17 Mar

4. CONTEXTUALIZACIÓN DE SANTO TOMÁS a) Vida, obras y evolución de su pensamiento


La obra de Santo Tomás de Aquino (1225-1274) es muy extensa y variada, motivada casi siempre por necesidades de docencia, por peticiones de personas o para tratar de solucionar problemas de la teología de la época. Tomás enseñó en París, Roma, Nápoles y otras ciudades italianas, bajo la Orden de los Dominicos. Sus obras pueden clasificarse en comentarios, cuestiones y obras sistemáticas.
En comentarios, encontramos obras sobre las Escrituras, sobre diversos autores (en función de necesidades docentes, como los Comentarios sobre las Sentencias de Pedro Lombardo, un clásico de la teología escolástica) y sobre Aristóteles, estos comentarios son una obra de gran importancia en el pensamiento medieval.
En cuanto a las cuestiones, hay que distinguir entre las Cuestiones Disputadas y las Cuestiones Quodlibetales. Las primeras eran obras de investigación. Cada cuestión se dividía en artículos, consistía en el planteamiento de un problemacon dos posibles soluciones contrarias; se argumentaba a favor de una y de otra; se daba la solución; y, por último, se rebatían los argumentos dados a favor de la solución inadecuada. Las quodlibetales tenían la misma estructura, se realizaban en una sesíón pública con todos los alumnos y profesores de la facultad, el Magíster respondía a los problemas que se le planteaban sobre cualquier tema.Por último, en sus obras sistemáticas hay que distinguir entre sumas y opúsculos. Los opúsculos  son tratados breves y técnicos sobre alguna consulta que le hacían, temas filosóficos candentes  Las “sumas” eran tratados de filosofía o de teología, en los que se recopilaban cuestiones sobre un tema y estaban destinadas a su uso en la docencia y el estudio. Tomás compuso dos sumas, la Suma contra los gentiles y la Suma de Teología. Esta última es su obra más importante, aunque murió antes de poder concluirla.El pensamiento de Santo Tomás de Aquino puede dividirse en tres períodos:
En primer lugar, un período de formación, caracterizado por la teología agustiniana y por la influencia de Avicena, a quien consideraba entonces el intérprete genuino de Aristóteles. Esta etapa abarca su estancia en Colonia junto a Alberto Magno, entre 1248 y 1252, y su primera estancia en la universidad de París, entre 1252 y 1259.
A continuación, un período de transición, entre 1259 y 1268, que abarca sus estancias en diversas universidades italianas, como Nápoles, Orvieto, Roma y Viterbo. En este periodo entra de nuevo en contacto con las obras de Aristóteles, a través de la interpretación de Averroes y de las traducciones suministradas por Guillermo de Moerbecke, y se aleja del platonismo de Avicena y del neoplatonismo agustino.
Por último, un periodo de madurez, caracterizado por su aristotelismo averroísta corregido o adaptado a la fe católica, que coincide con su segunda estancia en París (1268-1272) y sus últimos años en Nápoles (1272-1274). Este periodo fue el más fecundo en la obra de Santo Tomás, pues en él redactó la mayor parte de la Suma de Teología, todos sus comentarios a las obras de Aristóteles y numerosos opúsculos y cuestiones.

B) Marco histórico y cultural

No podríamos entender la figura de Tomás de Aquino sin hablar de las universidades medievales, en algunas de las cuales sobresalíó como profesor. Las universidades medievales surgieron a partir del Siglo XII debido a  la demanda de profesores en las escuelas catedralicias. Estas escuelas cobraron gran auge y provocaron la difusión de la cultura entre los laicos, aunque eran destinadas a la formación de los canónigos, fueron frecuentadas por gentes ajenas a la catedral por lo que acogieron a todas las personas  que se interesaran por la vida intelectual y la cultura. Se convirtieron en escuelas urbanas. Y en ellas comenzaron a difundirse nuevas divulgarse  fuentes del saber, procedentes de otras culturas/La institución de la licentia docendi permitíó aumentar el número de maestros y el de programas que debían explicarse. Este fenómeno tuvo como consecuencia que a fines de siglo los maestros y los alumnos se asociaran en la Universitas magistrorum et scholarium, originando la institución que se convirtió, desde entonces, en el gran centro de estudio y difusión del saber en sus diversos ámbitos: La Universidad. /Sancionadas por una Carta Magna (concedida generalmente por la Iglesia o en algunos casos por un Rey), la cual permitía su creación, las Universidades adoptaron la estructura de facultades./Las universidades más antiguas son las de Bolonia (1158), París (1180), Oxford (1214), Nápoles (1224) y Salamanca (1239). La más famosa es la de París, que, protegida especialmente por el Papado, se convierte en el baluarte fundamental de la ortodoxia católica. Los filósofos y teólogos más renombrados del Siglo XIII pasan por sus aulas: Santo Tomás de Aquino, Alejandro de Hales, san Buenaventura, san Alberto Magno…  Santo Tomás de Aquino contribuyó a la difusión del pensamiento de Aristóteles, defendíéndolo de la prohibición a la que fue sometido inicialmente para hacer frente al influjo del averroísmo y su “teoría de la doble verdad”./En este contexto universitario debemos situar la Suma de Teología, obra en la que la exposición de la doctrina cristiana responde a los métodos usados por los maestros medievales. Después del enunciado de una cuestión, Tomás propone las preguntas que deben hacerse sobre ella. Son los diversos artículos, cuyos títulos originales están colocados en ese lugar. Así pues, cada artículo se introduce con una pregunta a la que se trata de dar una respuesta en base al método disputativo escolástico (lectio, quæstio, disputatio).

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