06 Jun

Conclusiones y Síntesis de Cada Periodo Histórico

Antigüedad (Egipto, Grecia y Roma)

Junto al concepto mágico-religioso del fenómeno salud/enfermedad, surge la perspectiva racional y precientífica de la salud, que ha servido de base para todo el desarrollo posterior de la medicina occidental. Esta perspectiva se inicia con la escuela Hipocrática y continúa con Galeno, quien amplía y compendia este saber. También debemos a los médicos hipocráticos la perspectiva ambientalista de la salud, aunque olvidaba el medio ambiente social como factor determinante de la salud.

Las estrategias de salud que combinaron los rituales médico-religiosos con tratamientos empíricos naturales fueron útiles pero insuficientes para resolver los problemas de salud de la mayoría de la población. Merece la pena destacar como factores importantes para mejorar la salud de la población las estrategias colectivas: las infraestructuras creadas y los rudimentos de la organización sanitaria.

Se estableció un sistema ético en la práctica médica que, con adaptaciones, ha perdurado hasta hoy.

Edad Media

Con las invasiones por parte de los pueblos del norte (bárbaros) a las ciudades de toda Europa, las costumbres de carácter higiénico se perdieron. Al tratarse de pueblos con costumbres diferentes, se produjo un deterioro. Junto con esta pérdida, la evangelización cristiana cobró protagonismo, promoviendo la creencia en un único Dios.

Esta falta de higiene fue la principal causa de numerosas infecciones y epidemias que diezmaron a grandes cantidades de población. Desconocían la causa de epidemias como la Peste, y al no tener cura, se extendían rápidamente debido a las condiciones insalubres. La población creía que se trataba de un castigo divino; por lo tanto, al no tener medios para detenerlas, recurrían a la oración. La gente salía en procesión para rezar a Dios y realizaba sacrificios y ofrendas; sin embargo, al congregarse en masa por las calles de pueblos y ciudades, la enfermedad se multiplicaba de forma inminente.

Los habitantes empezaron a percibir que la llegada de personas en barcos mercantes traía consigo nuevas enfermedades, lo que llevó a prohibir la entrada de embarcaciones como medida de seguridad. Así nació una de las medidas preventivas más conocidas: la cuarentena. Se aislaba a las personas que se creían contagiadas en una zona de los barcos y a las sanas en otra; si tras cuarenta días no aparecían síntomas, se les permitía desembarcar.

Otra medida preventiva que se tomó fue el aislamiento, aplicado por primera vez a pacientes con lepra. Al no tener curación, se les trasladaba a lugares apartados del resto de la población. Así, las órdenes religiosas y el cristianismo introdujeron el concepto de caridad, encargándose del cuidado de los necesitados. Por ejemplo, la Orden de San Lázaro trabajaba en hospitales ubicados en islas, conocidos como lazaretos. Para los enfermos, esto significaba un aislamiento total y de por vida.

El término hospital proviene de hospitalia.

Las órdenes religiosas hospedaban a pobres, enfermos, etc., y les asistían en todo lo posible. Además de esta labor, se dedicaban a traducir y compendiar todo el saber médico hipocrático y galénico al latín. Eran los más cultos; obtenían la información de obras rescatadas de las invasiones bárbaras, conservándose así a través de sus escritos y de la Escuela de Salerno. De este modo, cuidaron y transmitieron el saber.

Renacimiento-Ilustración

Esta etapa fue crítica, de transición entre la Edad Media y la Edad Moderna. A través de la incorporación de la nueva metodología científica, se obtuvieron logros en el conocimiento causal y algunos determinantes biológicos de la enfermedad y de sus mecanismos de transmisión (miasmática, contagium animatum).

Se recuperó la tradición ambientalista de la salud y la higiene, que pasó de ser un asunto privado a uno de carácter público, enfatizando la importancia del medio ambiente en la salud de la población. La influencia del mercantilismo propició la aparición de medidas colectivas eficaces para prevenir y mejorar la salud de la población. Por primera vez en la medicina, se apeló a los factores sociales como determinantes de la salud, abriéndose así la perspectiva social de la medicina. Aunque continuó la desigualdad asistencial en la provisión de servicios médicos.

Se asistió al nacimiento de un incipiente mutualismo entre trabajadores como forma novedosa de hacer frente colectivamente a las contingencias de la enfermedad (Friendly Societies – Sociedades de Amigos).

