Introducción y Contexto Histórico

A principios del siglo XV comienza en Italia una profunda renovación de las artes de la mano de las ideas del Humanismo. Este movimiento se llamó Renacimiento. El Renacimiento italiano comprende dos grandes periodos: el Quattrocento (siglo XV) y el Cinquecento (siglo XVI). A partir del segundo tercio del siglo XVI comienza un nuevo estilo: el Manierismo, que supondrá una transición hacia el Barroco.

La supervivencia del mundo clásico, la existencia de una burguesía acomodada y culta, su organización en ciudades y su enriquecimiento por el comercio europeo harán de Italia el mejor escenario para este Renacimiento.

Características de la Arquitectura Renacentista

Principios Estéticos y Racionales

La arquitectura renacentista presupone al arquitecto una sólida formación científica. Se trata de una interpretación de las leyes en las que se basaba el arte clásico.

• Belleza y Perfección: Muy presente la idea de belleza y perfección, basada en un estricto racionalismo. El edificio es el resultado de un estudio racional: proporción, concordancia, simetría y armonía. Se busca una mayor esbeltez.
• Racionalismo y Perspectiva: Estrechamente relacionada con los estudios matemáticos. El aspecto se organiza con las leyes de la perspectiva.
• Equilibrio Dimensional: Equilibrio entre las dimensiones de la planta y la altura: no debe predominar lo vertical sobre lo horizontal.
• Visión Unitaria: Preocupación por conseguir la visión unitaria de la obra.
• Antropocentrismo: Los arquitectos toman como modelo las proporciones del cuerpo humano para determinar las del edificio.

Características Técnicas y Constructivas

Materiales y Elementos Sustentantes

Materiales: Piedra, mármol, sillar almohadillado y, en menor medida, ladrillo y madera.

Elementos Sustentantes:

• Sustentante continuo: El muro, es frecuente que estén articulados con pilastras y líneas de imposta.
• Sustentantes discontinuos: Columna (se utilizan los órdenes clásicos, superposición de órdenes en las fachadas). También se usan entablamentos y frontones.

Elementos Sostenidos y Cubiertas

• El arco de medio punto.
• Cubiertas: Se emplean cubiertas planas con casetones, bóvedas de cañón o de arista, también de lunetos. La cúpula adquiere un especial protagonismo.

Plantas y Tipologías

Los tipos de edificios son muy variados, predominando:

• Religiosos con planta longitudinal (cruz latina o basilical). Ej. Basílica de San Lorenzo en Florencia de Brunelleschi.
• Religiosos de planta central (cruz griega o circular). Ej. San Pietro in Montorio de Bramante.

Elementos Decorativos

Se utilizan para decorar pilastras, entablamentos, frontones, etc.:

• Medallones o *tondos*, sillares almohadillados, guirnaldas, amorcillos, columnas abalaustradas, conchas, grutescos.
• Es frecuente que la decoración se disponga *a candelieri*.
• Portadas y ventanales enmarcados con frontones triangulares o curvos.

La Arquitectura Civil: Palacios y Villas

La arquitectura civil construye palacios y villas.

• Palacios: Se convierten en símbolo de elegancia y belleza. Ej. Palacio Médici-Riccardi y Palacio Farnesio. Responden a una estructura en forma de cubo con un espacio vacío (patio central) y fachada almohadillada.
• Villas: Son viviendas que los nobles y terratenientes poseían en el campo, que servían de centro económico y de reposo. Ej. Villa Rotonda de Palladio.

Periodos, Arquitectos y Obras Clave

Quattrocento (Siglo XV)

• Brunelleschi: *Santa Maria del Fiore* (Cúpula), Iglesia de San Lorenzo.
• Alberti: Iglesia de San Andrés de Mantua, Palacio Rucellai.

Cinquecento (Siglo XVI)

• Bramante: Templete de San Pietro in Montorio, Proyecto e inicio de la Basílica de San Pedro, Santa Maria delle Grazie.

Manierismo (A partir del segundo tercio del Siglo XVI)

• Miguel Ángel: La Sacristía Nueva de San Lorenzo (Capilla de los Médicis), La Biblioteca Laurenciana, Basílica y cúpula de San Pedro del Vaticano.
• Palladio: Villa Rotonda, Basílica de Vicenza, San Jorge.
• Vignola: La Iglesia del Gesù.

Evolución de la Arquitectura Renacentista Italiana

El Quattrocento en Italia (Siglo XV): Brunelleschi y Alberti

El Quattrocento italiano tiene su centro artístico en Florencia.

Brunelleschi

Gran arquitecto y escultor, creador del sistema de perspectiva como forma de representación de la realidad. Fue un gran innovador tanto en el aspecto arquitectónico como constructivo.

Obra destacada: La cúpula de *Santa Maria del Fiore*: grandiosa, elevada sobre un tambor octogonal y formada por una media naranja incluida en una cubierta apuntada realizada en ladrillo, con tirantas y linterna de mármol. También las iglesias de San Lorenzo y del Santo Spirito.

Alberti

Humanista y artista polifacético, tratadista del arte. Defiende una arquitectura basada en la armonía y la proporción áurea. Edificios con una clara tendencia al clasicismo. Ej. Basílica de San Andrés de Mantua y el Palacio Rucellai.

El Cinquecento en Italia (Siglo XVI): Bramante y la Crisis del Renacimiento

Florencia ha perdido su influencia y han aparecido nuevos focos de poder como Roma y Venecia. La primera mitad del siglo se caracteriza por la medida y el equilibrio. A partir de 1525 se empieza a abandonar el equilibrio y la armonía. Las composiciones pierden la simetría, proporción y serenidad. Se produce la crisis del Renacimiento y la llegada del Manierismo.

Bramante

Depura las formas decorativas, ciñéndose a los elementos clásicos. Prefiere los edificios de planta centralizada, con un estilo severo y monumental.

Obras: Templete de San Pietro in Montorio.

Proyecto e inicio de la Basílica de San Pedro: Consiste en una cruz griega con cuatro ábsides. La cúpula mayor estaba acompañada de cúpulas menores que ayudarían a solucionar los problemas de empuje de la cúpula central, sobre las capillas angulares y por torres en los extremos de estos mismos ángulos. Al morir Bramante, su proyecto pasa a manos de Sangallo y Rafael, hasta llegar a las de Miguel Ángel. En Milán construyó *Santa Maria delle Grazie*.

El Manierismo

A la severidad y sereno equilibrio de Bramante sucede, a partir del segundo tercio del siglo XVI, un estilo diverso que sustituye la serenidad por la tensión y la medida por los efectos de sorpresa. Es el desarrollo del Manierismo.

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