espera encontrar en el país de destino y que facilitan su decisión de abandonar su país y emigrar:
- Oportunidades de empleo.
- Red de protección social.
- Mayor conocimiento y cercanía entre el Norte y el Sur.
- Cadena migratoria.
a) Oportunidades de empleo
La búsqueda de un trabajo que permita mejorar sus condiciones de vida es, en la mayoría de los casos, el fin último de la decisión de emigrar. De ahí que las oportunidades de empleo ofrecidas por los países del Norte se configuren como uno de los más importantes estímulos de entrada.
Pero, en términos de empleo, la escasez de trabajo en el país de origen no es la única razón para emigrar, también lo es la diferencia de salarios. Otros atractivos añadidos de los mercados laborales de los PD son las mayores posibilidades de formación y cualificación profesional, así como las mejores condiciones laborales, y que, en los PED, un alto porcentaje de la mano de obra trabaja en sectores informales con una elevada precariedad.
b) Red de protección social
El sistema de protección social en los países del Sur es prácticamente inexistente o presenta graves deficiencias. Por ese motivo, la incorporación de los inmigrantes al sistema de protección del país de destino y la obtención de beneficios como asistencia sanitaria, educación gratuita para sus hijos, oportunidades de formación o subsidios de desempleo constituye un fuerte atractivo. De hecho, en algunos estudios los inmigrantes señalan la atención a la salud y el acceso a la educación como motivaciones más importantes para emigrar que un mejor salario.
Sin embargo, no en todos los países de destino este estímulo actúa de igual forma, debido a las diferencias existentes en la cobertura social de los inmigrantes. Por ejemplo, en materia de educación, aunque la mayoría permite el acceso inmediato a todos los inmigrantes, en algunos países los niños inmigrantes no tienen acceso a la escuela pública o deben pagar más, y en otros no se permite el acceso a la educación de los niños en situación irregular. En relación con el acceso a profesionales médicos en el marco del sistema de protección social, algunos trabajos han demostrado que la salud de los inmigrantes registra importantes mejoras.
c) Mayor conocimiento y cercanía entre el Norte y el Sur
En las últimas décadas, la revolución tecnológica y los avances en materia de infraestructuras y transportes hacen que estos sean más baratos y rápidos, acercando las regiones deprimidas y las ricas. También las innovaciones en materia de comunicaciones hacen llegar información sobre el modo de vida en países avanzados al último rincón del planeta, haciendo más visible e insostenible la desigualdad existente. De esta forma, el desarrollo tecnológico facilita la decisión de emigrar e impulsa los flujos migratorios.
d) Cadena migratoria
Cuando familias empobrecidas de PED toman la decisión de emigrar ponen en marcha una cadena migratoria que se convierte en reclamo de nuevos emigrantes. Así, en numerosas ocasiones, la decisión de emigrar se plantea como una estancia por un tiempo limitado, pero se transforma en migración permanente cuando el inmigrante se integra en el país de destino y decide no regresar a su lugar de origen.
Conflictos bélicos y desastres ambientales
El resultante de estas situaciones es la migración forzada: personas que emigran porque se ven obligadas a ello debido a conflictos bélicos, falta de libertad, terremotos, volcanes, inundaciones y otros problemas relacionados con la degradación del medio ambiente, como la pérdida de tierras de cultivo, bosques y pastizales.
La población de inmigrantes forzados es especialmente vulnerable y plantea problemas diferentes al resto de los inmigrantes, como la atención rápida para la subsistencia de los desplazados o los reasentamientos de población.
Dentro de esta categoría, el grupo más conocido y cuyo número es más preciso es el de refugiados, integrado por personas que huyen de países asolados por guerras o violencia.
Motivos profesionales
Otra de las causas de la migración internacional es el “éxodo de profesionales”, o migración de los jóvenes más cualificados de PED a los mercados laborales de los países industrializados.
En este grupo se sitúan también aquellas personas que presentan un perfil profesional adecuado para desempeñar trabajos específicos, como deportistas, científicos o técnicos.
Por ejemplo, los ingenieros informáticos de algunos países del sudeste asiático son muy codiciados por empresas del Norte como Motorola o Microsoft.
En las últimas décadas han confluido algunas circunstancias, como los procesos de integración económica, la proliferación de empresas multinacionales o la creación de organismos internacionales, que favorecen este tipo de migración y contribuyen a explicar la tendencia creciente del volumen de emigrantes que responde a causas profesionales, a pesar de representar aún una proporción muy reducida en relación al total.
