22 Jun

Poema de Mío Cid

Este texto constituye, tras las jarchas mozárabes, la más antigua manifestación literaria en nuestra península; ahora bien, si nos limitamos a manifestaciones en Castellano, podemos seguir afirmando que es nuestro texto literario más antiguo. Se conserva en un manuscrito difícil de fechar, puesto que el lugar concreto de la página donde aparece la fecha está muy deteriorado;
parece ser de principios del s XIV y que fue copiado por un tal Per Abat, pero compuesto mucho antes: según Menéndez Pidal, uno de los filólogos que más tiempo ha dedicado a la investigación sobre el Cid, es de hacia 1140; otros investigadores, en cambio, estiman que es de finales del s XII o principios del s XIII (1207).

Se ignora quién fue su autor. Menéndez Pidal, basándose en sus investigaciones sobre la lengua, métrica y hechos históricos presentados en el texto, sostuvo que el Poema es obra de dos autores: uno nacíó en el pueblo soriano de San Esteban de Gormaz ; el otro, en el pueblo, también soriano, de Medinaceli. Parece que el primer autor, más próximo al personaje histórico del Cid y a los hechos que realmente protagonizó, debíó escribir, poco antes de 1120 (el Cid murió en 1099), el cantar del destierro y parte de los otros dos (las bodas y la afrenta de Corpes); en su versificación, recurre a frecuentes cambios de rima, por lo que sus tiradas son cortas. Parece que el texto de este primer juglar no se alejó tanto de los hechos realmente ocurridos. El segundo, el juglar de Medinaceli, habría reformado el Poema primitivo, añadiéndole las partes restantes y los episodios más novelescos; además, construye tiradas de más longitud.Argumento, tema y estructura:El poema exalta la figura del héroe castellano Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid, que, desterrado por el rey
Alfonso VI, marcha de Castilla y conquista la ciudad de Valencia. Posteriormente, a través de sus méritos en la lucha contra los moros, consigue el perdón del rey y termina casando a sus hijas con los infantes de Navarra y Aragón. Esta trama sigue un movimiento de tensión narrativa en el que alternan momentos de fuerte deshonra pública para el Cid, como en el principio, y otros de gran encumbramiento social, como el final.

Así, el tema de la obra es el proceso de engrandecimiento del héroe, que, desde una situación inicial deshonrosa (el destierro), consigue, con su arrojo y valentía, la recuperación de su honra y el máximo prestigio social.

El poema consta de tres partes:

a) Cantar del destierro: nos relata cómo el Cid, consternado, abandona Castilla por orden del rey, se adentra en tierra de moros y consigue sus primeras victorias.

b) Cantar de las bodas: narra la conquista de Valencia, el reencuentro con su familia en dicha ciudad y el casamiento de sus hijas con los infantes de Carrión.

c) Cantar de la afrenta de Corpes: narra el ultraje que sufre el Cid en las personas de sus hijas, humilladas y abandonadas por sus respectivos esposos, y la posterior reparación en las Cortes de Toledo; finaliza el cantar con el anuncio del matrimonio de aquellas con los infantes de Navarra y Aragón.

Métrica: El Poema de Mío Cid presenta una clara irregularidad métrica. Sus versos no están agrupados en estrofas sino en tiradas monorrimas, de extensión variable (la más corta tiene dos versos y la más larga supera los cien). Los versos constan de dos hemistiquios de 6 a 8 sílabas cada uno. La rima es asonante, pero presenta continuas anomalías. Es frecuente el caso de la llamada ‘e paragógica’, arcaísmo que supone la presencia de vocales ‘e’ en posición final de palabra, que tenían los términos en un estado de evolución de la lengua anterior al que ya representa este texto: dolore, razone, señore…

Estilo y valores del texto: los estudiosos han destacado el Realismo de esta obra, un Realismo tanto socio-histórico como geográfico: el Poema refleja fielmente la organización social y las costumbres de la época y, por ello, se convierte en una rica fuente de datos para historiadores y sociólogos: menciona prendas de vestir, cuerpos del ejército, objetos cotidianos… que nos aproximan a la realidad de entonces; cuenta sucesos y menciona personajes que, en su mayoría, existieron; describe con exactitud los distintos escenarios en los que transcurre la acción (los nombres de los lugares se corresponden fielmente con la realidad, en especial, algunos parajes próximos a Medinaceli y San Esteban de Gormaz). No obstante, el carácter hiperbólico con que se ofrecen las virtudes del héroe (su valentía, honestidad, bondad… fuera de lo normal), resta cierto Realismo a lo narrado.

Asimismo, en el Poema de mio Cid se refleja el espíritu de todo un pueblo, involucrado en una empresa común, la Reconquista, y que dota al personaje protagonista de cualidades heroicas pero, al tiempo, muy humanas: amor a la familia, lealtad incondicional al rey, generosidad, religiosidad, sentido democrático…).

podemos dividir los principales rasgos de estilo en dos grandes ámbitos:

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