12 Oct

Ética de Máximos y Mínimos: Definiciones y Alcance

35. ¿Qué significa que las religiones pertenecen a la ética de máximos?

Las religiones pertenecen a la Ética de Máximos porque esta se refiere a tener una vida de bien, una vida planificada y los medios para obtenerla, contemplando siempre la felicidad y llevando a una vida digna de ser vivida, con signos religiosos o laicos. La Ética de Máximos habla del bien, la felicidad y las virtudes, siempre con la finalidad de vivir bien y hacer el bien, objetivos que gran parte de las religiones persiguen. En conclusión, la Ética de Máximos propone vivir en plenitud y presenta un camino para lograrlo.

36. Fórmula del Pluralismo Moral: Exigencias de Justicia e Invitación a la Felicidad

La fórmula del pluralismo moral consiste en compartir unos mínimos morales de justicia, aunque discrepemos en los máximos de felicidad. La justicia se nos presenta como una exigencia a la que debemos dar satisfacción si no queremos quedar por debajo de los mínimos morales, mientras que los ideales de felicidad nos atraen, nos invitan, pero no son exigibles.

La Dimensión de la Felicidad: Subjetiva y Objetiva

37. Felicidad Objetiva: La Ciudad Feliz

La concepción de una vida feliz implica la imposibilidad de que exista un magisterio ético, con autoridad reconocida por todos, para interpretar en exclusiva qué es lo justo o qué modos de vida hacen felices a los seres humanos. De este modo, se podría aspirar a una ciudad feliz, donde los ciudadanos, bajo ciertos parámetros, fueran generalmente felices.

38. Felicidad Subjetiva

La felicidad subjetiva está relacionada con aquello que una persona considera que le produce felicidad, lo cual no tiene que ser necesariamente lo mismo que para otra persona. Cada individuo cifra su felicidad de distintos modos:

  • Para unos puede ser el adquirir conocimientos.
  • Para otros, el disfrutar el cariño de una persona.
  • Para otros, el conseguir el bienestar de los menos afortunados.

Esto concibe que cada persona tenga diferentes fundamentos de lo que para ella es la felicidad, porque lo que le hace feliz es intrínseco a cada individuo.

Pluralismo, Tolerancia y Autoridad Ética en la Democracia

39. ¿Hasta dónde puede llegar la tolerancia en una sociedad democrática?

En una sociedad democrática pluralista existe un reparto de papeles a la hora de orientar la conducta de los ciudadanos. Los tres poderes que constituyen un Estado de Derecho son:

  1. El Parlamento elabora las leyes a las que la ciudadanía debe atenerse.
  2. El Poder Ejecutivo debe encargarse del cumplimiento de unas leyes legítimamente promulgadas.
  3. Al Poder Judicial corresponde la tarea de enjuiciar las conductas de las personas si estas atienden o no las leyes.

Estos poderes guardan relación con las leyes jurídicas que han de ser obedecidas por todos los ciudadanos, sean cuales fueren sus convicciones morales o religiosas. Por ello, una discrepancia moral o religiosa con las leyes abre el capítulo de la objeción de conciencia y de la desobediencia civil, que son en tantas ocasiones el motor de cambio de una Constitución democrática o el motivo por el que se reinterpreta cierta legislación a la luz de las exigencias de lo que se ha llamado moral crítica.

40. ¿Todo vale en la moral?

Ha de aclararse que la fórmula del pluralismo no es «todo vale», sino que, en lo que respecta a los proyectos de felicidad, cada quien puede perseguir los suyos e invitar a otros a seguirlos, con tal de que respeten unos mínimos de justicia. Quienes no respetan esos mínimos tampoco merecen el respeto de las personas.

41. ¿Ser agradecido pertenece a la ética de mínimos o de máximos, y por qué?

Pertenece a la Ética de Máximos, debido a que está vinculada con la felicidad de cada individuo. El agradecimiento nos da ese sentimiento de bienestar por las acciones propias o ajenas. Por ello, pertenece a la Ética de Máximos, y no a la Ética de Mínimos, ya que esta última engloba el bien de la colectividad y la justicia de cada una de las personas de nuestro alrededor. En consecuencia, el ser agradecido pertenece a la Ética de Máximos, que trata de lo bueno, la prudencia y los consejos.

42. ¿Qué persona o institución en una sociedad pluralista tiene facultad reconocida por todos para imponer las normas de ética de mínimos?

En el mundo existen varias esferas, y cada una debe establecer sus normas, leyes u organismos. La autora busca esos mínimos que vienen de dentro, donde la ética y las normas las harán las personas. ¿Quién está autorizado en una sociedad plural a imponer esos mínimos? No hay ningún magisterio, partido político o persona (en cuanto a la ética moral) que tenga esa autoridad.

43. ¿Por qué no puede haber un magisterio ético único, ni religioso ni laicista?

Éticamente, no hay nadie externo (un tercero) que pueda expresar la ética de una pluralidad de personas. En el ámbito religioso, se debe a que no existe una única religión, ni personas que pertenezcan a solo una, sino que hay una pluralidad de religiones y múltiples personas que siguen esas diferentes creencias. Por este motivo, un solo magisterio no podría decidir o pronunciarse correctamente sobre la pluralidad de religiones existentes en el mundo. Como consecuencia, las normas religiosas le corresponderán al magisterio de cada religión.

Deja un comentario