Siglo XIX – Revolución Industrial

Se produjo una transformación de las condiciones de trabajo que afectaron directamente a la vida y la salud. Los movimientos masivos del campo a las fábricas hicieron que pueblos enteros quedaran desiertos ante las oportunidades de trabajo que ofrecían los núcleos urbanos. Se produjo el llamado hacinamiento, ya que las viviendas a las que se trasladaban se construían de forma rápida y barata junto a las fábricas. Estas eran insalubres, afectando tanto a trabajadores como a sus familias, debido a la constante expulsión de gases nocivos para la salud. Este hecho fue responsable de numerosas enfermedades que acortaban directamente la vida de los trabajadores.

Las dramáticas condiciones de vida y de trabajo de la población evidenciaron la profunda relación entre pobreza y enfermedad. El protagonismo adquirido por el medio laboral y social como determinante de la salud poblacional se concretó en desarrollos legislativos en materia de salud pública. Nació un importante movimiento sanitario que sirvió de detonante para el inicio de nuevas políticas sociales y sanitarias.

A causa de las personas que traían mercancías por mar de otros países, llegaron enfermedades de Asia, como el cólera, y se tomó la decisión de implementar medidas de salud pública simultáneamente en todos los países de Europa. Se comenzaron a rescatar algunas de las estrategias de salud provenientes del Renacimiento. Siguiendo esta línea, en el año 1851 se realizó en París la 1ª Conferencia Internacional, que culminaría un siglo más tarde con la constitución de la OMS (Organización Mundial de la Salud). Se reivindicaron reformas sociales y emergió posteriormente nuevos sistemas de protección social para los trabajadores. Así, dio lugar a la aparición de los Seguros Sociales en Alemania en el año 1883.

Siglo XX y Siglo XXI: Descubrimientos y Eras de la Medicina

Descubrimientos en patología celular: Rudolf Virchow, médico y político alemán, famoso por su teoría celular, postuló que “las enfermedades surgen de manera primaria en las células individuales y no en los órganos o tejidos generales”. Se abandonó la teoría humoral, al demostrarse en investigaciones posteriores que esta se había quedado obsoleta y no era viable.

Otro gran descubrimiento de este siglo estuvo a cargo de Louis Pasteur, pionero en la microbiología moderna. Él puso al alcance del ser humano la “Teoría Germinal de las Enfermedades Infecciosas”. A cada enfermedad infecciosa se le asignó una causa, un agente. Abandonando la teoría de la generación espontánea, Pasteur inició (gracias a sus avances) lo que actualmente conocemos como la medicina moderna.

En esta época se definieron con claridad dos términos: letal (que puede causar la muerte) y mortal (que provoca una muerte segura).

Avances Clave del Siglo XX

Gracias al Dr. Alexander Fleming, con el descubrimiento de la penicilina, aparecieron los antibióticos, dando comienzo a la “Era de Oro de la Medicina” o la “Era de los Antibióticos” y de los descubrimientos científicos.

Esto dio comienzo a tres eras sucesivas, marcadas por nuevos y grandes descubrimientos:

  • Era Médica: Grandes descubrimientos bacteriológicos, pensamiento etiopatogénico. Gran expansión de los servicios médico-sanitarios. Éxitos en la curación de enfermedades infecciosas.
  • Era Epidemiológica: Comprensión de la salud/enfermedad desde una perspectiva multicausal/multidimensional. La salud se entiende en función de la interacción de diferentes factores. Nuevo concepto de salud. Investigación de los determinantes de la salud para luchar contra las enfermedades crónicas.
  • Era de Planificación de la Salud: Importancia de la intervención intersectorial sobre los distintos determinantes de la salud. Planificación intersectorial de estrategias de salud para impulsar políticas de prevención y promoción de la salud.

Comenzaron a surgir investigaciones de carácter interdisciplinar. Se comenzaron a proponer diferentes definiciones de salud y enfermedad, como la simplista: “¿Qué es estar sano? No estar enfermo”. Así, a principios del siglo XX, en el año 1905, nació el Trabajo Social en la Salud.