El Impacto de las Migraciones en los Países de Origen
La mayoría de los trabajos sobre migración internacional analizan su impacto sobre los países de origen en términos de ventajas e inconvenientes. Siguiendo esta pauta, entre los beneficios destacarían las remesas procedentes de emigrantes, las mayores posibilidades de formación y la menor presión demográfica sobre el territorio, que contribuye a reducir los niveles de desempleo y atenúa el riesgo de sobreexplotación de los recursos naturales.
Por lo que se refiere a los inconvenientes, destaca la pérdida de población joven y con capacidad, y los retornos masivos y repentinos de trabajadores que tienen lugar en las fases bajas del ciclo económico.
Sin embargo, aquí no se ha seguido este enfoque, ya que, en ocasiones, los efectos negativos y positivos se superponen y una misma cuestión puede suponer al mismo tiempo ventajas e inconvenientes. Por ello, se han seleccionado los impactos más significativos, recogiendo las principales aportaciones en relación a los mismos.
Remesas de emigrantes
Existe un amplio consenso en señalar que las remesas, es decir, los fondos en divisas que los inmigrantes envían a su país de procedencia, constituyen el principal beneficio de las migraciones para los países de origen. Las remesas brutas son la segunda fuente de entrada de flujos financieros en países en desarrollo (PED), suponiendo casi 2/3 de la inversión directa extranjera y el triple de la ayuda oficial al desarrollo.
Además de su relevancia en términos cuantitativos, cabe señalar un aspecto cualitativo añadido: las remesas tienden a ser fuentes de ingresos más predecibles y estables que las inversiones extranjeras o la ayuda al desarrollo. De hecho, en las situaciones de crisis económicas, todos los flujos de capital a PED han disminuido salvo las remesas de emigrantes, y esto, de acuerdo con el Banco Mundial, responde a las siguientes razones:
- Las remesas son enviadas no solo por los nuevos emigrantes, sino por flujos migratorios acumulados a lo largo del tiempo.
- Las remesas constituyen una parte reducida del ingreso de los emigrantes y estos las continúan enviando aunque sus ingresos se reduzcan.
- La duración del tiempo de permanencia de los emigrantes en los países de destino se ha alargado, con lo que continúan enviando remesas durante más tiempo.
La mayor parte de los PED se han convertido en importantes receptores de divisas, aunque existen grandes diferencias entre ellos.
a) Impacto sobre el crecimiento económico
La cuestión clave que centra la mayoría de las investigaciones sobre las remesas de emigrantes es su impacto económico en los países de origen. Los efectos son múltiples y se ven afectadas variables que van, desde el consumo y la inversión, hasta la balanza de pagos y, en última instancia, el crecimiento y desarrollo de los países que las reciben.
Centrándonos en las repercusiones sobre el crecimiento económico, parece evidente que la magnitud del impacto depende de cómo se gaste el dinero recibido a través de las remesas. No hay duda de que si las remesas se destinan a la inversión empresarial, van a tener un efecto positivo sobre el crecimiento y el empleo. Este es el caso de algunas remesas que se asignan a bienes de inversión, como herramientas, o las que constituyen una fuente de capital de operación para pequeñas empresas. De hecho, para numerosos hogares pobres con muy escaso acceso al crédito, las remesas pueden representar la única fuente de financiación.
Pero la literatura sugiere que las remesas se gastan más a menudo en salud, vivienda y consumo para cubrir necesidades básicas que en inversión. Estos resultados no sorprenden, puesto que, en la mayoría de los casos, las familias receptoras se encuentran en situación de necesidad y no poseen grandes opciones para renunciar a su consumo.
Por otra parte, en muchos PED no existen facilidades para la inversión: las bajas tasas de interés para los pequeños ahorradores y la falta de programas de crédito no impulsan el desarrollo de la inversión y las iniciativas empresariales.
A pesar de ello, recientes trabajos muestran que las remesas, incluso cuando no se destinan a la inversión, tienen importantes efectos multiplicadores: un dólar invertido en alimentos estimula las ventas de una pequeña tienda que tiene una demanda adicional de alimentos y transporte, demanda que a su vez estimula la producción y el empleo.
