02 Sep

Este texto pertenece a Nietzsche, a su obra «El crepúsculo de los ídolos», a un fragmento titulado Historia de un error.

En él, Nietzsche afirma que existe un error fundamental en toda la historia de la filosofía: el creer en un supuesto «mundo verdadero«, que en realidad es la nada, frente al «mundo aparente» que nos muestran los sentidos. Por eso Nietzsche descubre que el mundo considerado como verdadero en toda la historia de la filosofía es un completo error: desde el mundo de las ideas platónicas, pasando por el mundo celeste del cristianismo o el noúmeno kantiano, llegamos a la concepción positivista de lo real que desbanca esta concepción; pero, según Nietzsche, también es necesario rebasarla destruyéndola y eliminando esta distinción. Así, llegamos a la conclusión
de que no existe el mundo verdadero y el mundo aparente, sino que sólo existe este mundo que nos muestran los sentidos donde reina el devenir (el cambio).


1.

Elmundoverdadero-yoplaton soi la verdad

)En este texto en concreto la idea principal que aparece es la crítica de Nietzsche a ese «mundo verdadero» o mundo de las ideas platónicas al que llega el sabio, el piadoso y virtuoso. Recordemos que, para Platón, sólo quien asciende al mundo de las Ideas y conoce la Idea del Bien puede actuar virtuosamente. Y este es, según Nietzsche, el comienzo del error de la filosofía occidental: pues el acceso a ese «mundo verdadero de las Ideas» implica la renuncia a este mundo de apariencias que nos muestran los sentidos. Así, el mundo real del devenir es puesto en función de un falso mundo, el mundo de las Ideas perfectas, eternas e inmutables.



2.elmundo verdader-penitencia,cristiana)

 En este texto en concreto la idea principal que aparece es que ese «mundo verdadero» del platonismo se convertirá posteriormente en el «mundo celeste» del cristianismo, un mundo verdadero considerado como recompensa para el piadoso.

Así, Nietzsche afirma que el platonismo se funde con el cristianismo y la relación entre el hombre y el otro mundo cambia, pues ya no accede a él mediante la razón, sino por la fe. De esta manera, el mundo verdadero se aleja, se hace inaccesible «ahora», y es prometido tras la muerte al que hace penitencia, aunque para Nietzsche, es simplemente una promesa nunca cumplida. La idea se vuelve «más sutil, más capciosa, más inaprensible».

3.El mund verdad,imperativo,konisburguen)

En este texto en concreto la ¡dea principal que aparece es que la filosofía kantiana planteó el problema del conocimiento de ese «mundo verdadero platónico-cristiano», pero no lo eliminó, pues en cuanto pensado, seguía siendo un consuelo.

Kant demostró que el límite de nuestro conocimiento es la experiencia sensible y, por tanto, el mundo inteligible es indemostrable e imprometible. Pero, con Kant, este mundo no desaparece totalmente, pues el hombre en cuanto ser moral necesita creer en la existencia de Dios y así ese «otro mundo» sigue siendo un consuelo. Por esto, según Nietzsche, se sigue manteniendo el «sol», símbolo de la Idea suprema del mito de la caverna de Platón. Pero la Idea se ha debilitado. Al principio era objeto directo del conocimiento (Platón), luego sólo prometida (cristianismo) y ahora es sólo un postulado de la razón práctica, un objeto de «fe racional».

4mund verdad,desconocid,gallo)En este texto en concreto la idea principal que aparece es que con el positivismo ese «mundo verdadero», inventado por el platonismo y difundido por el cristianismo, aparece como lo inasequible y lo desconocido. Por ello, para los positivistas, ese mundo, en cuanto desconocido, ni nos consuela ni nos obliga.

El positivismo toma la idea de Kant de que el conocimiento no puede ir más allá de la experiencia sensible y el «mundo verdadero» más allá de los sentidos queda como algo inalcanzado y desconocido. Y, por tanto, ya ni obliga, ni consuela, ni redime. Según Nietzsche, este es el primer bostezo de la razón. Comienza a despejarse la oscuridad creada por Platón, y la razón despierta de su sueño dogmático.


5mundverdader-espiritulibre)

En este texto en concreto la idea principal que aparece es la destrucción total de ese «mundo verdadero» platónico-cristiano al darnos cuenta de que es inútil, vacuo, falso.

Es la época en que vive Nietzsche, que comienza a hacer ver que la historia del mundo «verdadero» es la historia de un error.



Ante la inutilidad de la Idea (de ese «mundo verdadero» inventado^ que ni siquiera obliga, se toma la decisión de eliminarla. Este es el nihilismo activo, que supone la destrucción de los valores tradicionales. Para Nietzsche, el nihilismo es un estado intermedio, un tiempo de crisis en el que los ídolos han caído y el hombre no sabe donde agarrarse. Nietzsche lo ve en su doble aspecto: ocaso y amanecer:

El ocaso viene representado por la «muerte de Dios» y el amanecer viene dado en esa transmutación de valores (que supone la superación del nihilismo)

y en las nuevas intuiciones de Nietzsche (la Voluntad de Poder, el Eterno Retomo y el Superhombre).

Retoma el buen sentido y la jovialidad, es decir, la asunción de que el único mundo que hay es éste en que vivimos y que el otro, el mal llamado «verdadero», no era más que una carga: «Ruido endiablado de los espíritus libres«. Es el momento del hombre-león que quiere conquistar su libertad, arrojar los antiguos valores y poder decir «yo quiero». Es un paso necesario para llegar al Superhombre, que tiene capacidad creadora ybusca la afirmación de sí mismo.

6hemoseliminad-zaratrustra.)



En este texto en concreto la idea principal que aparece es el comienzo Zaratustra, que supone el punto culminante de la humanidad, ya que al eliminar ese «mundo verdadero» platónico-cristiano y al darnos cuenta del error de la tradición eliminamos también el «mundo aparente» porque ya no lo es.

Nietzsche está haciendo referencia a su obra cumbre: Así habló Zaratustra (1883). Pues toda la metafísica occidental se había construido sobre un «mundo verdadero» imaginario, pero que nos servía para orientarnos en el mundo de lo sensible y tras haber eliminado el «mundo verdadero» ya no sabemos qué hacer en el «aparente». En este momento, surge Zarathustra (incipit

Zaratustra) con su doctrina del superhombre, que vive la voluntad de poder y abraza el eterno retorno. Es el momento del fin del error más largo, el momento de la verdad: La afirmación del eterno retorno.

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