28 Nov

  • 1 LA INDEPENDENCIA DE LAS COLONIAS AMERICANAS (1810-1824)


De forma paralela a la Guerra de la Independencia y hasta el Trienio Liberal se desarrolló un proceso de emancipación de las colonias americanas de España, el cual acabó con la independencia de todos los territorios excepto Cuba y Puerto Rico.

  • Causas de la independencia

*Causas ideológicas: el pensamiento cultural  y filosófico fue el de la Ilustración en el s.XVIII, como en Europa. La independencia se basó en las ideas de igualdad, libertad y de soberanía nacional, que fueron llevados a la práctica como la independencia de la colonias inglesas de Norteamérica en 1776, y la Revolución Francesa en 1789.

*Causas políticas: la crisis política que vivió España en el gobierno de Carlos IV afectó también a la América española. Las colonias quedaron aisladas de la metrópoli por la guerra con Inglaterra, y como no podía comerciar con España, lo hizo con países neutrales, lo que favoreció su autonomía. Las colonias americanas aprovecharon la guerra de la Independencia para desligarse de España, ya que existía vacío de poder y desconcierto por la invasión francesa.

*Causas sociales: los criollos fueron los principales promotores de la independencia. Los criollos tenían un poderoso grupo social y poder económico, por el comercio y los territorios. Pero no tenían acceso a los cargos de administración colonial, puesto que eran designados en España y que eran ocupados por peninsulares. Para conseguir la emancipación se produjo una lucha entre los criollos y los españoles peninsulares, puesto que las capas inferiores y mayoritarias (indios, negros y mestizos) no eran independentistas.

*Causas internacionales: el imperio colonial español resultaba muy tentador para el resto de potencias, como Gran Bretaña, que no olvidaba el apoyo español para la independencia de las colonias de Norteamérica (1776-1783). Inglaterra apoyó a las colonias españolas para conseguir la libertad, obteniendo además beneficios económicos y comerciales.

Características y evolución del proceso independentista

El proceso independentista se inició en 1808 y terminó en 1825, dividido en dos etapas:

*Primera etapa (1808-1814): surgieron los primeros movimientos revolucionarios en México, Venezuela y Argentina aprovechando el vacio político de España, pero que más tarde cubriría José I Bonaparte, que era por ende rey de las Indias. Los criollos intentaron dar al movimiento legalidad y para eso establecieron los cabildos abiertos en la capital, un ayuntamiento al que convocaban a todos los vecinos. Y de éstos, surgieron las Juntas Supremas que destituyeron a las autoridades peninsulares en Venezuela, Nueva Granada, Chile o Quito. Crearon sus propios ejércitos e iniciaron relaciones comerciales con Inglaterra y EE.UU. No podían enviar soldados que restablecieran el orden y las Juntas revolucionarias apenas encontraron resistencia. Algunas juntas proclamaron la independencia, mientras se ponían en marcha diversas insurrecciones. Sólo en México el movimiento insurgente tuvo carácter sangriento, el cura Hidalgo, al frente de un ejército de indios, mestizos y criollos que reivindicaban el reparto de tierras y la igualdad de derechos entre etnias, y se llevó a cabo la matanza de españoles en Guadalajato.


*Segunda etapa (1814-1824): Tras el final de la guerra y el regreso de Fernando VII a España, el envío de 10000 soldados para frenar a los independentistas por el general Morillo en 1815. Los líderes, Simón Bolivar y José de San Martín se pusieron al frente de los independentistas. La independencia de las colonias americanas llegó en 1816 en el Congreso de Tucumán, que proclamó la independencia de Argentina. San Martín dejó el Boyacá en 1819. Venezuela tras la batalla de Carabobo  en 1821 y Ecuador tras la batalla de Pichincha. Éstos quedaron agrupados como Gran Colombia, cuyo frente se puso Bolívar hasta su muerto en 1830. En 1835, Perú se independizó con el nombre de Bolivia. En México, el virrey Itúrbide, declaró la independencia en 1821 y se proclamó emperador con el nombre de Agustín I. Dos años después fue depuesto y se proclamó la República. Guatemala, Honduras, El Salvador y Costa Rica se separaron de México y formaron la Confederación de las Provincias Unidas de América Central en 1823. Paraguay proclamó su independencia en 1811. Los nuevos países fueron reconocidos por los países europeos y EEUU. España solo conservó Cuba, Puerto Rico y Filipinas.

2. REGENCIA DE MARÍA CRISTINA DE BORBÓN (1833-1840)

– El inicio de la regencia y la aparición del carlismo

A la muerte de Fernando VII el 30 de septiembre de 1833, se nombró regente María Cristina de Borbón, madre de la infanta Isabel, que tenía solo tres años. La primera medida fue deponer sus cargos a los partidarios de su cuñado Carlos María de Isidro, quien quería ocupar el trono. María Cristina no contó con los absolutistas y se apoyó en los liberales, a los que concedió una amnistía y permitió regresar del exilio. La regente atrajo a los liberales y conservó el apoyo para su hija en el trono. En cuanto murió Fernando VII, se pronunciaron los carlistas, dirigido por Carlos María de Isidro que habían sido apartados del poder y que se oponían a que una mujer reinara España. Los seguidores de Carlos María de Isidro eran los carlistas, defendían los derechos del trono y la monarquía absoluta y la alianza entre el Trono y el Altar. Este pronunciamiento  triunfó en Navarra, Vascongadas, parte de Cataluña, Aragón y el Maestrazgo, fue un movimiento rural que contó con el apoyo de los campesinos, bajo claro y grandes propietarios agrarios. Fue un movimiento opuesto al mundo urbano e industrial. Los carlistas crearon juntas encargadas del gobierno de los territorios bajo su control y Carlos Mª lanzó un llamamiento al pueblo español (Manifiesto de Abrantes) en el que defendía sus derechos al trono y fijó su sede en Estella. La existencia de dos monarcas en España, Isabel II y Carlos IV, y la división de los españoles desembocó en una guerra civil que fue la I Guerra Carlista (1833-1840).

  • La aparición de los primeros partidos políticos

En el reinado de Isabel II aparecieron los primeros políticos. Surgieron por la discusión de la amplitud y profundidad de las reformas a desarrollar en pro de la construcción del Estado liberal que rompería con la estructura del Antiguo Régimen. Los partidos Moderado y Progresista serán los herederos del primer liberalismo gaditano y de la etapa venteañista, y los protagonistas del discurso político de España.

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