01 Jun
1. Fundamentos de la Ética: Definiciones y Ámbito
La ética es un tratado práctico que se refiere a las acciones humanas y a la vida moral, no solo para conocerlas, sino principalmente para dirigirlas.
Estudia el comportamiento libre de las personas y los problemas que aborda son universales.
Es la ciencia que proporciona criterios para ordenar los actos libres del ser humano en cuanto se encaminan a su fin último: la felicidad y la realización personal.
Llamamos ética a la elección de la conducta digna, al esfuerzo por obrar el bien, a la ciencia y al arte de conseguirlo.
1.1. Ámbito de la Ética
Se refiere al entorno en el que la persona se desenvuelve. Las acciones, sean buenas o malas, moldean y configuran al individuo, y estas pueden ser modificadas.
2. Necesidad de la Ética
La ética intenta establecer, mediante la razón, las normas reguladoras del comportamiento humano que permitan resolver los problemas que afectan a nuestra convivencia, aportando soluciones reales.
3. Objeto Material de la Ética
El objeto material de la ética son los actos humanos, aquellos que son voluntarios, razonados y libres.
4. Objeto Formal de la Ética
Es el punto de vista desde el cual se examina la moralidad de los actos humanos (distintos de las cualidades naturales como la inteligencia), considerándolos deseables o no.
Es el punto de vista desde el cual se estudia el objeto material. El bien y el mal afectan a la persona en su totalidad, haciendo al ser humano mejor o peor.
5. La Acción Voluntaria: Concepto y Características
5.1. Concepto de Acción Voluntaria
Es aquella que procede de un principio intrínseco y posee conocimiento formal del fin.
5.2. Características de la Acción Voluntaria
- Principio intrínseco: Procede del apetito interno, de lo más íntimo de la persona.
- Es lo contrario a la acción coacta, que es externa a la voluntad.
- Conocimiento formal: Tener conciencia clara de lo que se quiere obtener.
- Fin: Es aquello que se quiere conseguir, impulsado por sentimientos o necesidades.
- Intencional: Conciencia de lo que va a suceder; es activa y guiada por la razón.
6. Tipos de Actos Humanos
- Actos elícitos: Aquellos que proceden directamente de la voluntad, como el amor y el odio; son actos internos.
- Actos imperados: Ejercidos por una facultad distinta a la voluntad, se realizan después de otras facultades. La voluntad los utiliza como medios y son externos, perceptibles a través de los sentidos.
- Perfectamente voluntaria: Existe advertencia (tener claridad sobre lo que se va a realizar y sus consecuencias) y consentimiento (acto de la voluntad de aceptar o rechazar).
- Imperfectamente voluntaria: Falta alguna de las dos condiciones anteriores (advertencia o consentimiento), por ejemplo, en un acto impulsivo.
- Acción involuntaria: Se produce por ignorancia sobre algo que se debería saber; es decir, es voluntario en su origen, pero la acción en sí no lo es por falta de conocimiento.
- Acción no voluntaria: Provocada por la duda. Ante la duda, se debería abstenerse, lo que implica la obligación de resolverla.
7. El Objeto Directo de la Voluntad: Bien y Fin
El objeto directo o propio de la voluntad es el bien y el fin.
El bien es aquello que al sujeto le parece apetecible y bueno; puede ser realmente bueno o solo aparente.
El fin es todo aquello percibido como bueno, atractivo y apetecible en sí mismo.
Existen dos tipos de fines: el honesto (aquello que objetivamente tiene valor) y el deleitable (todo aquello que se presenta como placentero y genera satisfacción). El bien útil es un medio para alcanzar tanto el fin honesto como el deleitable.
8. El Fin Último
Se entiende por fin último aquel que se desea de modo absoluto y en función del cual se desean todas las demás cosas. Para alcanzarlo, se transita por múltiples fines intermedios hasta llegar a un fin supremo o final, como la felicidad y la realización personal.
9. El Objeto Indirecto de la Voluntad
También se denomina acción voluntaria indirecta.
Es la consecuencia de una acción directa que no es el objetivo principal, no es ni fin ni medio, ni siquiera está prevista, pero está inevitablemente unida a ella.
Para ser considerado objeto indirecto, no debe ser la causa de lo que realmente nos interesa.
Ejemplo: Se extrae un diente no con la intención de causar daño, sino para mejorar la salud bucal.
