05 May

El Proceso de Evaluación

Definición y Concepto

La evaluación es un proceso continuo, dinámico y sistemático, enfocado hacia los cambios en la conducta del alumno, y nos sirve para verificar los logros adquiridos en función de los objetivos propuestos. Nunca es una medida exacta, sino un juicio de valor que tiene lugar gracias a una medición cuantitativa y/o cualitativa.

La evaluación conlleva:

  • Precisión en la definición de los objetivos.
  • Recolección de datos referentes al aprendizaje.
  • La emisión de un juicio de valor sobre dichos datos.
  • La adopción de decisiones respecto a las posibles acciones.

Sin embargo, entre los teóricos de la educación, la evaluación también presenta detractores:

  • Los que están a favor argumentan que la evaluación permite conocer al alumno.
  • Los que están en contra sostienen básicamente que la evaluación solo busca la rentabilidad educativa.

Ambas perspectivas tienen algo de razón, de manera que podríamos afirmar que, en el ámbito de las AFD, existe una necesidad de evaluar por tres razones:

  • Rentabilidad social.
  • Informar al alumno.
  • Informar al profesor.

La Problemática de la Evaluación

En el ámbito educativo, y más concretamente en la educación física, la evaluación siempre ha resultado problemática por la complejidad de los contenidos a evaluar. A partir de las tres razones mencionadas, en la actualidad y en el medio educativo en general, se intenta ampliar el concepto de evaluación de manera que se sientan implicados tanto profesor como alumno, siguiendo unos principios:

  • Sistemática.
  • Integrada en el proceso educativo.
  • Teniendo en cuenta las diferencias individuales.
  • Utilizando diferentes medios adaptados al objetivo a evaluar.

La evaluación en el ámbito de las AFD resulta igualmente problemática, debido a que no se busca un rendimiento, sino la práctica de una actividad física con carácter lúdico, recreativo y/o de mantenimiento. De esta manera, no resultan fácilmente cuantificables los progresos obtenidos por el usuario o grupo de usuarios. No obstante, no debemos caer en la tentación de evitar la evaluación porque resulte compleja o de confundirla directamente con la medición.

Desde hace ya algunos años, el modelo educativo general ha cambiado sustancialmente para, desde una perspectiva humanista, centrarse más en la formación que en la instrucción.

Funciones y Finalidades de la Evaluación

En el Ámbito Educativo:

  • Conocer el rendimiento del alumno.
  • Diagnóstico.
  • Valorar la eficacia del sistema de enseñanza.
  • Pronosticar y orientar al alumno.
  • Motivar e incentivar al alumno.

En el Ámbito Deportivo:

  • Control e individualización del entorno.
  • Detección y selección de talentos.
  • Obtener datos para la investigación.
  • Asignar clasificaciones.
  • Agruparlos por niveles homogéneos de aptitud motriz, que sean flexibles.

En el Mantenimiento de la Condición Física:

  • Motivación.
  • Seguimiento de la condición física.
  • Programas adaptados.
  • Diagnóstico de deficiencias.
  • Objetivos accesibles para todos.

Modos de Evaluación

La Evaluación Continua y sus Fases:

Desde el punto de vista de la evaluación continua, se considera la propia evaluación como un proceso de perfeccionamiento en el cual se parte de una situación inicial y se busca conseguir cambios permanentes en la conducta que sean eficaces (fines o metas), a través de una serie de etapas (objetivos parciales) cuya superación condiciona el objetivo final. Para conseguirlo, deberemos evaluar de maneras distintas o, más exactamente, pasar por diferentes fases en el proceso de evaluación: inicial, formativa y sumativa.

Evaluación Normativa y Criterial:

Ambas nos sirven de referencia a la hora de evaluar: la evaluación referida a la norma solo sería admisible al final de un ciclo de aprendizaje, mientras que la evaluación basada en el criterio puede usarse en todo momento y resulta especialmente útil en la enseñanza de las AFD, en las cuales no se busca el rendimiento. En la tabla 5 se exponen las características más importantes de ambas.

Relación de los Modos de Evaluación con las Funciones en Cada Fase de la Evaluación Continua:

A pesar de que ambos modos de evaluación pueden resultar útiles, desde el punto de vista educativo, la evaluación normativa presenta dos deficiencias importantes que deben ser tenidas en cuenta:

  • No revela qué conocimientos o destrezas se han conseguido en una actividad, curso o unidad didáctica.
  • Rara vez proporciona un diagnóstico preciso que resulte útil al profesor y al alumno respecto a los errores en el aprendizaje.

La Evaluación Objetiva:

Una premisa para que la evaluación cumpla las funciones que persigue es que sea lo más objetiva posible. Esto no siempre es fácil de conseguir, y de hecho resulta particularmente difícil en las AFD, como se ha comentado anteriormente. En todo caso, debemos escoger y emplear cuidadosamente, además del procedimiento en sí, el/los instrumentos de evaluación más adecuados.

A cualquier instrumento de evaluación se le deben exigir tres cualidades:

  • Fiabilidad: una prueba resulta fiable cuando aplicada a una misma muestra en diferentes situaciones se obtienen resultados equivalentes.
  • Validez: indica el grado de precisión con el que una prueba mide lo que realmente pretende medir. Se refiere a los resultados de la medición, no a los instrumentos. Teniendo en cuenta las dificultades que conlleva la evaluación en las AFD, debido a la variabilidad de factores que concurren, tener en cuenta la validez de los resultados es fundamental para que nos podamos basar en ellos a la hora de sacar las conclusiones correspondientes.
  • Objetividad: supone que la prueba puede ser aplicada por distintos observadores, independientes entre sí, y ser válida en todos los casos, de manera que los resultados obtenidos por distintos investigadores puedan ser confrontados. Para conseguirlo se busca, en la medida de lo posible, que los test o pruebas estén estandarizados.

Condiciones de la Evaluación

Qué Hacer Antes, Durante y Después de la Evaluación:

  • Antes: Selección de los tests y/o pruebas adecuados, familiarización con el test, equipo e instalación necesarios, preparación de fichas o plantillas, preparación de instrucciones, técnica de administración de la prueba, información a los alumnos o usuarios.
  • Durante: Control de último momento, calentamiento, demostración, motivación, condiciones de seguridad.
  • Después: Recogida de datos, baremar puntuaciones o resultados, emitir un juicio o informe, archivar los resultados.

Requisitos para un Correcto Programa de Evaluación:

  • Se relaciona con los objetivos que pretendemos conseguir.
  • Es integral y uniforme.
  • Se utilizan diversos procedimientos y técnicas para la obtención de datos.
  • Está estructurado de forma coherente y continua.
  • Es funcional y práctico.

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