Otras variables económicas que se ven afectadas por las remesas de emigrantes son la balanza de pagos y la inflación. Por lo que se refiere a la primera, las remesas compensan en gran medida los déficits crónicos de balanza por cuenta corriente de muchos PED. En este sentido, tienen un impacto más positivo que otras entradas de capital, puesto que no están sujetas a reembolsos, ni intereses, ni están asociadas a proyectos de inversión concretos, como es el caso de préstamos internacionales o inversión directa extranjera. En cuanto a la inflación, los efectos de las remesas sobre esta variable pueden ser negativos si generan una demanda mayor que la que la economía es capaz de atender. Cuando esto sucede, el exceso de consumo puede presionar al alza los precios, generando un proceso inflacionario.
b) Contribución a la reducción de la pobreza
El impacto positivo sobre el crecimiento económico hace que, en muchos casos, las remesas tengan una importante repercusión sobre la reducción de la pobreza. De ahí que se esté empezando a considerar la migración internacional como uno de los más relevantes mecanismos de la lucha contra la pobreza en la actualidad, ya que, generalmente, llegan de forma directa a las familias más empobrecidas.
Sin embargo, también hay voces que disienten de esta visión positiva del impacto de las remesas. Algunos señalan que, dado que el receptor de las remesas destina estas al consumo de bienes básicos, su repercusión es reducida y, por otra parte, no se siente obligado a invertirlas por el hecho de recibirlas y tampoco a realizar esfuerzos para dejar de necesitarlas. Se podría pensar que este efecto es similar para el país en su conjunto. Sobre todo si las remesas permiten cuadrar las cuentas de la nación eludiendo las reformas de calado que suelen requerir los países de los que se emigra.
Asimismo, también se cuestiona la viabilidad de las remesas como estrategia de desarrollo económico, ya que estas tendrán un impacto limitado mientras las economías continúen siendo incapaces de producir suficientes empleos e ingresos.
Pérdida de trabajadores cualificados
La emigración supone para el país de origen una menor presión demográfica sobre el territorio, lo que significa que el riesgo de sobreexplotación de recursos naturales se atenúa. También conlleva un alivio de la presión sobre el mercado laboral que, dadas las escasas oportunidades de empleo y las elevadas tasas de paro que se registran en los PED, puede dar como resultado una reducción de los niveles de desempleo.
Sin embargo, a pesar de estos aspectos positivos, la pérdida de trabajadores tiene en general una connotación negativa para los países de origen, porque muchas de las personas que emigran son las más preparadas, las más competentes. En este sentido, se produce una fuga de cerebros que hace que el país pierda una gran parte de su mano de obra cualificada, reduciendo así sus posibilidades de crecimiento económico a largo plazo.
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), este fenómeno podría repercutir también en los movimientos de capital porque las empresas extranjeras podrían renunciar a invertir en un país que se queda sin sus trabajadores más cualificados.
Los profesionales emigran por muy diversas razones: una remuneración más alta, mejores condiciones laborales y mayores oportunidades de formación y promoción. Pero, además, las políticas migratorias de los países de destino estimulan en cierta medida la fuga de cerebros, puesto que restringen la entrada a trabajadores no cualificados y, sin embargo, permiten la inmigración de personas cualificadas mediante mecanismos de contratación y sistemas de selección que consiguen atraer a los profesionales más competentes de los PED.
Retorno de emigrantes
De acuerdo con los datos de la OCDE, entre el 20 y el 50 % de los inmigrantes dejan el país en los 5 primeros años, muchos de ellos para volver a su país de origen. Sin embargo, las razones que explican el retorno son muy distintas en unos casos y otros y, por tanto, sus efectos sobre el país de origen también difieren.
Una de las causas del retorno es la consecución de sus objetivos, normalmente haber obtenido una cierta suma de dinero que les permita retornar e invertirlo, o el surgimiento de una nueva oportunidad de trabajo en su país. En estos casos, los retornados pueden contribuir a sus países de origen aportando capital financiero, pero esta no es la única contribución que realizan. Por lo general, también aportan capital social o contactos de valor y capital humano, puesto que una de las oportunidades que brindan los países de destino es la de mejorar la cualificación y formación de los trabajadores. De hecho, esta contribución se estima tan positiva que algunos países en desarrollo han intentado estimular el retorno de sus emigrantes.
Otras veces el factor decisivo es la mejora de la situación en el país de origen, de manera que la decisión de regresar resulta más atractiva. No solo por los problemas ya señalados, sino también porque algunos países de destino de inmigración están incentivando el retorno a través de medidas como pago de billetes o pago único de prestaciones de seguridad social, aumentando al mismo tiempo sus restricciones a la entrada y permanencia de inmigrantes.