10. Niveles de Actuación Voluntaria
- Primera aprehensión de un fin: Complacencia de la voluntad (amor).
- Intención básica o querer eficaz: De un fin distante, no realizable inmediatamente, sino a través de acciones dirigidas a él.
- Decisión o elección: Acto elícito de la voluntad que tiene por objeto lo inmediatamente operable en vista del fin intentado (lo que se puede realizar ahora o no, de una forma u otra).
- Los medios: Son acciones concretas que se eligen y ejecutan para alcanzar un fin. (Tienen un valor instrumental).
11. Ejemplaridad
Es la influencia adquirida o prevista de nuestras acciones en la voluntad ajena (ej. personajes populares). Puede ser positiva (para una acción buena) o negativa (escándalo).
12. Cooperación
Ayuda o facilitación que nuestra acción presta a la acción que otro ya ha decidido autónomamente realizar. Puede ser cooperación formal (deseada por nosotros) o cooperación material (tolerada, aunque requiere de nuestra participación).
13. Diversos Conceptos de Libertad
- Estoicismo: No se sienten coaccionados por el orden cósmico. Aceptan el factum, la fatalidad del destino. La libertad es aceptar el destino prefijado por el universo.
- Sofismo: Introducen la idea de responsabilidad en los conceptos de dolencia, violencia, sugestión y pasiones que afectan a la libertad. La responsabilidad está unida a la libertad.
- Sócrates y Platón: La libertad es una virtud que tiene sus raíces en la ciencia y el saber; estas son condiciones de la libertad.
- Filosofía aristotélica: Se refirió a la libertad como condición del acto voluntario, lo que representa un cambio radical, ya que la libertad es un cambio interior.
- Pensamiento cristiano: Habla de la gracia, que libera de la esclavitud interna; es una característica de los seres racionales.
- Pensamiento moderno: No es una propiedad del querer, sino el poder de obrar como se desea.
- Concepto actual: La libertad es la capacidad de la voluntad de moverse por sí misma hacia el bien que la razón le presenta.
14. Dimensiones de la Libertad
La libertad posee dos dimensiones:
- Autodeterminación: Es la dimensión más importante. Es la capacidad de decidir sobre lo que se debe hacer, sobre uno mismo, y es la esencia del acto libre.
- Intencionalidad: Se refiere a lo que se desea obtener a nivel personal. La intención se dirige hacia el objeto.
15. Pasiones y Afectividad
15.1. Definición de Afectividad
Se denomina afectividad al conjunto de actos de las facultades apetitivas de la sensibilidad humana (pasiones, afectos, sentimientos, etc.). Es la idealización que algo nos produce, y eso es la afectividad en su sentido más restrictivo.
15.2. Definición de Pasiones
Actos o movimientos de las tendencias sensibles o apetitos. Proceden siempre de un conocimiento previo captado por los sentidos, que se convierte en un bien.
16. Influencia de la Afectividad en la Libertad
La afectividad no condiciona la libertad, pero la influye. La libertad siempre está regida por la razón, el conocimiento y la voluntad, a diferencia de otras facultades.
La pasión puede llegar a apartar la imaginación y el pensamiento de una persona de determinados objetos, y a condicionar dispositivamente el juicio práctico de la razón.
La razón debe moderar la pasión. El dominio de las pasiones es lo que se denomina virtud.
17. Advertencia y Consentimiento en el Acto Humano
17.1. Advertencia
Es el influjo del conocimiento en el acto humano; la inteligencia participa para saber qué se va a hacer y cuáles serán sus consecuencias. Puede ser:
- Actual: En el mismo momento en que se realiza la acción.
- Virtual: En el momento anterior a la realización del acto.
- Plena: Conocimiento perfecto de lo que se realiza y de su moralidad. El acto es perfectamente humano (voluntario).
- Semiplena: Conocimiento imperfecto.
17.2. Consentimiento
Es la aceptación o rechazo del fin, con conciencia de la acción, actividad y guiada por la razón. Puede ser:
- Voluntario directo: La voluntad desea esa misma acción.
- Voluntario indirecto: Efecto secundario permitido, previsto y directamente ligado a lo que se pretende.
- Coacto: Procede de un principio exterior y es contrario a la voluntad.
- Interno: Procede de una facultad espiritual y libre.
