Estudios Comparados de Transiciones Democráticas

A. O’Donnell y Schmitter

En su tomo final, Transiciones desde un gobierno autoritario, O’Donnell y Schmitter intentaron extraer conclusiones sobre trece casos. Algunos de estos países se consideran hoy ejemplos de transiciones democráticas exitosas, mientras que otros han sufrido una involución en sus procesos.

En la mayoría de los casos, el impulso a la liberación se origina en el propio seno del régimen autoritario y surge de un conflicto entre quienes pretenden mantener el régimen tal cual y los bandos que buscan iniciar un proceso de liberación con vías para legitimar el régimen.

La liberación del régimen fue, en muchos casos, comparada con una resurrección de la sociedad civil. A pesar de este impulso desde abajo, el papel trascendental de las élites en las transiciones democráticas renace.

B. Peeler

Peeler comparó las experiencias históricas de Colombia, Costa Rica y Venezuela, países que desde 1950 han exhibido una estabilidad razonable en sus instituciones e ilustran posibles modelos de transiciones a la democracia de la tercera ola. Su estudio comparado analiza cómo los acuerdos entre élites contribuyeron a establecer los regímenes democráticos y causaron la convergencia de élites, contribuyendo a su supervivencia.

Según el autor, la consolidación democrática es más probable en países en los que la participación se ha extendido a todas las élites, estableciendo al mismo tiempo alguna forma de control vertical para canalizar las reivindicaciones populares.

C. Linz y Stepan

Linz y Stepan compararon quince países: tres de Europa meridional, cuatro de Sudamérica y ocho de Europa Oriental. Definieron el primer conjunto como «consolidaciones culminadas» y el segundo como «transiciones restringidas», mientras que el tercero, en su opinión, tendría que hacer frente a «recorridos y tareas de máxima complejidad» para consolidar la democracia.

La comparación intenta desarrollar un conjunto de variables más capaces de explicar los diferentes tipos de transiciones democráticas y los distintos modos de consolidación. El conjunto incluye dos macrovariables, dos variables de rango medio y tres variables contextuales. Sin embargo, surge el problema de «demasiadas variables para un universo insuficiente de países», ya que las siete variables no se aplicaban completamente entre los quince países.

Con todo, su comparación arroja algunas conclusiones: las dos variables de mayor impacto son el tipo de régimen anterior y el agente iniciador de la transición. También representa un avance sobre los trabajos anteriores en este campo; por ejemplo, la noción de estabilidad nunca se había empleado de esta forma. Linz y Stepan insistieron en la importancia de las influencias internacionales.

D. Bratton y Van de Walle

Su investigación compara:

• Transiciones democráticas satisfactorias (n=16)
• Transiciones defectuosas (n=12)
• Transiciones bloqueadas (n=12)
• Transiciones descartadas (n=2)

N=42 (máxima región geográfica)

La variable dependiente es si algunos países lograron la transición democrática y otros no.

Los autores dedicaron, por una parte, análisis comparados de variables e históricos, y luego construyeron un modelo completo incorporando las dos primeras variables para explicar la tercera.

Variables clave:

1. Movilización política y protesta
2. Liberalización política y reforma constitucional
3. Elecciones democráticas constituyentes

Conforme a sus resultados, los regímenes con experiencias previas limitadas de participación y competencias políticas son más susceptibles de llevar a cabo procesos de transición democrática. Destacan la importancia de los actores y procesos políticos nacionales por encima de los factores económicos y políticos internacionales.

Estudios de Caso Único en Transiciones Democráticas

A. Foweraker

Foweraker examinó las trayectorias históricas personales de activistas clave de la comarca andaluza del Marco de Jerez y su lucha contra el régimen de Franco en España. En este estudio de casos dentro de un estudio de casos, Foweraker se propuso comprender las formas en que las organizaciones de base y las redes personales contribuyeron a crear los espacios necesarios para la transformación democrática de una sociedad civil incipiente.

La opresión económica en el Marco de Jerez y la represión política del régimen franquista evocaron los «corazones agitados» de los trabajadores que, a través de sus redes personales, el Partido Comunista y, en cierto grado, el sindicato vertical, se organizaron.

El estudio concluye que, después de veinte años de lucha, las personas ampliaron su sentimiento de ciudadanía individual y así transformaron la sociedad civil española.

B. Colomer y Pascual

Colomer y Pascual identificaron a los actores políticos clave en la transición democrática de Polonia y trataron de construir un modelo de la interacción estratégica entre dichos actores durante los años ochenta, usando para ello la teoría de juegos. Colomer y Pascual argumentaban que la transición polaca tuvo dos actores políticos importantes: por un lado, el gobierno polaco controlado totalmente por el Partido Comunista, y por otro, la oposición democrática al gobierno, representada por el nacimiento de Solidaridad.

Mediante la formalización de las opciones y preferencias de los dos actores, consiguieron modelar la secuencia de los eventos históricos.

C. Maxwell

Maxwell elaboró una crónica exhaustiva del movimiento de las fuerzas armadas que derrocó a la dictadura portuguesa, deteniéndose en los problemas inmediatos de gobierno postdictatorial a los que tuvo que hacer frente el nuevo régimen y la subsiguiente consolidación de la democracia.

Maxwell insistió en la necesidad de adoptar una visión más amplia de la transición democrática y de resaltar los rasgos únicos del caso portugués. El relato de esta autora empieza con la aparición de _____ en el siglo XV y termina con la consolidación democrática y la admisión de Portugal en la UE.

Maxwell argumentó que la democracia portuguesa fue fruto de la lucha de los políticos civiles cuya posición moderada los llevó a oponerse al gobierno radical, recibiendo apoyo económico e impulso diplomático de las potencias extranjeras.