El sexenio democrático es una de las etapas más agitadas del Siglo XIX y la ultima de la consolidación del liberalismo en España. La revolución de 1868 “La Gloriosa” se inicia con un pronunciamiento en Cádiz que abre una etapa revolucionaria con la que se pretende instaurar un régimen político democrático, pero tras seis años de inestabilidad política, se vuelve a restaurar la monarquía de Alfonso XII.En el último periodo del reinado de Isabel II, entre 1863 y 1868, se produjeron una serie de crisis económicas y políticas que mostraban por una parte, las deficiencias del sistema liberal y por otra la debilidad de la economía capitalista.

FACTORES Económicos

La recesión se manifestó a un nivel financiero e industrial, y constituyo la primera gran crisis del sistema capitalista a nivel internacional, pero también coincidíó con una crisis de subsistencias. La crisis financiera, provocada por la bajada del valor de las acciones en Bolsa, se origino a raíz de la crisis industrial, en la que las pequeñas industrias no pudieron afrontar el alza de precios. A su vez, la crisis de subsistencias la causo malas cosechas que provocaron la escasez de alimento básico.

FACTORES Políticos

Gran parte de la población española tenía motivos de descontento con el sistema isabelino, el autoritarismo del Partido Moderado desencadeno la oposición del Partido Progresista, dirigido por Prim, que unido al Partido Demócrata, firmaron el Pacto de Ostende en 1867, en la cuidad belga, con la voluntad de unificar sus actuaciones para acabar con el moderantismo en el poder, lo que supuso el fin de la monarquía isabelina y dejaba la decisión entre la república o la monarquía en manos de las cortes constituyentes. A dicho pacto se adhirieron los unionistas tras la muerte de O’donnel.

LA Revolución (GOBIERNO PROVICIONAL)

Un levantamiento popular en todo el país contra el gobierno del Partido Moderado y contra la monarquía de Isabel II. La revolución comenzó con el alzamiento militar del brigadier Topete en Cádiz. Prim y Serrano volvieron del exilio para encontrarse con los sublevados, que se enfrentaron con los realistas al mando del general Manuel Pavía en el Puente de Alcolea (Córdoba), donde los revolucionarios resultaron victoriosos, por lo que el gobierno dimitíó e Isabel II se exilio a Francia. En muchas ciudades españolas se constituyeron Juntas Revolucionarias dirigidas por un sector de progresistas, demócratas y republicanos. Los sublevados propusieron el nombramiento de un gobierno provisional de carácter centralista. El nuevo gobierno provisional promulgo unos decretos para satisfacer las demandas populares y convoco elecciones a Cortes constituyentes, encargadas de redactar una nueva Constitución, la de 1869, la primera democrática de la historia de España. Establecíó un amplio régimen de derechos y libertades; a destacar el sufragio universal para varones mayores de 25 años, proclamaba la soberanía nacional, el Estado se declaraba monárquico, aunque los poderes del rey quedaban bastantes limitados. La tarea de Prim no era fácil, pero a pesar de los partidos opositores , fue bien recibido. Uno de los objetivos de la “Gloriosa” era reorientar la política económica y se emprendieron numerosas reformas: Se suprimíó la contribución de consumos, se establecíó la peseta como moneda, se promulgo la ley de minas para pagar la deuda pública y se liberaron los intercambios exteriores mediante la Ley de Bases Arancelarias.  La Constitución de 1869 establecía una monarquía democrática como forma de gobierno, por lo que fue encargado Amadeo de Saboyá. El nuevo monarca fue elegido rey en 1870, aunque tres días más tardes asesinaron a Prim, su valedor y consejero mas fiel. Tras tomarle juramento, las Cortes se disolvieron y comenzó una nueva etapa de monarquía democrática. Se consolido un régimen político basado en los principios liberal-democráticos, que frustro a otros grupos: El campesinado demandaba un mejor reparto de tierra, El movimiento obrero mejora las condiciones salariales y laborales, Los republicanos encarnaron gran parte de este descontento debido al fracaso de sus insurrecciones y a la imposibilidad de acceder al gobierno. El panorama político se establecía entorno a cuatro tendencias: A la derechas se situaban los carlistas, que defendían el catolicismo y la monarquía tradicional y los moderados, fieles a Isabel II y partidarios de la Restauración borbónica. En el centro se hallaba la conjunción monárquica-democrática, que agrupaba a diputados unionistas (Ríos Rosas) y progresistas (Prim). En la izquierda se encontraba el Partido republicano Federal, una escisión del Partido progresista, dirigida por Pi y Margoll y Figueras. Defendían la forma republicana del gobierno, la separación Iglesia/Estado y el laicismo de este. Existían dos tendencias:
los benévolos creían que el federalismo debía de establecerse de “arriba a bajo” y los intransigentes de “abajo a arriba” aunque un sector de republicano eran conocidos como unitarios.

El Reinado de Amadeo de Saboyá (1871-1873)

La nueva dinastía con escasos apoyos. Aunque satisfacía a progresistas y unionistas, no todos los sectores estaban de acuerdo. Contó con la clara oposición de la aristocracia, el clero y las camarillas cortesanas. El nuevo monarca pretendíó consolidar un régimen democrático, pero surgieron dificultades:MAmadeo I contó desde el principio con la oposición de los moderados que empezaron a organizar la restauración borbónica en Alfonso, hijo de Isabel II, dirigidos por Cánovas del Castillo. Un sector comenzó una insurrección armada en el norte, que dio lugar a la II Guerra Carlista, mientras que otros consolidaron un grupo político de orientación ultra católica y opuesta a los borbones.
Amadeo I no contaba con el respaldo de los sectores republicanos. La crisis fina del reinado de Amadeo I fue resultado de la desintegración de la coalición gubernamental. En 1873, Amadeo presento su renuncia al trono.

La Primera República Española (1873-1874)

La república fue aprobada el 11 de Febrero de 1873. Para presidir el gobierno fue elegido Estanislao Figueras. La república fue recibida con entusiasmo entre las clases populares que creyeron que había llegado un cambio social. Se convocaron elecciones de Cortes constituyentes, que ganaron los republicanos. Las cortes se abrieron, proclamaron la República Democrática Federal. Figueras dimitíó y el gobierno paso a manos de Francisco Pi y Margoll. Se presento en las Cortes el proyecto de una constitución que no fue aprobada. Se declaraba la libertad de culto y la separación de la Iglesia del Estado.  La nacíón estaba compuesta de diecisietes estados, y plateaba un estado descentralizado. La república tuvo que enfrentarse a grande problemas. Uno de ellos fue la insurrección carlista y la continuación de la guerra de Cuba. La sublevación cantonal fue el conflicto más grave. El cantonalismo es un sistema político que aspira a dividir el Estado en cantones casi independientes. La República dio un vuelco conservador con el nuevo gobierno Castelar no tenía mayoría en las Cortes por lo que las cerró y gobernó de forma autoritaria.  Se abren las cortes y Castelar sale derrotado. El general Manuel Pavía da un Golpe de Estado exigiendo la disolución de las cortes republicanas. El poder pasó al general Serrano que intento estabilizar el régimen republicano de carácter conservador. El pronunciamiento de Martínez Campos proclamó rey de España a Alfonso XII. El príncipe Alfonso de Borbon había firmado el manifiesto de Sandhurst redactado por Cánovas.