- Externo: Puede ser libre o coacto.
18. Imputabilidad de los Actos Humanos
Es el estado del ser humano como sujeto de acción, en virtud del cual esa acción le puede ser atribuida como su autor.
Cuando las atribuciones son mérito o culpa moral, se trata de imputabilidad ética o moral, lo que concierne a los actos humanos libres.
19. Elementos de la Moralidad del Acto Humano
19.1. El Objeto Moral: Proporcionalismo y Consecuencialismo
El objeto moral es un comportamiento que sigue a una elección libre y deliberada. Lo que la acción persigue es algo objetivo y define la naturaleza del acto.
Este objeto moral depende, sobre todo, de la conformidad del objeto o del acto de la voluntad con el bien de la persona, según el juicio de la recta razón. Solamente si el acto es bueno por su objeto, es ordenable al fin último.
Existen actos que, por su objeto, son intrínsecamente malos, es decir, son malos siempre y en sí mismos, independientemente de las intenciones de quien actúa y de las circunstancias.
No obstante, podemos identificar dos errores comunes:
- El proporcionalismo: El objeto moral de la acción se determina basándose en el balance entre los bienes y males que se persiguen.
- El consecuencialismo: El objeto moral de la acción se determina por las consecuencias que se pueden derivar.
19.2. La Intención de los Actos Humanos
Es un movimiento de la voluntad hacia el fin. La intención es algo subjetivo, lo que el sujeto desea lograr a través de la acción.
Nos indica el “porqué”, el bien al que apunta.
No obstante, una intención mala puede hacer malo un acto que en sí mismo era bueno. Por ejemplo, robar a un rico para construir un orfanato.
19.3. Las Circunstancias y su Influencia
Las circunstancias son los accidentes que modifican el objeto moral. Se consideran elementos secundarios del acto moral.
Dichas circunstancias pueden aumentar o disminuir la bondad o malicia de un acto, e incluso pueden hacer malo un acto que sin ellas no lo sería. Sin embargo, nunca pueden hacer buena una acción intrínsecamente mala. También pueden atenuar o aumentar la responsabilidad de quien realiza la acción.
Algunos ejemplos de circunstancias son:
- La falta de advertencia.
- La ignorancia.
- Los hábitos morales.
- La coacción o violencia.
- Enfermedades mentales.
- Las pasiones.
20. Principios de Actuación de los Elementos de la Moralidad
Los elementos o fuentes de la moralidad actúan en unidad según tres principios fundamentales:
- 1. El objeto moral: Otorga a la acción su moralidad intrínseca y esencia.
- 2. La recta intención: Es necesaria para que una acción sea buena por su objeto.
- 3. Las circunstancias: Pueden aumentar o disminuir la bondad o la malicia de la acción.
21. Las Pasiones y su Control en la Ética
21.1. Problema de las Pasiones y Tarea Personal
El principal problema de las pasiones es que la persona incapaz de dominarlas tiene algo de sí misma que escapa a su control y a su decisión libre; no se posee plenamente ni puede decidir libremente sobre sí o sobre los demás.
La tarea de la persona no es extinguirlas, sino moderarlas, dirigirlas hacia el bien y hacer que actúen de la forma debida.
21.2. Valoración Ética de las Pasiones e Imputabilidad
- Estoicos y Kant: Consideran que las pasiones son incompatibles con la debida pureza ética y moral.
- Aristóteles y Santo Tomás de Aquino: Consideran que las acciones moderadas por la pasión son propias del acto virtuoso.
No obstante, las pasiones humanas no son buenas ni malas en sí mismas; lo son según el objeto (la acción) y el modo de actuar sea conforme o no a la recta razón.
Imputabilidad
Es imputable si es consecuente a la voluntad. En cambio, no se considera imputable (se atenúa o se exime) si es antecedente a la voluntad.
21.3. El Control de las Pasiones
Las pasiones del ser humano están sometidas al gobierno de la razón y de la voluntad, las cuales se influyen mutuamente.
La persona virtuosa no actúa por pasión, sino por el adecuado equilibrio entre las pasiones y la razón; es decir, hace el bien con la pasión debida.
Aquella persona que no es capaz de dominar sus pasiones tiene algo de sí misma que escapa a su dominio y a su decisión libre; no se posee plenamente ni puede decidir libremente sobre sí o sobre los demás.
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