27 Jun
Los Orígenes de Roma
La Fundación y Primeros Habitantes
La ciudad de Roma, según se cuenta, fue fundada y ocupada inicialmente por los troyanos que, errantes y prófugos, carecían de asentamientos fijos bajo el liderazgo de Eneas. A ellos se unieron los aborígenes, un pueblo agreste, sin leyes ni jerarquía, libre e independiente. Así, en poco tiempo, una multitud heterogénea y errante se transformó en una comunidad gracias a la concordia.
Rómulo y la Consolidación de la Ciudad
Una vez fundada la ciudad, a la que llamó Roma en honor a su propio nombre, Rómulo acogió a un gran número de vecinos y eligió a cien de entre los más ancianos, a quienes denominó senadores por su avanzada edad. Al no tener él ni su pueblo esposas, invitó a un espectáculo a los pueblos vecinos de Roma y raptó a sus muchachas.
Numa Pompilio y la Institución Religiosa
A Rómulo le sucedió Numa Pompilio, a quien los romanos buscaron por su reconocido sentido de la religión. Él enseñó ritos sagrados, ceremonias y todo el culto de los dioses. Él instituyó los pontífices, augures y demás órdenes sacerdotales, y distribuyó el año en doce meses. En definitiva, sometió a un pueblo fiero hasta el punto de que lo gobernaba con la religión y la justicia.
Tarquinio Prisco: Expansión y Obras Públicas
Posteriormente, Tarquinio Prisco asumió el reino. Él duplicó el número de senadores, edificó un circo en Roma e instituyó los Juegos Romanos, que perduran hasta nuestra época. Además, venció también a los sabinos y entró primero en la ciudad, recibiendo los honores del triunfo. Construyó murallas y cloacas, y comenzó la edificación del Capitolio. En el trigésimo octavo año de su mandato, fue asediado por los hijos de Anco, el rey al que había sucedido.
El Fin de la Monarquía y el Nacimiento de la República
La Caída de Tarquinio el Soberbio
Cuando su hijo violó a Lucrecia, una mujer muy noble y, al mismo tiempo, la más virtuosa, esposa de Colatino, esta, tras quejarse de la injusticia a su marido, a su padre y a sus amigos, se quitó la vida en presencia de todos. Por esta causa, Bruto levantó al pueblo y depuso a Tarquinio. Así, siete reyes reinaron en Roma durante doscientos cuarenta y tres años.
La Institución de los Cónsules
A partir de este momento, en lugar de un solo rey, se instituyeron dos cónsules. Fueron creados con el propósito de que, si uno intentaba actuar mal, el otro, con un poder semejante, pudiera controlarlo. También se acordó que no tuvieran el poder por más de un año, para evitar que se volvieran demasiado prepotentes por la larga duración de su mandato, sino que fueran siempre moderados, sabiendo que después de un año volverían a ser ciudadanos particulares.
El Carácter Militar Romano
En primer lugar, la juventud, al mismo tiempo que soportaba la guerra, aprendía en el campamento la práctica militar mediante el trabajo y encontraban más placer en las armas brillantes y en los caballos militares que en las prostitutas y las comilonas. Así pues, para tales hombres, ningún trabajo era extraño, ningún lugar duro o difícil, ningún enemigo armado resultaba terrible.
Grandes Conflictos y Figuras
Aníbal: Genio Militar y Contraste Moral
Aníbal era el mejor tanto entre los soldados de caballería como entre los de infantería. Iba el primero a la batalla; una vez entablada, se retiraba el último. Grandes defectos igualaban a estas virtudes tan notables del hombre: crueldad inhumana, una deslealtad más que púnica, falta de sinceridad, ningún respeto por lo sagrado, ningún temor a los dioses, ningún juramento y ningún escrúpulo religioso.
La Invasión de Aníbal a Italia
Tras dejar a su hermano Asdrúbal en Hispania, Aníbal atravesó los Pirineos. Se abrió paso a través de los Alpes, todavía intransitables por esa parte. Se cuenta que condujo a Italia ochenta mil soldados de infantería, diez mil de caballería y treinta y siete elefantes. Mientras tanto, muchos ligures y galos se unieron a Aníbal. Sempronio Graco llevó el ejército desde Sicilia hasta Rímini.
Viriato: El Libertador de Hispania
Viriato fue asesinado por los suyos, tras haber agitado durante catorce años a las Hispanias contra los romanos. En primer lugar, fue pastor; luego, jefe de bandidos; y, por último, incitó a tantos pueblos a la guerra que fue considerado un libertador de Hispania frente a los romanos. Y al pedir los asesinos de este su recompensa al cónsul Cepión, se les contestó que nunca les había parecido bien a los romanos que los generales fueran asesinados por sus propios soldados.
Las Guerras Sertorianas en Hispania
Siendo cónsules Marco Emilio Lépido y Quinto Cátulo, y habiendo Sila apaciguado la república, estallaron nuevas guerras. Pues Sertorio, que había sido del partido de Mario, temiendo la suerte de los demás que habían sido ejecutados, incitó a las Hispanias a la guerra. Finalmente, en el octavo año, fue asesinado por los suyos.
La Rebelión de Espartaco
En efecto, 74 gladiadores —dirigidos por Espartaco, Crixo y Enomao—, una vez destruida la escuela de gladiadores de Capua, huyeron y, vagando por Italia, prepararon una guerra casi tan grande como la que había suscitado Aníbal. En efecto, una vez vencidos muchos generales y, al mismo tiempo, dos cónsules romanos, reunieron un ejército de unos 60.000 hombres armados.
El Perfil de Lucio Catilina
Lucio Catilina, nacido de familia noble, poseía una gran fortaleza espiritual y física, pero un carácter malvado y depravado. Su cuerpo soportaba el hambre, el frío y el insomnio por encima de lo que uno pudiera creer. Espíritu osado, mentiroso, versátil, fingido y disimulador de cualquier cosa; codicioso de lo ajeno, derrochador de lo suyo, apasionado en sus pensamientos. Bastante elocuencia, poca sensatez.
Campañas Militares en Hispania (Época de César)
Movilización de Tropas y Estrategia
Decididas estas cosas, Petreyo exigió jinetes y tropas auxiliares a toda Lusitania. Afranio, por su parte, los exigió a Celtiberia, a los cántabros y a todos los bárbaros que se extienden hasta el océano. Una vez reunidos, Petreyo llegó rápidamente ante Afranio y decidieron, de común acuerdo, librar la guerra junto a Lérida, aprovechando la ventaja del lugar.
Desafíos Naturales en Campaña
También sucedió un desastre imprevisto. En efecto, se levantó una tormenta tan grande que se constató que nunca había habido mayor cantidad de agua en aquellos lugares. Entonces, además, derritió la nieve de todos los montes, rebasó el borde de las orillas del río y destruyó en un día los dos puentes que había construido C. Fabio. Este suceso trajo grandes dificultades al ejército de César.
Alianzas y Suministros Locales
Entretanto, los oscenses y calagurritanos, que se habían unido a los oscenses, le enviaron legados y prometieron que cumplirían sus órdenes. Los tarraconenses, iacetanos y ausetanos, y pocos días después los ilurgavenses, que llegan hasta el río Ebro, siguieron a estos. Les pidió a todos ellos que le ayudaran con trigo.
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