Existen diferentes factores que causan la salud y la enfermedad. Muchos comportamientos pueden generar enfermedad, por lo que se comenzaron a realizar campañas preventivas; sin embargo, al ser algo tan novedoso, la gente apenas les prestaba atención. Con los años, se comprobó que para que estas tuvieran el éxito deseado, era necesario implementar una educación para la salud desde el inicio de la vida, desde la infancia, en la escuela.

La Salud Pública

Es el arte y la ciencia de promover, prevenir, curar y rehabilitar la salud, en un esfuerzo organizado y conjunto de todos los agentes comunitarios para conseguir el máximo nivel de salud y bienestar. Su cometido se lleva a cabo a través de múltiples actividades: saneamiento del medio, educación para la salud, investigación sobre los determinantes de la misma y su distribución (epidemiología), control de las enfermedades transmisibles y no transmisibles, control de los alimentos y la generación de mecanismos sociales que favorezcan la salud de la población y la prevengan de la enfermedad.

Como conclusión de esta primera parte, cabe destacar que todos los sistemas tienden a dirigir su foco de interés hacia la salud; y que la diferencia entre prevenir y promover radica en que prevenir busca evitar la aparición de cualquier tipo de enfermedad, mientras que promover busca elevar el nivel de salud general.

El Trabajo Social Sanitario

Orígenes y Figuras Clave del Trabajo Social Sanitario

El Dr. Richard Cabot fue un médico particular de principios del siglo XX. Se planteó que, además de visitar y atender a sus pacientes, necesitaba de alguien que le ayudara en la labor relacionada con el trato, el diagnóstico y el seguimiento de sus pacientes; alguien que no fuera médico.

El Trabajo Social y la medicina siempre han estado muy ligados, ya que el Trabajo Social se nutre de las técnicas de la medicina.

El Dr. Cabot eligió a Miss Garnet Pelton. Ella era una visitadora voluntaria “médico-social” que le ayudaba a conocer al enfermo y procuraba atender sus necesidades sociales. Atendían a todo el mundo y buscaban recursos sociales para ayudar a quienes llegaban con nuevas enfermedades.

Natalio Kisnerman, graduado en la Escuela de Asistentes Sociales de la Universidad de Buenos Aires, ejerció como tal, impartiendo su saber y avanzando en la materia. Él afirmó: “Durante años de trabajo he podido darme cuenta de que en más del 50% de los casos un tratamiento racional era imposible sin un conocimiento exacto de la situación económica del enfermo y, más aún, de su psicología, de su carácter, de su pasado mental y laboral, de todo lo que había contribuido a colocarlo en su situación presente, a entregarlo a la enfermedad, a la desesperación, a la inquietud, a la pobreza. Mis prescripciones estaban con frecuencia, casi con toda seguridad, fuera del alcance de mis enfermos…” (Cit. Kisnerman, 1988:117). Uno de los problemas que detectaron el Dr. Cabot y Miss Pelton fue que había personas que no seguían o no podían seguir sus prescripciones médicas y, por lo tanto, no mejoraban. Se dieron cuenta de que la medicina no lo era todo; se necesitaba un enfoque más social.

Miss Garnet Pelton sucumbió a una enfermedad que pronto terminaría con su vida, pasando el testigo a Miss Ida Cannon, una enfermera que despertó un gran interés por lo social. Graduada en Sociología, buscó conocer más las dimensiones sociales de la vida. Una vez comprendidas, se graduó en Trabajo Social.

Montó un servicio con visitadoras voluntarias y se convirtió en jefa del departamento del hospital en el que trabajaba. Se dedicó a viajar por estados y países, e impartió su formación en otros lugares para formar a más Trabajadoras Sociales Sanitarias, quienes se fueron incorporando a distintos hospitales. En el año 1918, fundó la “Asociación Americana de Trabajadores Sociales Hospitalarios”.

Funciones Básicas de las Trabajadoras Sociales Sanitarias

Para establecer las diferencias con otras profesiones, se decidió definir cuáles eran exactamente las funciones de las trabajadoras sociales en el ámbito de la medicina:

  • La investigación de los factores psicosociales que generaban enfermedad, con el fin de prever y establecer terapias efectivas.
  • El estudio y diagnóstico social sanitario.
  • La intervención del Trabajador Social Sanitario sobre las necesidades y problemas psicosociales que condicionaban la resolución de la enfermedad.
  • La realización de intervenciones directas o indirectas.

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