Impacto de las Migraciones en los Países de Destino
Al igual que sucedía en el caso del impacto sobre los países de origen, la mayoría de los trabajos sobre migración internacional analizan sus efectos sobre los países de destino en términos de ventajas e inconvenientes. Entre las ventajas se suele señalar la contribución al crecimiento económico del país, la afluencia de población formada sin coste educativo (es decir, inmigrantes que aportan conocimientos y habilidades que no han supuesto un coste en educación para el Gobierno del país receptor), así como el rejuvenecimiento de la población, que contribuye a compensar el envejecimiento demográfico de los países receptores.
Por lo que se refiere a los inconvenientes, habitualmente se señala la salida de divisas derivada de las remesas de emigrantes.
No obstante, y a pesar de la importancia de las repercusiones señaladas, la mayoría de los trabajos que analizan el impacto de la migración sobre los países de destino se centran en sus efectos sobre el mercado laboral y sobre los presupuestos públicos. Vamos a analizar el impacto sobre:
- El crecimiento económico.
- El mercado laboral.
- El presupuesto público.
a) Impacto sobre el crecimiento económico
Al analizar el impacto económico de la inmigración sobre los países de destino, nos encontramos con que, en ocasiones, el debate económico queda relegado a un segundo plano frente a la relevancia de las repercusiones sociales derivadas de la entrada de inmigrantes, y las dificultades de adaptación e integración entre la población del país de destino, y los trabajadores y familias inmigrantes con valores sociales y culturales muy diferentes entre sí.
Las opiniones en relación a la contribución de los flujos migratorios divergen: mientras algunos sostienen que un incremento de la población derivado de la inmigración supone un lastre para el crecimiento de los países de destino, otros consideran lo contrario. La evidencia empírica parece respaldar a estos últimos.
Sin embargo, en el análisis del impacto sobre el crecimiento de los países receptores no se puede generalizar, ya que deben tenerse en cuenta numerosos factores. En relación al consumo, por ejemplo, las necesidades y los gustos de los inmigrantes son diferentes de los de la población nacional. Desde el aumento del número de vuelos a sus países de origen y el incremento de las empresas de envíos y locutorios, hasta la oferta de determinados alimentos para los diferentes grupos de población extranjera, la economía comienza a producir productos y servicios que antes no se ofertaban y que ahora se dirigen a atender la demanda de los inmigrantes.
Otra variable afectada que también influye en el crecimiento es la balanza de pagos. Para los países de destino, el envío de remesas de emigrantes a sus países de origen constituye una salida de capital que contribuye a deteriorar el saldo de la balanza de transferencias corrientes.
b) Efectos sobre el mercado laboral
El impacto en el mercado de trabajo se ha convertido en una cuestión central en los trabajos que analizan los efectos económicos de la migración en los países de destino.
En relación a este tema surgen dos preguntas clave:
- ¿Desplazan los inmigrantes a los trabajadores nacionales ocupando sus puestos de trabajo?
- ¿Están los inmigrantes reduciendo los salarios del país de destino?
A continuación intentaremos recoger de forma resumida los planteamientos más relevantes.
1) El ajuste entre la demanda y la oferta de mano de obra: la visión tradicional
Desde un punto de vista teórico, la inmigración es entendida como un movimiento internacional de mano de obra que responde a un desequilibrio entre la oferta y la demanda de trabajo a nivel internacional. En este contexto, y de acuerdo con los tradicionales modelos neoclásicos, el ajuste del mercado de trabajo se produciría, bien mediante cantidad, con lo que el incremento de la oferta de mano de obra derivada de la inmigración conduciría a un aumento del nivel de paro del país de destino, bien mediante precio, es decir, reduciendo el salario del trabajo nativo sustitutivo (de similar cualificación al del inmigrante).
De acuerdo con este planteamiento, la respuesta a las preguntas formuladas sería que, o bien los inmigrantes desplazan a los trabajadores nacionales ocupando sus puestos de trabajo, y haciendo que pasen a situación de desempleo, o bien presionan a la baja los salarios.
2) Los nuevos factores a considerar: alterando los supuestos de la visión tradicional
Estos modelos han sido criticados por su carácter estático y por establecer unos supuestos de partida demasiados estrictos.
- En primer lugar, se argumenta que los mercados no son cerrados ni estáticos, con lo que los trabajadores nativos pueden reaccionar ante la llegada de inmigrantes con una mayor movilidad trasladándose a otros sectores, regiones o incluso aumentando su nivel de cualificación.
