09 Ene

De validez interna (propios del estudio)
Fuerza de asociación:

A mayor intensidad de la relación ENTRE dos variables, mayor es la probabilidad de que exista una relación, pero no la garantiza.

Secuencia temporal:


Aunque en ocasiones es difícil establecerlo, la causa debe preceder al efecto. Es el único criterio considerado por algunos autores como CONDICIÓN sine qua non(condicion obligatoria)

Efecto dosis-respuesta:


Cuanto mayor es el tiempo y/o dosis de exposición al factor causal, mayor es el riesgo de enfermedad.
De coherencia científica
Consistencia o reproductibilidad:

Los resultados de un estudio deben mantenerse constantes y ser reproducibles por cualquier investigador en cualquier lugar.

Plausibilidad biológica:


La relación causal sugerida debe mantener la línea de los principios científicos aceptados en el MOMENTO, es decir, creemos más en una relación causal si conocemos su mecanismo patogénico(ante resultados extraordinarios, pruebas extraordinarias).

Especificidad de asociación y analogía:

Cierta especificidad (una causa conduce a un único efecto) aumenta la verosimilitud de la relación causal. Con analogía, nos referimos a que asociaciones causales similares PUEDEN producir enfermedades similares.

Evidencia experimental:


No siempre es posible realizar el estudio necesario, pero es la prueba más sólida de causalidad. En el caso de que no se PUEDA acceder a un ensayo clínico, hay quienes lo interpretan este punto en el sentido de que si un factor produce un efecto, éste debería cesar cuando desaparece el factor.

CARACTERISTICAS PSEUDOCIENCIAS

No tienen consistencia interna y externa

Es decir, soportan contradicciones lógicas y no se integran con otras ciencias.
-No aplican métodos como los característicos de las ciencias, aquellos cuya validez pueda aceptarse con independencia de las expectativas del observador. Pero, Norwood Russell Hanson, en su libro Patterns of discovery de 1958, y apoyándose en la obra póstuma de Ludwig Wittgenstein, particularmente en sus Investigaciones filosóficas, señala cómo la observación de un hecho cualquiera siempre está sujeta a las expectativas del observador.32

-Son dogmáticas

Sus principios están planteados en términos tales que no admiten refutación, a diferencia de las ciencias, donde las condiciones de refutación de las hipótesis o teorías están determinadas o pueden determinarse con precisión. Aunque esto último no es de aplicación estricta a las ciencias sociales, que a menudo no producen (ni pretenden producir) resultados precisos, y parten de premisas que hay que interpretar con cierto grado de subjetividad.

Proclaman teorías para las que no aportan pruebas empíricas, que a menudo contradicen abiertamente las observaciones o resultados experimentales conocidos y aceptados. Aunque este tipo de problema también aparecen ocasionalmente en las ciencias (véase por ejemplo: Problema del horizonte)
-Son incoherentes con el cuerpo teórico de disciplinas relacionadas, invalidando las explicaciones admitidas sin ofrecer alternativas mejores para la explicación de los mismos fenómenos ni reconocer la necesidad de hacerlo.

-Son inmutables

Al no tener bases experimentales, no cambian incluso ante nuevos descubrimientos (como excepción especial están las ciencias a priori, concretamente las matemáticas y la lógica). La máxima autoridad teórica se le sigue atribuyendo al fundador o fundadores de la disciplina, y sus enseñanzas son tratadas como escrituras sagradas.

Utilizan ante el público un lenguaje oscuro, o emplean términos que tienen un significado preciso en ciencia con sentidos totalmente diferentes.

No cumplen la estrategia de la navaja de Occam (también conocido como principio de parsimonia), que es un método heurístico de búsqueda creativa de soluciones que propone que, en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla es la que se debe considerar como la más probable. O cuando la cumplen es basándose en la utilización de «ganchos celestes» (por ejemplo el creacionismo lo explica todo con base en un solo ente: Dios).
-No buscan leyes generales.
-Descalifican las críticas por parte de las ciencias
, a menudo, utilizando falacias ad hominem, aduciendo conspiraciones o proclamándose objeto de persecución cuando sus planteamientos son rebatidos.

Invocan entes inmateriales o sobrenaturales, tales como fuerza vital, creación divina, inconsciente metafísico, quintaesencia, etc. de los que proclaman a la vez, contradictoriamente, que intervienen en fenómenos observables, pero que son inaccesibles a la investigación empírica. Aunque también en física se especula con entidades que, a día de hoy, son inaccesibles a la investigación empírica, pero que se supone que intervienen en fenómenos observables (véase por ejemplo: Bosón de Higgs), y en psicología se emplean entidades inmateriales tales como por ejemplo: «inteligencia».

Los promotores de la teoría hacen poco esfuerzo para desarrollar una teoría que supere los problemas a los que se enfrenta. Carecen de la vocación autocrítica propia de los científicos verdaderos.
-Proclaman y exigen que se reconozca su carácter científico, pero sólo ante el público general, renunciando o siendo muy reticentes a poner a prueba sus explicaciones ante la comunidad científica establecida. El hecho de reclamar estatus científico las diferencia de otros campos, como la religión o la metafísica.

Deja un comentario