- En segundo lugar, algunos autores señalan que es irreal suponer que la mayor disponibilidad de trabajo, en un contexto dinámico, no arrastra la generación de factores complementarios acumulables. Por un lado, porque los inmigrantes pueden crear sus propias empresas o trabajar como autónomos. Y por otro lado, porque, al contrario de lo que suponen los modelos de equilibrio general, la renta que obtienen los inmigrantes se destina en buena parte al gasto en el país de acogida, aumentando con ello la demanda agregada e incentivando una mayor inversión.
- En tercer lugar, se considera que la presunción de que el trabajador inmigrante, cuando ocupa un empleo, desplaza al trabajador nacional del mismo es un supuesto excesivamente rígido.
- En cuarto lugar, tampoco se contemplan las variaciones cualitativas del trabajador inmigrante. En este sentido, la atribución de un bajo nivel de cualificación a la mano de obra inmigrante es un supuesto excesivamente simplificador, puesto que las personas que emigran en algunas ocasiones no suelen ser las más pobres, y, de acuerdo con los datos analizados en el primer apartado, existe un elevado porcentaje de inmigrantes con educación superior.
Al margen de la rigidez de los supuestos de los modelos tradicionales, existe un gran número de factores que hacen que el impacto sobre el mercado laboral sea aún más complejo. En este sentido podemos señalar las siguientes cuestiones:
- Algunos han señalado que los inmigrantes “engrasan las ruedas” del mercado laboral: su mayor movilidad laboral contribuye a reducir las diferencias en las oportunidades económicas entre los distintos territorios, mejorando la eficiencia del mercado laboral.
- Algunos estudios que han analizado la forma en que las políticas pueden influir en el impacto de la inmigración sobre el mercado laboral consideran que el marco institucional, y cuestiones tales como el coste de despido o salarios rígidos, pueden agravar el impacto de la inmigración sobre el nivel de empleo de equilibrio del país.
Las cuestiones analizadas en este apartado nos permiten comprender que son muchos los factores a tener en cuenta a la hora de analizar el impacto de los flujos migratorios sobre el mercado laboral, lo que hace que este tema revista una gran complejidad. En este sentido, los investigadores suelen admitir que la relación estudiada no es universal y generalizada y que cada caso requiere de análisis específicos.
c) Efectos sobre los presupuestos públicos
Al igual que sucede con el impacto sobre el mercado laboral analizado en el anterior apartado, los efectos de la inmigración sobre los presupuestos públicos son objeto de una fuerte controversia. De hecho, en muchos países se observa un creciente temor a que los inmigrantes terminen siendo una carga para el Estado debido a que lo que obtienen de las arcas públicas supere lo que aportan.
Por una parte, los inmigrantes están sujetos al pago de determinadas contribuciones, y por otra, son beneficiarios de determinados bienes públicos, entre ellos asistencia sanitaria, educación en todos sus niveles, utilización de infraestructuras públicas, subvenciones o pensiones de jubilación. Para conocer el impacto final habrá que calcular ambos efectos.
1) El volumen de aportaciones de los inmigrantes
Las contribuciones dependerán de una serie de factores:
- Un primer elemento a considerar es la edad del inmigrante al llegar al país de acogida. Los que llegan en edad de trabajar supondrán mayores ingresos a la Hacienda Pública y a la Seguridad Social que los que lleguen siendo niños.
- Un segundo elemento, en torno al que existe un amplio consenso, es el nivel de capacitación de los inmigrantes, dado que los trabajadores más cualificados tienen mayores ingresos y pagan más impuestos.
- Finalmente, el nivel de aportaciones al presupuesto público dependerá en gran medida de la situación de legalidad del trabajador inmigrante, dado que aquellos que trabajan en economía sumergida reciben determinados beneficios pero no aportan ingresos, ya que no cotizan ni pagan impuestos.
2) El gasto en asistencia social a inmigrantes
Al igual que las aportaciones de inmigrantes, los gastos también se ven influidos por numerosos factores como la situación de legalidad o la edad del inmigrante. Por ejemplo, determinados gastos, como educación y formación laboral, están relacionados con niños y jóvenes, mientras que los gastos sanitarios aumentan con la edad.
Sin embargo, el cálculo del gasto público atribuible a los inmigrantes reviste una mayor complejidad que el cálculo de ingresos. Y, si bien no resulta excesivamente complicado calcular el gasto en cuestiones como educación o sanidad, es difícil calcular qué parte de servicios como limpieza de las calles o carreteras es atribuible a la llegada de inmigrantes.
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